Duros ajustes por delante

La lectura en clave gallega de las elecciones generales puede conducir a lo m¨¢s f¨¢cil -constatar que arrasa el PP y que el BNG no aprovecha el desgaste del PSOE- pero quiz¨¢ sea m¨¢s pr¨¢ctico y de inter¨¦s general ir construyendo un discurso gallego ante la gesti¨®n de la crisis que har¨¢ el conservador Mariano Rajoy, m¨¢xime cuando el triunfo abrumador del PP, el hundimiento del PSOE y la par¨¢lisis del BNG desatan las especulaciones sobre un posible adelanto de los comicios auton¨®micos previstos para 2013. Esto es como lo de los mercados, que no van a dejar de recibir a Rajoy con subidas de la prima de riesgo y ca¨ªdas en Bolsa por arte de magia, sino cuando vean medidas financieras, laborales y presupuestarias. Toca hacer deberes.

Feij¨®o ya tiene hechos en el PPdeG todos los deberes que han de afrontar PSdeG y BNG

Parece evidente que cuanto m¨¢s tarden en celebrarse las elecciones gallegas mayor ser¨¢ el tiempo de exposici¨®n del PP y de Feij¨®o a una dura pol¨ªtica de ajustes que no portar¨¢n precisamente los Reyes Magos. La soluci¨®n europea, si llega, ser¨¢ posterior al ajuste espa?ol, que, dado el calado de las medidas necesarias, probablemente requiera dos a?os muy duros. Es verdad que, tras el 20-N, el PP de Galicia parte de una gran ventaja y que podr¨ªa despreocuparse de un an¨¢lisis tan interesado, pero no lo es menos que el clima pol¨ªtico de los populares puede empeorar con la crisis, adem¨¢s de tratarse de elecciones de distinta naturaleza. En buena l¨®gica, PSdeG y BNG deber¨ªan ir prepar¨¢ndose a fondo para otras elecciones el a?o que viene. Por si acaso.

A todo esto, el pretendido desgaste del Gobierno de Feij¨®o, forzado a algunos recortes y con luces y sombras en su gesti¨®n, no detuvo el imparable avance del PP en Galicia. Al contrario, su porcentaje de votos mejor¨® de manera considerable la media de Rajoy en Espa?a -52,5% frente al 44,6%-, si bien este dato no es nuevo: ya en las generales del 2000 los populares hab¨ªan alcanzado con Aznar proporciones que hasta entonces solo estaban al alcance de Fraga en las elecciones auton¨®micas de los a?os noventa, por encima del 53% de los votos. Feij¨®o demuestra as¨ª que no es un l¨ªder pasajero, sino que es el gestor de aspecto moderno de un gran proyecto pol¨ªtico de amplia base popular. Digamos que Feij¨®o tiene hechos los deberes que socialistas y nacionalistas a¨²n deben hacer con el tiempo contado y que, adem¨¢s, goza del plus que, hoy por hoy, supone tener como primo de Zumosol a "un se?or de Pontevedra", seg¨²n la evocadora definici¨®n que hizo Xos¨¦ Hermida de Rajoy.

Los perjudicados por esta situaci¨®n son el PSdeG y el BNG, que apenas suman el 39% de las papeletas, frente a un PP que fue la lista m¨¢s votada en 307 de los 315 ayuntamientos de Galicia. Peor a¨²n, socialistas y nacionalistas ni siquiera se trasvasan votos cuando los pierden. As¨ª, el descalabro del PSOE en 2000 le hab¨ªa permitido subir a los nacionalistas del 12% al 19% de los votos emitidos con respecto a 1996, lo cual ahora no se ha dado, al quedarse en el 11,25%. Y si el an¨¢lisis lo hacemos en cifras absolutas vemos que el n¨²mero de sufragios -306.268 en 2000 frente a 183.279 en 2011- queda por debajo, en casi 125.000 votos, de la cota alcanzada por los nacionalistas en los tiempos de Aznar. En 2000 Beiras hab¨ªa bromeado con una frase -"menos mal que nos queda Portugal"- que ahora, viendo el lamentable estado del pa¨ªs vecino, ya ni sirve para Guillerme V¨¢zquez.

Los socialistas gallegos quedan a la espera de su congreso federal en febrero, al que acudir¨¢n con un caudal de votos similar a la media, es decir, por debajo del 30%. Hay quien compara estos niveles con el PSOE del 77, pero al menos entonces el partido socialista ten¨ªa un l¨ªder carism¨¢tico que se ve¨ªa que iba a m¨¢s, Felipe Gonz¨¢lez, y un programa socialdem¨®crata que el propio Gonz¨¢lez reajust¨® en la clave europea de su ¨¦poca. Hoy da la impresi¨®n de que ni hay l¨ªder ni programa, pero por la misma raz¨®n cuesta pensar que algo vaya a ir a peor en un partido de su dimensi¨®n hist¨®rica y pol¨ªtica. Si de aqu¨ª a las elecciones gallegas el PSOE endereza su rumbo, el PSdeG tambi¨¦n podr¨¢ subirse a esa ola. De lo contrario, m¨¢s le vale construir una alternativa propia, pegada al pa¨ªs. La falta de realismo y de rigor atribuida al derrotado Zapatero no deber¨ªa formar parte de la agenda de un pol¨ªtico experimentado y curtido en mil batallas como Pachi V¨¢zquez.

@J_L_Gomez