"No es tolerable que el imperio de la indecencia domine en la pol¨ªtica"
Emilio Lled¨®. Fil¨®sofo. Acad¨¦mico. Autor de Memoria de la ¨¦tica. En esta conversaci¨®n cuenta su estado de ¨¢nimo ante el momento que vivimos.
Pregunta. Este es un pa¨ªs "entristecido y luminoso", dec¨ªa usted el domingo en EL PA?S Semanal.
Respuesta. Es un pa¨ªs mucho m¨¢s decente y luminoso por la sabidur¨ªa de la gente. Esta sabidur¨ªa tiene que ponerse en pr¨¢ctica. No podemos dejar el pa¨ªs en manos de una pol¨ªtica con una parte regida por oportunistas y por indecentes. Que el imperio de la indecencia domine en la pol¨ªtica es intolerable; ese imperio es fruto del dominio de ciertas oligarqu¨ªas que piensan que lo ¨²nico que hay que hacer es ganar dinero y crear ideolog¨ªas aptas para que esa oligarqu¨ªa siga con poder...
"Poner t¨¦cnicos al frente de la econom¨ªa es un error, y se paga"
"Me preocupa una tercera guerra europea, una guerra con¨®mica"
P. Usted cita a Machado hablando del pa¨ªs luminoso...
R. S¨ª, hablaba del pa¨ªs empobrecido por una clase media entontecida por la ignorancia y por el pragmatismo eclesi¨¢stico. Contra eso opon¨ªa esa luminosidad, la decencia popular... Eso no lo podemos corromper.
P. ?La soluci¨®n?
R. La soluci¨®n no la veo m¨¢s que en la cultura. Cultura entendida como educaci¨®n en la libertad, en la verdadera sabidur¨ªa... Me he quedado sorprendido por el anuncio que he escuchado en el radio de una universidad que dec¨ªa que dispon¨ªa de cafeter¨ªa de lujo y pistas de p¨¢del... Es vergonzoso que esto sea posible y que se anuncie como atractivo para los j¨®venes. Esa actitud es la cat¨¢strofe para un pa¨ªs.
P. La campa?a electoral ha coincidido con dos cambios de gobierno en Europa, ambos a favor de personalidades del mundo econ¨®mico. ?C¨®mo lo ha vivido?
R. En La Rep¨²blica de Plat¨®n y en La pol¨ªtica de Arist¨®teles se dice que la salvaci¨®n de los Estados, de los pueblos y de las naciones se da a trav¨¦s de la decencia y de la cultura. Esta no es una frase antigua, vale hoy. ?C¨®mo va a defender lo p¨²blico alguien que s¨®lo est¨¢ pensando en lo privado y en lo de sus "amigantes"? Y me gusta esa palabra, "amigantes", porque consuena con mangante.
P. Este pa¨ªs es como un enfermo sometido a una enorme operaci¨®n descarnada. ?Con qu¨¦ ¨¢nimo lo ve usted?
R. Lo que percibo es desconcierto y dolor. Quiz¨¢ no mucho dolor, porque nos est¨¢n haciendo esta operaci¨®n con anestesia.
P. ?En qu¨¦ consiste la anestesia?
R. En que lo que prima en este mundo es la econom¨ªa, que hay que solucionarla y que por lo tanto hay que poner t¨¦cnicos al frente de esa econom¨ªa. Estos t¨¦cnicos salvadores han sido abogados o economistas de grandes empresas puramente econ¨®micas, empresas que s¨®lo persiguen el poder econ¨®mico. Es una equivocaci¨®n. A la larga, y no a la muy larga, m¨¢s bien a la corta, se paga.
P. Una de las lesiones que presenta ese cuerpo sometido a una operaci¨®n quir¨²rgica ha sido el proyecto de Educaci¨®n para la Ciudadan¨ªa. ?C¨®mo ha visto la burla a la que se someti¨® esa iniciativa?
