Un nuevo concepto de taller

En 2009, Iurreta, un peque?o pueblo de la provincia de Vizcaya, vio nacer la empresa Repara tu Veh¨ªculo, un nuevo concepto de taller mec¨¢nico en el que, facilitando la compa?¨ªa materiales, instrumental y expertos, cada uno se ocupa de la reparaci¨®n de su propio veh¨ªculo. Gaizka Muguerza, fundador de la empresa, que hoy cuenta con tres centros en el Pa¨ªs Vasco "y planes de expansi¨®n, a trav¨¦s de franquiciados, para este mismo a?o por el resto de Espa?a", explica que la filosof¨ªa del negocio es "ofrecer un espacio en el que el conductor disponga, por un precio m¨®dico, de un lugar donde reparar su veh¨ªculo, sin esperas y sin un alto coste, pues uno mismo puede adquirir all¨ª todo lo que necesite".

Con solo pasarse por uno de los talleres, se percibe que todo est¨¢ pensado para que, con unos conocimientos m¨ªnimos de mec¨¢nica, cualquier manitas pueda reparar amortiguadores y frenos o cambiar escobillas, bater¨ªas, filtros, l¨ªquidos y neum¨¢ticos, "b¨¢sicamente operaciones de mantenimiento del autom¨®vil o las revisiones habituales antes de salir vacaciones con el coche". Adem¨¢s, quien necesite ayuda la encontrar¨¢ en el personal que all¨ª trabaja. Tal y como explica Gaizka, los trabajadores de Repara tu Veh¨ªculo, por sus caracter¨ªsticas personales, conforman gran parte del ADN de la firma. "Quer¨ªamos poner nuestro granito de arena para tener una sociedad mejor. Por eso, el 70% de nuestra plantilla lo componen personas en riesgo de exclusi¨®n social, que tienen una dif¨ªcil salida al mercado laboral y a las que formamos para que puedan tener un futuro".

Dedicado durante varios a?os al trabajo en el ¨¢rea de ventas, la falta de motivaci¨®n llev¨® a Gaizka a buscar una salida laboral. "Despu¨¦s de trabajar para terceros, pens¨¦ que hab¨ªa llegado el momento de emprender mi propio proyecto. Desde hac¨ªa tiempo ten¨ªa var¨ªas ideas en la cabeza, as¨ª que, tras sopesarlas, me decid¨ª por una de ellas, la que dio lugar a Repara tu Veh¨ªculo", cuenta.

Cuando el emprendedor repite una y otra vez la palabra motivaci¨®n, alude tanto a su propia filosof¨ªa de vida como a la pol¨ªtica de empresa que ha creado. "Lo aplicamos tanto al mantenimiento de los espacios de trabajo, que queremos tener siempre limpios y luminosos, para que apetezca trabajar en ellos, como a la elecci¨®n de nuestros franquiciados. No nos interesan personas que tengan dinero y simplemente quieran invertirlo. Queremos trabajar con franquiciados que se impliquen en la gesti¨®n del negocio".

Gaizka sab¨ªa desde el principio el tipo de compa?¨ªa que quer¨ªa, "por supuesto que lo primero era ser rentables, y lo conseguimos facturando por taller y en el primer a?o de funcionamiento unos 150.000 euros. Una vez logrado, pudimos elegir entre preocuparnos solo de vender u optar por una empresa m¨¢s social". Que es lo que eligieron. "Yo he trabajado para varias multinacionales cuyo objetivo es conseguir la venta por encima de todo. S¨¦ lo que afecta eso a la calidad de los empleos, a las ganas de hacer las cosas bien por parte de los trabajadores. No quer¨ªa eso para mi empresa. No creo que uno tenga que ver como un martirio el tener que levantarse cada d¨ªa para ir a trabajar".

El emprendedor es una persona muy observadora. Y de esa observaci¨®n surgi¨®, por ejemplo, la decisi¨®n de no ubicar los talleres en pol¨ªgonos industriales. "Cuando trabajaba en ventas, me di cuenta de que, si exceptuamos los profesionales que van all¨ª a trabajar, los pol¨ªgonos no suelen ser lugares de paso, y as¨ª es muy dif¨ªcil atraer clientes. Queremos llegar a todo el mundo, tanto al que viene por ahorrarse un dinero (ofrecemos entre un 55%-70% de ahorro sobre una factura media de taller convencional) como a aquel que tiene la mec¨¢nica como hobby. Preferimos la entrada de las ciudades y ofrecemos horarios amplios, para dar facilidades a quien solo pueda venir despu¨¦s de su jornada laboral, como hacen la mayor¨ªa de clientes", asegura.

Eso s¨ª, que quede claro que en Repara tu Veh¨ªculo no nos van a arreglar el coche si no somos capaces de hacerlo nosotros. Si esto sucede, nos remitir¨¢n a un taller de los de toda la vida.