El 'pistolero de Olot' pide perd¨®n a las familias de sus v¨ªctimas
El juicio no aclara las causas de los cuatro asesinatos
"El destino ha querido que hoy se cumpla el aniversario de las muertes. Si los familiares de Pere Puig quieren verle, pueden hacerlo en la c¨¢rcel. A las familias de las v¨ªctimas solo les queda ir al cementerio". As¨ª, con esta contundencia, acab¨® ayer el fiscal sus conclusiones finales en el juicio contra el pistolero de Olot. El ministerio p¨²blico mantiene la pena de 80 a?os de c¨¢rcel para Puig, 20 por cada uno de los asesinatos cometidos el 15 de diciembre del a?o pasado.
El acusado, que permaneci¨® callado durante la mayor parte del juicio, hizo ayer una r¨¢pida y concisa declaraci¨®n: "Lo siento mucho y pido perd¨®n a las familias". Su defensa reconoci¨® los cuatro asesinatos y solicit¨® para ¨¦l 30 a?os de c¨¢rcel, 50 menos que los que pide el fiscal.N¨²ria Mas¨®, la abogada defensora, solicit¨® al jurado popular que le rebaje la pena por haber confesado -se entreg¨® a la polic¨ªa y relat¨® minuciosamente la secuencia de los cr¨ªmenes- y por ejecutar los asesinatos en un estado de alteraci¨®n mental.
"Un a?o despu¨¦s hay una pregunta que sigue sin respuesta: ?por qu¨¦ lo hizo?", exclam¨® Carles Monguilod, uno de los abogados de la acusaci¨®n particular. "Hasta una explicaci¨®n ha negado el se?or Puig a las familias".
Puig mat¨® a su jefe, al hijo de este y a dos empleados de banca. Para el fiscal, esta pregunta tiene una respuesta sencilla: "Pere Puig es un se?or cruel y una mala persona que no tiene respeto alguno por la vida de los dem¨¢s". El fiscal se bas¨® en las declaraciones de los psiquiatras forenses del Instituto de Medicina Legal de Catalu?a para concluir que el acusado no tiene ninguna enfermedad ni trastorno mental y, por tanto, se le debe aplicar la pena m¨¢xima. Tampoco considera que se le pueda aligerar la pena por confesar sus cr¨ªmenes, ya que cuando Puig se entreg¨® al salir de la sucursal bancaria donde acababa de matar a dos personas, la polic¨ªa ya le estaba buscando y le ten¨ªa identificado. Adem¨¢s, existen numerosos testigos y pruebas que le sit¨²an como autor de los cr¨ªmenes.
La defensa, que hasta este momento ped¨ªa absoluci¨®n del acusado -una formalidad dado que Puig se ratific¨® en las declaraciones inculpatorias que hizo durante la instrucci¨®n- solicit¨® al jurado popular que tenga en cuenta que el pistolero no sab¨ªa que le estaban buscando cuando se entreg¨®. Adem¨¢s, colabor¨® activamente durante la reconstrucci¨®n de los cr¨ªmenes y no intent¨® huir. La abogada de la defensa defendi¨® que el pistolero "no es una persona normal", sino alguien "obsesionado" y que sufr¨ªa un delirio en el momento de los hechos. Mas¨® arguy¨® que Puig padece tres trastornos de la personalidad y que ello deber¨ªa constituir un atenuante a la hora de dictar una condena.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.