Las rebajas m¨¢s esperadas

Si alguien hab¨ªa estado encerrado en su casa los ¨²ltimos d¨ªas sin escuchar, ver ni leer medios de comunicaci¨®n y no se hab¨ªa enterado, bastaba con que ayer se asomara a cualquier arteria comercial para percatarse de que ya est¨¢n aqu¨ª. Enormes carteles en los escaparates anunciando descuentos del 30, 40, 50, 60 y hasta el 70%, multitudes agolpadas en los comercios, personas por las calles con bolsas en las manos y prisa, mucha prisa, como si fueran a perder el tren o el autob¨²s.

?ste era el aspecto que presentaban Bilbao, San Sebasti¨¢n y Vitoria en el primer d¨ªa de las rebajas de invierno. La inacabable crisis econ¨®mica ha convertido a estos descuentos en los m¨¢s esperados de los ¨²ltimos a?os. La gente, seg¨²n todos los expertos en comercio, ha recortado el gasto en diciembre pensando en las rebajas de enero para as¨ª ahorrarse unos euros.

"Vienen a por lo que necesitan", dice el presidente del Dendaraba

Los sindicatos se concentrar¨¢n ante las tiendas que abrir¨¢n hoy en Bilbao

Sin embargo, las puertas de El Corte Ingl¨¦s de la Gran V¨ªa bilba¨ªna no presentaban, 20 minutos antes de su apertura, un aspecto acorde a esas expectativas: apenas hab¨ªa 30 personas esperando a que les dejaran entrar. Luego vino la aglomeraci¨®n. Maite lo evit¨®. Esta compradora de Santurtzi cumpli¨® el principal consejo lanzado desde el Instituto Vasco de Consumo: realizar una reflexi¨®n sobre lo que se necesita e ir directamente a por ello. Maite acude a por un traje para su marido, ya sabe cu¨¢l. "No voy a tardar nada. Subir y bajar", dice. Asegura que es la primera vez que asiste a las rebajas y est¨¢ sorprendida porque, al menos en este comercio, "hay menos gente de la que esperaba".

En el centro comercial Dendaraba, de Vitoria, el trasiego es "muy importante" desde primera hora de la ma?ana, tal y como asegura su presidente, ?lvaro Gonz¨¢lez. "Durante la campa?a navide?a ha habido muy buenas ofertas, pero la gente parece que ha esperado a que los precios estuvieran m¨¢s bajos a¨²n", expone. En su opini¨®n, la crisis provoca que los compradores "miren mucho m¨¢s su econom¨ªa". "Est¨¢n viniendo directamente a comprar lo que necesitan. Lo tienen fichado desde d¨ªas atr¨¢s", apunta.

En las tiendas de Mango y Zara de San Sebasti¨¢n nadie tiene un minuto para responder a las preguntas de los periodistas, lo que constata la gran carga de trabajo. Est¨¢n "desbordados". Entre disculpas, una de las dependientas de la primera de las cadenas de ropa desliza que "las cosas est¨¢n yendo mejor que el a?o pasado".

La actividad en For, uno de los tres comercios bilba¨ªnos que abrir¨¢ hoy pese a ser festivo -los otros son Man y El Ganso-, es tambi¨¦n fren¨¦tica. "Es una locura y esperamos que ma?ana [por hoy] tambi¨¦n lo sea", indica una de las trabajadoras. Los sindicatos han convocado concentraciones frente a estos establecimientos pese a que la ley les permite abrir ocho domingos o festivos al a?o. Las centrales les acusan de estar favoreciendo con su actitud a las grandes superficies.