Una uni¨®n interesada

Gernika y Lumo celebraron ayer el 130 cumplea?os de su uni¨®n. Fue un 8 de enero de 1882 cuando se aprob¨® en Madrid la fusi¨®n entre la villa y la anteiglesia, una decisi¨®n festejada por algunos vecinos y criticada por otros, seg¨²n las cr¨®nicas de la ¨¦poca. Para conmemorar la fecha, el grupo de historia Gernikazarra de la localidad organiz¨® una marcha monta?era de 12 kil¨®metros con paradas en los mojones que durante siglos separaron ambos enclaves. Unas 120 personas participaron en la iniciativa.

"Ha hecho buen tiempo y todo ha ido de maravilla", se?ala Vicente Del Palacio, uno de los organizadores y miembro del mencionado grupo de historia. La caminata comenz¨® en la plaza del Ayuntamiento a las 9:00 horas, frente a la estatua de Don Tello, fundador de Gernika, y finaliz¨® a eso de las 12:00 horas en la Iglesia San Pedro de Lumo. "Nos hemos ido parando en puntos estrat¨¦gicos para ofrecer algunas explicaciones hist¨®ricas y, de paso, descansar un poco", detalla Del Palacio.

La caminata transcurri¨® por los mojones que separaban las localidades

La villa era en su origen un barrio con puerto de la anteiglesia de Lumo

La marcha se detuvo, por ejemplo, en un moj¨®n de unos dos metros de altura que limita Gernika, Rigoitia y Forua. Tambi¨¦n, delante del que fuera ayuntamiento de Lumo antes de la anexi¨®n y en otro moj¨®n que divide Muxika y Gernika.

Don Tello, conde de Castilla, fund¨® la villa de Gernika en 1366. Por entonces, s¨®lo era un barrio con puerto perteneciente a Lumo (Luno en castellano). Como consecuencia de la segregaci¨®n, los gernikarras recibieron privilegios. "Eran, sobre todo, ventajas econ¨®micas. Por ejemplo, pod¨ªan navegar por todo Urdaibai, tener un mercado exclusivo... De ah¨ª procede el famoso ¨²ltimo lunes de octubre", explica Del Palacio.

"Dentro la legalidad de la ¨¦poca, las villas se reg¨ªan por una ley, el Fuero Nuevo, y las anteiglesias, por otra, el Fuero Viejo", agrega. Ese marco legal vigente imped¨ªa a estas ¨²ltimas, representativas del mundo rural, ejercer el comercio, la industria... Estos eran privilegios exclusivos de las villas. Precisamente ah¨ª, refiere Del Palacio, reside la explicaci¨®n de por qu¨¦ se acabaron uniendo Gernika y Lumo. "Los nobles de la anteiglesia ten¨ªan terrenos, pero no pod¨ªan dedicarse a actividades econ¨®micas. Por eso proponen la fusi¨®n", relata.

Madrid da su visto bueno un 8 de enero de 1882, tal d¨ªa como ayer hace 130 a?os, y pone fin con ello a un enfrentamiento de siglos entre las localidades. "Hubo muchos pleitos, porque Lumo quer¨ªa recuperar los territorios que entend¨ªa le hab¨ªan usurpado", cuenta Del Palacio.

El objetivo de la marcha es recordar -"no reivindicar", puntualiza Del Palacio- un momento clave en la historia de la villa. "Lo que queremos es evitar que se olvide qui¨¦nes somos. En los ¨²ltimos a?os ha habido separaciones, como las de Zierbena y Abanto o Markina y Bolibar. Gernika-Lumo sigue ah¨ª. Creemos que es importante mantener fresco el recuerdo de nuestro pueblo", expone.