"El sufrimiento es universal"

Uri Caine (Filadelfia, 1956) es un ciudadano del mundo. Su carrera pian¨ªstica lo ha llevado del jazz al folk, de versionar con inteligencia las oberturas de las ¨®peras de Wagner a componer sus propias piezas con un particular eclecticismo. "Siempre quise ser un pianista de jazz, pero crec¨ª con la m¨²sica cl¨¢sica, con las obras de Chopin. Luego me di cuenta de que lo que quer¨ªa era experimentar con todas las m¨²sicas", explica Caine, autor de las Lamentaciones nocturnas de Jerem¨ªas que se podr¨¢n escuchar el pr¨®ximo lunes en el Auditorio Nacional.

No es tarea f¨¢cil poner banda sonora a la destrucci¨®n de la ciudad sagrada. Jerusal¨¦n, encuentro a¨²n hoy de las tres grandes religiones monote¨ªstas, fue devastada en el siglo VI antes de Cristo durante la invasi¨®n de la urbe por Nabucodonosor II. Ante la visi¨®n de una Jerusal¨¦n que acaba de vivir su propio Apocalipsis, Jerem¨ªas observa una ciudad hecha cenizas mientras implora lo que despu¨¦s ser¨¢n sus Lamentaciones. "Mis padres eran americanos, crec¨ª leyendo la Biblia y he de admitir que me gusta la poes¨ªa que hay en ella", explica el pianista, que no es capaz de definir el espect¨¢culo que ha creado. "Es la m¨²sica de tres tradiciones. Una m¨²sica que engloba varias m¨²sicas", comenta.

Tres tradiciones porque en esta ocasi¨®n ejercen de profetisas tres cantantes que representan a esas m¨²sicas lejanas. Los primeros compases los arranca de la partitura Cristina Zavalloni, una vers¨¢til cantante cl¨¢sica que usa el hebreo para expresar lo que la leyenda atribuye al profeta Jerem¨ªas. Del otro lado del mundo y paisana de Caine, la cantante de soul Barbara Walker ser¨¢ la encargada de transmitir en ingl¨¦s la desolaci¨®n del pueblo israelita. La tercera cantante es Carmen Linares: un capricho de Caine, un gesto m¨¢s que demuestra el romance al que est¨¢n predestinados el jazz y el flamenco.

"Uri quer¨ªa hacer un trabajo sobre las Lamentaciones con tres voces, y quer¨ªa que el flamenco estuviese presente", explica la cantaora, que interpreta peteneras y ton¨¢s en castellano para dar voz al profeta. Las tres cantantes han trabajado por separado: no interpretan juntas m¨¢s que en el ensayo general. "Somos completamente diferentes, pero tenemos un sentimiento com¨²n", explica Linares. La artista resalta la labor de Jos¨¦ Ram¨®n Ripoll, que se ha encargado de transformar en poes¨ªa la ardua letan¨ªa de Jerem¨ªas. "Ha hecho que los textos encajen con el flamenco pero sin perder su significado original", comenta.

Linares y Caine se conocieron hace cuatro a?os en Granada. El pianista se hizo amigo de la familia y encontr¨® en ella la "fuerza y pasi¨®n que buscaba". La cantaora vio en el de Filadelfia un m¨²sico abierto, "con un gran respeto por otras culturas y el flamenco". Y a pesar de que las Lamentaciones ya han sido objeto de veneraci¨®n para otros compositores anteriores, entre ellos Stravinski, Caine vio en el texto b¨ªblico "un lamento lleno de enfado y tristeza".

En la obra del pianista hay m¨²sica antigua, la del prestigioso grupo Il Suonar Parlante -tocan con una t¨¦cnica que imita las voces humanas- dirigido por Vittorio Ghielmi. Otro italiano, el clarinetista bajo Achille Succi, les acompa?a para poner la nota de contraste. Y, por supuesto, Caine al piano.

En la Jerusal¨¦n de la visi¨®n de Jerem¨ªas, la destrucci¨®n se ha llevado por delante el templo de Salom¨®n y ha condenado a los israelitas a una nueva traves¨ªa por el desierto. Y llega en un momento en el que una crisis global provoca nuevos destierros en diferentes direcciones en busca de una vida mejor.

"El sufrimiento es universal", explica el pianista. Carmen Linares, que apoya esta otra visi¨®n de la obra, completa: "El mundo est¨¢ unido. Una pena que sea por las desgracias: unidos ante el sufrimiento".

Las lamentaciones nocturnas de Jerem¨ªas. Uri Caine e Il Suonar Parlante. Lunes 21, en el Auditorio Nacional (Pr¨ªncipe de Vergara). Entradas: de 4 a 15 euros.