R. Propia de aut¨¦nticos ignorantes y aprovechados. La Educaci¨®n para la Ciudadan¨ªa es una forma de crear ciudadanos libres, pero las sectas no pueden aceptar que haya ciudadanos libres. Educaci¨®n para la Ciudadan¨ªa, o como la llamen, provoca la educaci¨®n libre y laica y es uno de los elementos fundamentales del progreso democr¨¢tico.
P. La pol¨ªtica tambi¨¦n est¨¢ gravemente lesionada. ?Qu¨¦ consecuencias tiene?
R. La consecuencia m¨¢s grave es la de ir alimentando poco a poco el imperio de una dictadura, una dictadura econ¨®mica. Conf¨ªo en que ya no sea posible una dictadura militar, pero hay formas de dictadura que sin disparar tiros dominan tambi¨¦n. Creo profundamente que el desprecio a la pol¨ªtica es un error garrafal porque es un desprecio interesado. Lo que quieren hacer es una pol¨ªtica determinada donde nadie pueda hacer pol¨ªtica.
P. El pol¨ªtico sale a¨²n peor parado que la pol¨ªtica...
R. La pol¨ªtica es la funci¨®n esencial de la vida colectiva, y el pol¨ªtico es algo esencial tambi¨¦n en la direcci¨®n y en la orientaci¨®n de esa vida colectiva. Pero tiene que ser honrado y no ponerse una m¨¢scara, sino dar la cara —eso tambi¨¦n lo dice Machado—. Dar la cara por unos ideales que ese partido debe defender de verdad. El ataque a la pol¨ªtica, la burla no digamos, se nos clava en la cabeza como si todos los pol¨ªticos fueran unos sinverg¨¹enzas. Y eso es un error... La pol¨ªtica es el m¨¢s arquitect¨®nico de los saberes, dec¨ªa el gran te¨®rico cl¨¢sico de la pol¨ªtica, porque los comprende a todos... Burlarse de la pol¨ªtica tiene algo de dictatorial, de tir¨¢nico... Muchas veces me digo, no s¨¦ si con injusticia, que estamos en una oligarqu¨ªa democr¨¢tica y que el franquismo ha seguido bajo distintas formas, con intereses olig¨¢rquicos.
P. ?D¨®nde lo ve?
R. Antes de decirlo, d¨¦jeme decir que este pa¨ªs ha avanzado. F¨ªjese en Salteras, al lado de Sevilla; ah¨ª iba yo en los a?os 40. El avance ha sido espectacular... El pa¨ªs ha mejorado en cultura, en decencia... Creo que el franquismo est¨¢ de capa ca¨ªda, pero tiene todav¨ªa fuerza en ciertas manifestaciones de algunos pol¨ªticos, con una ideolog¨ªa que coincidir¨ªa con la se mantuvo con Franco...
P. ?En qu¨¦ lo ve?
R. En la defensa de la ense?anza privada, en el descr¨¦dito de lo p¨²blico, en el desprecio de la igualdad de oportunidades... ?D¨®nde est¨¢ la libertad si hay desigualdad?
P. ?Y Europa no es parte de ese cuerpo enfermo?
R. Ha sido una luz, un poder intelectual... Por eso me preocupa que ahora pueda surgir una tercera guerra europea solapada, ya sin ca?ones, una guerra econ¨®mica. Un nuevo af¨¢n de dominio, solapado, porque eso son las guerras, lo que destruir¨ªa las posibilidades que sin duda se abren para una Europa unida...
P. Hablaba de un pa¨ªs entristecido y luminoso. ?Hay una luz?
R. Creo que en nuestro pa¨ªs hay una sabidur¨ªa latente y emergente que me llena de optimismo, pero no podemos permitir de ninguna manera que se corrompa el pol¨ªtico. No podemos votar a los corruptos a no ser, y eso ser¨ªa la muerte de un pa¨ªs, que nosotros estemos ya tan corrompidos que no s¨®lo no los distingamos sino que queramos que el corrupto mande para engancharnos a su chaqueta. Ser¨ªa catastr¨®fico.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.