"La gente no est¨¢ viendo la trascendencia del 20-N"

Secretario general del Grupo Socialista en el Congreso esta legislatura, Eduardo Madina (Bilbao, 1976) quiere seguir si¨¦ndolo con su partido al frente del Gobierno de Espa?a. V¨ªctima de ETA en 2002, considera fundamental un triunfo del PSOE el domingo para "consolidar" en Euskadi el escenario de paz.

Pregunta. Amaiur y PNV o PP. ?Qu¨¦ partido es el verdadero rival de los socialistas vascos en las generales?

Respuesta. El PP. Nuestro objetivo es que siga habiendo un Gobierno socialista y el domingo solo hay dos opciones: Mariano Rajoy o Alfredo P¨¦rez Rubalcaba. Tengo mucho respeto por el PNV y sus diputados, pero en estas elecciones se trata de elegir entre un Gobierno de derechas y de pasos atr¨¢s o uno de izquierdas que mira al futuro. Creo que la ciudadan¨ªa vasca es consciente de que se est¨¢ jugando esto y no si los nacionalistas tienen grupo en el Congreso.

"EL PSOE ha tenido con Euskadi el mayor ejercicio de solidaridad posible"

"Nos preocupa el entorno de Rajoy a la hora de asentar el escenario de paz"

"El eje ideol¨®gico del PP est¨¢ en Madrid, donde quien manda en realidad es Aznar"

"El bienestar social, los derechos y una nueva econom¨ªa es lo que est¨¢ en juego"

P. ?Saldr¨¢ perjudicado Euskadi si no lo consiguen? No son pocos los logros que han negociado en la ¨²ltima legislatura.

R. Ser¨ªa negativo que no ganara el PSOE, que es quien ha puesto sus 169 diputados, junto a los seis del PNV, para desarrollar el Estatuto, aumentar las inversiones en Euskadi y acabar con el terrorismo. Ha sido el mayor ejercicio posible de solidaridad de un conjunto hacia una parte. En este caso, del Estado hacia Euskadi. Creo que es una inversi¨®n de futuro apostar por los socialistas vascos.

P. ?Cree posible ganar al PNV en Bizkaia?

R. Ya ganamos en 2008. No es el PNV quien me da miedo. Mi preocupaci¨®n es parar la posible vuelta al Gobierno de una derecha espa?ola profundamente antisocial, que quiere dar pasos atr¨¢s en materia de derechos de ciudadan¨ªa, que desconf¨ªa de la idea de Euskadi, y que no tiene, ni de lejos, las mismas formas de interpretar la convivencia y el futuro que tenemos nosotros. Eso es lo que est¨¢ en juego el 20 de noviembre.

P. Pero las perspectivas no son buenas.

R. Las encuestas saben mucho mejor cuando se les da la vuelta. Est¨¢ claro que se han hecho muchas cosas mal, que nos han llevado a la actual situaci¨®n econ¨®mica y a los niveles de paro. En el conjunto de Europa. Pero las f¨®rmulas que trae Rajoy en su cartera, en su ausencia de programa, es justo lo que este pa¨ªs no merece. Estamos ante unas elecciones de trascendencia hist¨®rica y que no todo el mundo est¨¢ sabiendo ver en su volumen pleno. Hay quien ha decidido aprovechar la crisis para poner en duda el sistema de vida que decidimos darnos los europeos desde la Segunda Guerra Mundial. Que los ciudadanos piensen bien a qui¨¦n votan.

P. Usted dijo que nunca iba a utilizar electoralmente el PSOE la lucha contra ETA, pero s¨ª se ha esgrimido en campa?a.

R. No hemos pedido un solo voto por luchar contra ETA ni lo vamos a hacer, pero s¨ª hay dos formas de interpretar lo que Euskadi necesita de cara al futuro. Y nos preocupan mucho los entornos que rodean a Rajoy. Nosotros sabemos lo que hay que hacer. Hemos sabido luchar para que ETA termine, sabemos qu¨¦ hay que hacer para estabilizar la paz en el Pa¨ªs Vasco y fomentar la convivencia en una sociedad plural. Pensamos que es un elemento m¨¢s de lo que est¨¢ en juego. El futuro de este pa¨ªs, en parte, pasa por ah¨ª.

P. ?Ser¨ªa peligrosa una mayor¨ªa absoluta del PP?

R. Y una mayor¨ªa simple del PP. En t¨¦rminos de bienestar social, de derechos de ciudadan¨ªa, de modelo econ¨®mico y de futuro de Euskadi. Rajoy no es el problema ni la soluci¨®n. Rajoy no es nada. La factor¨ªa ideol¨®gica del PP, su centro de gravedad, est¨¢ en el PP de Madrid, donde Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar manda con Esperanza Aguirre y los grupos m¨¢s a la derecha de, probablemente, uno de los partidos m¨¢s de derechas que tiene toda Europa.

P. ?Abocar¨ªa a una legislatura marcada por la crispaci¨®n?

R. Siempre que la pelota de la pol¨ªtica pasa por el pie del PP aparece la bronca. Han dicho de nosotros que somos unos traidores a los muertos, que somos colaboradores con banda armada... No han parado de gritar desde que no supieron perder en 2004 y me da por pensar que un partido que no sabe perder tampoco sabe ganar.

P. ?Por qu¨¦ hay que votar socialista el domingo?

R. Para el mantenimiento de nuestro modelo de bienestar social. Para no permitir un Gobierno del PP que privatice la sanidad y modifique la educaci¨®n p¨²blicas. Para defender los avances en materia de derechos de ciudadan¨ªa que se han dado estos ¨²ltimos a?os, que han sido los m¨¢s avanzados de Europa y se han impulsado en un tiempo r¨¦cord. Votar socialista supone tambi¨¦n trabajar por un nuevo modelo de crecimiento econ¨®mico basado en la innovaci¨®n y el conocimiento.

P. ?Y no ha habido tiempo de impulsarlo hasta ahora?

R. Lo venimos haciendo desde que accedimos al Gobierno en 2004. Volver a colocar un ladrillo tras otro, bajar impuestos a las empresas o rebajar salarios a los trabajadores son medidas que forman parte de un modelo agotado, que es el que pretenden Aznar y Rajoy.

P. Las perspectivas electorales son ligeramente mejores que en las municipales y forales de mayo. ?Pueden servir las generales de impulso para las auton¨®micas de 2013?

R. Son unas elecciones muy importantes, que van a marcar el futuro de este pa¨ªs desde muchos puntos de vista. Y parte de lo que el futuro traiga condicionar¨¢ sin ninguna duda el resultado de las auton¨®micas. Lo que tengo claro es que nunca le ha ido mejor a este pa¨ªs que con dos Gobiernos socialistas.

P. ?En qu¨¦ sentido?

R. Hemos terminado con ETA e invertido m¨¢s que nunca en un pa¨ªs que consideramos estrat¨¦gico dentro del Estado. Estamos mejor que nunca en t¨¦rminos pol¨ªticos y sociales, y la mitad de mal que el resto de Espa?a en clave econ¨®mica. Tenemos mucho futuro por delante y parte del mismo se decide en las pr¨®ximas elecciones generales. Cada decisi¨®n electoral de la sociedad marca. Para lo bueno, pero tambi¨¦n para lo malo.