La liberaci¨®n de Valverde
El ciclista correr¨¢ la pr¨®xima semana tras a?o y medio sin competir por la Operaci¨®n Puerto
"Vuelvo tranquilo. Ya he cumplido con lo que ellos quer¨ªan". El nuevo a?o trae de vuelta a Alejandro Valverde, con el h¨¢ndicap, pero tambi¨¦n el sosiego y la energ¨ªa, de quien lleva a?o y medio sin competir. Sin olvidar. "Ellos" son el Comit¨¦ Ol¨ªmpico Italiano, el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) y la Uni¨®n Ciclista Internacional, que por ese orden emitieron sanciones contra el ciclista murciano durante un tortuoso proceso que se demor¨® m¨¢s de un a?o.
El calvario de Valverde, ese del que se siente liberado -"ahora parto de cero", asegura-, comienza cuando en mayo de 2006 la Guardia Civil requisa, en el curso de la Operaci¨®n Puerto, una serie de bolsas con sangre y plasma con una detallada planificaci¨®n de transfusiones y de estrategias para enmascarar el uso de sustancias dopantes. Uno de esos envases se identificaba con el ep¨ªgrafe Val.(Piti). Primero se especul¨® con que Piti era el nombre del perro de Valverde, luego el apelativo cari?oso con el que se refer¨ªa a su novia. Qued¨® se?alado y bajo la lupa. "No me importa que as¨ª sea todav¨ªa ahora", explic¨® ayer el corredor durante la presentaci¨®n del Movistar Team, la estructura en la que ya estaba cuando le salpic¨® el esc¨¢ndalo de una bolsa datada en 2004, cuando corr¨ªa para el Kelme. Pero desde el equipo capitaneado por Eusebio Unzu¨¦ no han dejado de confiar en el corredor antes y durante los 19 meses que ha pasado sin competir. "Sus mejores d¨ªas en Tour est¨¢n por llegar. Sabemos que puede pelear por las cl¨¢sicas y carreras de una semana, pero tambi¨¦n por las grandes vueltas", asegura Unzu¨¦.
Al margen del regreso de Juanjo Cobo, con galones de l¨ªder tras su victoria en la Vuelta, Valverde, de 31 a?os, es la gran esperanza del Movistar para volver a dominar el ciclismo mundial. Cuando lleg¨® la sanci¨®n, equipo y corredor lideraban la clasificaci¨®n de la UCI. Ahora restan las dudas sobre si su nivel ser¨¢ el de entonces. "Habr¨¢ que verlo. Prefiero ir con cautela". Sin autorizaci¨®n para ponerse un maillot del equipo ni siquiera para llevar un dorsal en carreras populares o ben¨¦ficas, Valverde ha completado un plan de entrenamiento con m¨¢s de 48.000 kil¨®metros en el ¨²ltimo a?o, tiempo que ha aprovechado para trabajar su rendimiento en las contrarreloj largas, el h¨¢ndicap que junto a la regularidad en la alta monta?a le aleja del favoritismo en las grandes rondas, de encarnar al corredor total.
Porque pocos esprintan m¨¢s r¨¢pido que Valverde, pocos con tanto aliento como para imponerse en las grandes cl¨¢sicas del norte de Europa, con tanto repris para dominar las vueltas por etapas que no encadenen excesiva dureza. Sus condiciones y su palmar¨¦s (una Vuelta y cinco etapas, tres podios en el Mundial, tres etapas en el Tour, dos Lieja-Bastogne-Lieja, una Flecha Valona, dos veces ganador del UCI ProTour) le acreditan como una referencia y por eso era una pieza codiciada para ejemplificar que la limpieza en el ciclismo empieza por la cima. Jam¨¢s ha dado positivo en un control antidopaje, pero el Comit¨¦ Ol¨ªmpico Italiano sigui¨® la pista de aquella bolsa de un piso de Madrid y aprovech¨® un control antidopaje en el Tour de 2008 para cotejar si el ADN de ambas muestras coincid¨ªa. Y determin¨® que las pruebas eran inequ¨ªvocas. La UCI encontr¨®, tras el laudo del TAS, v¨ªa libre para una sanci¨®n que borr¨® el palmar¨¦s de Valverde de enero a junio de 2010, que le ha impedido correr, pero que no ha borrado su hambre por competir: el d¨ªa 15, la pr¨®xima semana, estar¨¢ en Australia en un criterium. "Vengo a dar alegr¨ªas y a disfrutar", anticipa.
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