El Cervantes m¨¢s veterano
Ese era el hombre: el hombre al que Harold Bloom hab¨ªa llamado "poeta esencial de las Tierras del Crep¨²sculo". El hombre chileno, el hombre asm¨¢tico, el hombre que consum¨ªa toneladas de ¨¢cido asc¨®rbico para mantenerse saludable. El hombre que, en los a?os cincuenta, hab¨ªa cambiado la poes¨ªa para siempre. El hombre a quien muchos mentaban -mentan- como el mayor poeta de Latinoam¨¦rica. El que, a edades en que otros buscan el abrazo de la carne joven, se hab¨ªa retirado a vivir solo en un balneario opaco de la costa de Chile. El s¨¢bado 22 de octubre de 2011, cuando se abrieron las puertas de la casa de Nicanor Parra en el poblado de Las Cruces -para una conversaci¨®n que se publicar¨ªa m¨¢s tarde en Babelia-, ¨¦l estaba sentado, escribiendo en un cuaderno.
En diciembre, cuando todos pensaban que no se lo dar¨ªan nunca, Nicanor Parra recibi¨® el Premio Cervantes. Alguien, en los d¨ªas que siguieron al anuncio, lo oy¨® sacar la cuenta de los escritores que, habi¨¦ndolo ganado, segu¨ªan vivos. "Cuarenta", dijo. Y concluy¨®: "Es f¨¢cil". Nicanor Parra es una fuerza inhumana en un mundo hecho por hombres. Y es, tambi¨¦n, quien escribi¨®: "Durante medio siglo / la poes¨ªa fue /el para¨ªso del tonto solemne. / Hasta que vine yo / y me instal¨¦ con mi monta?a rusa". Como saben, tiene 97 a?os.
Leila Guerriero es periodista y escritora.
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