Aranburu rompe al Mallorca
La Real da dos pasos adelante ante el equipo de Caparr¨®s, demasiado contemplativo
Doce a?os son muchos a?os sin ver unos octavos de final en Anoeta. No es que los octavos sean la octava maravilla del f¨²tbol, pero lo inesperado, lo sorprendente, es bello. Y la Real aprovech¨® el sortilegio para darse una alegr¨ªa y so?ar con que sus fieles festejen tambi¨¦n los cuartos, de lo que hace m¨¢s tiempo a¨²n, cuando hace unos pocos meses nadie daba un duro por el equipo de Montanier.
Todo tuvo que ver con un minuto juguet¨®n. Era el cuarto de hora, cuando a¨²n los equipos o est¨¢n encorsetados o est¨¢n despendolados. Y resulta que Hemed remata con la oreja un bal¨®n de gol, en un centro a bal¨®n parado. A¨²n no se sabe c¨®mo un tipo tan grande propuso un remate tan flojo a un pase placentero. Y resulta que un minuto despu¨¦s, un tipo m¨¢s bajito, Aranburu, se cuela entre los centrales para cabecear con toda la intenci¨®n del mundo un centro de Agirretxe. Conclusi¨®n: el juego a¨¦reo no es una cuesti¨®n de altura, sino de inteligencia. En un minuto muri¨® el Mallorca, que tampoco hab¨ªa accedido a Anoeta sacando pecho, sino resguardando la espalda, apa?adito, como so?ando con un empate o a lo sumo con una derrota m¨ªnima que le diera vidilla.
REAL SOCIEDAD 2 - MALLORCA 0
Real Sociedad: Zubikarai; Estrada, Demidov, Mikel Gonz¨¢lez, De la Bella; Elustondo, Aranburu (Mariga, m. 82); Xabi Prieto, Zurutuza, Griezmann (Vela, m. 75); y Agirretxe (Llorente, m. 78). No utilizados: To?o, Ansotegi, Cadamuro y Rub¨¦n Pardo.
Mallorca: Calatayud; Cendr¨®s, Crespi, Ramis, C¨¢ceres; Joao V¨ªctor, Mart¨ª (Tisson¨¦, m. 75); Tejera (Nsu¨¦, m. 45), Alfaro, ?lvaro; y Hemed (Abd¨®n. m. 82). No utilizados: Aouate, Pablo Mar¨ª, Zuiverloon y Xisco.
Goles: 1-0. M. 16. Aranburu, de cabeza. 2-0. M. 54. Agirretxe, tras tiro al poste de Aranburu.
?rbitro: Paradas Romero. Amonest¨® a Demidov, De la Bella, Zurutuza, Crespi, C¨¢ceres, Mart¨ª, Tejera y Nsu¨¦.
Unos 19.000 espectadores en Anoeta
Agirretxe tiene alma de depredador y hambre de goleador de alg¨²n post¨ªn
Pero sucedi¨® que la Real se encontr¨® con la mejor versi¨®n de Aranburu, un tipo made in Real que andaba esta temporada alica¨ªdo, como languideciendo, y con el Agirretxe m¨¢s movilizado, m¨¢s inesperado, menos centrado en el carril del 9. Entre ambos mataron a un Mallorca que padec¨ªa algo parecido a un jet lag, isla va, isla viene, por su falta de ritmo. Aranburu, dos pasos por detr¨¢s de la defensa y dos pasos por delante del centro del campo, fue capaz de convertirse en la pesadilla de Caparr¨®s. Marc¨® el primer gol llegando por sorpresa y asisti¨® el segundo, accediendo por el paso de cebra de la defensa bermellona: dispar¨® al poste y el rechazo lo empuj¨® Agirretxe, que tiene alma de depredador y hambre de goleador de alg¨²n post¨ªn.
Le hab¨ªan ca¨ªdo dos goles al Mallorca sin darse cuenta. Goles que nac¨ªan del medio campo, donde Joao V¨ªctor y Mart¨ª ten¨ªan muy poquita presencia y pocos ojos en la espalda. Aranburu, Zurutuza y Griezmann les pusieron el monigote de inocentes demasiadas veces. Por ah¨ª llegaron los goles, quiz¨¢s por ah¨ª la eliminatoria, sin duda por ah¨ª el desequilibrio: el de un equipo hipermotivado y otro que solo se vino arriba en banderillas, que quer¨ªa tramitar la gesti¨®n con calma, poquito que ver con el alma de Caparr¨®s, m¨¢s atribulada, m¨¢s sangu¨ªnea.
Se fue atr¨¢s la Real porque dos goles son lo m¨¢s parecido a la muralla china, a pesar del gusto realista por complicarse la vida cuando sale a pasear. Fue una gran noticia para la Real marcar dos goles, pero casi lo fue m¨¢s recuperar la mejor versi¨®n de Aranburu, el mejor talante de Agirretxe y la mayor potencia de Elustondo. Quiz¨¢s por eso gan¨®.
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