Decepcionados pero no sorprendidos

Las compa?¨ªas a¨¦reas reiteraron ayer su oposici¨®n a la entrada de la aviaci¨®n en el comercio de emisiones de CO2 ya que sostienen que, en una industria globalizada, solo tiene sentido llegar a un acuerdo mundial en el seno de la Organizaci¨®n de Aviaci¨®n Civil Internacional (OACI, agencia de Naciones Unidas). La decisi¨®n del Tribunal Europeo supone "una decepci¨®n, pero no una sorpresa", en palabras de Tony Tyler, director general de la Asociaci¨®n Internacional de Aerol¨ªneas (IATA), que recuerda que la industria se ha comprometido a reducir en 2050 las emisiones a la mitad respecto a 2005. "Pero no alcanzaremos un acuerdo global si los Estados se tiran piedras unos a otros porque Europa quiere actuar extraterritorialmente", a?ade Tyler. Todas las normas sobre aviaci¨®n comercial (como la exenci¨®n de impuestos del combustible de aviaci¨®n) se han adoptado en convenios mundiales desde el nacimiento de la industria.

Las aerol¨ªneas europeas lo que tem¨ªan precisamente es que Europa cediese a las presiones de EE UU y otros pa¨ªses y excluyese a las aerol¨ªneas no comunitarias que operan en Europa del comercio de emisiones. Eso supondr¨ªa una enorme desventaja competitiva para la industria a¨¦rea europea, cuya rentabilidad es m¨ªnima y que en los ¨²ltimos a?os lidia con un entorno econ¨®mico p¨¦simo, al tiempo que, incoherentemente, se mantiene alto el precio del combustible.

Las ¨²ltimas previsiones de IATA auguran 600 millones de d¨®lares de p¨¦rdidas para 2012 para las compa?¨ªas europeas, que pueden llegar a 4.400 si se produce una nueva y m¨¢s profunda crisis bancaria. Los costes de las emisiones supondr¨ªan en 2020 unos 3.000 millones, seg¨²n IATA. Las aerol¨ªneas europeas apelan tambi¨¦n a un acuerdo global en el seno de OACI y temen los efectos sobre la econom¨ªa europea de la "vehemente hostilidad" de los terceros pa¨ªses hacia el esquema europeo, seg¨²n el secretario general de la Asociaci¨®n Europea de Aerol¨ªneas, Ulrich Schulte-Strathaus.