El tranv¨ªa de la discordia

Corr¨ªa el a?o 2004 cuando un alcalde llamado Tom¨¢s G¨®mez tuvo una visi¨®n: convertir¨ªa su ciudad, Parla, en un ejemplo de urbanismo y transporte limpio. Esto ¨²ltimo lo lograr¨ªa sustituyendo las l¨ªneas de autobuses por un moderno tranv¨ªa que conectar¨ªa todos los barrios de la urbe con la estaci¨®n de cercan¨ªas. El tranv¨ªa se convirti¨® en el fondo fijo de las fotos de G¨®mez y tambi¨¦n en el s¨ªmbolo de su gesti¨®n. En 2007 revalid¨® su puesto con el 74,43% de los votos. Fue el alcalde m¨¢s votado de Espa?a.

Este martes, el tranv¨ªa de Parla dej¨® de andar. El Ayuntamiento le debe a la empresa que lo explota y lo mantiene casi 50 millones y esta ha dicho que hasta aqu¨ª hemos llegado. Tras las negociaciones se logr¨® que ayer por la tarde volviera a circular, pero no hay dinero y los sue?os de grandeza del socialista G¨®mez han resultado ser un regalo envenenado para Parla, municipio de 120.000 habitantes al sureste de Madrid, cuyo tranv¨ªa es deficitario y se lleva una parte no peque?a del presupuesto municipal.

Pero esta historia tiene m¨¢s aristas que el despilfarro y la manida crisis. Ya desde el principio, este municipio tan socialista tuvo que v¨¦rselas con la Administraci¨®n auton¨®mica, en manos de Esperanza Aguirre y de la entonces consejera de Transportes, una tal Mar¨ªa Dolores de Cospedal, que en 2005 ya le pon¨ªa reparos al proyecto de G¨®mez neg¨¢ndose, seg¨²n este, a aportar los 18,9 millones que costaban los vagones. Tom¨¢s G¨®mez, tras su fulgurante ¨¦xito electoral, se convirti¨® en el secretario general de los socialistas de Madrid. Es el l¨ªder, por tanto, de la oposici¨®n y ya no es alcalde de Parla, sino la piedra en el zapato de Aguirre.

El alcalde de Parla, el tambi¨¦n socialista Jos¨¦ Mar¨ªa Fraile, se ha encerrado esta semana en la sede del Gobierno regional para exigir que cumpla sus deberes financieros con el tranv¨ªa. El Ejecutivo de Aguirre se encoge de hombros. No es un transporte interurbano, dice. Es un problema de Parla. Fraile alega que la ciudad qued¨® al margen del tren ligero y las l¨ªneas de metro. Cierto, pero Parla lider¨® un proyecto cuyo coste se dispar¨® hasta los 129 millones y dio alas a G¨®mez, seg¨²n el cual el tranv¨ªa crear¨ªa "nuevos espacios de convivencia".

No pod¨ªa estar m¨¢s equivocado.