El PP asegura su voto a las cuentas en plena sinton¨ªa de gestos con CiU

Las relaciones entre Converg¨¨ncia i Uni¨® (CiU) y el Partido Popular (PP) van viento en popa desde que Artur Mas lleg¨®, hace un a?o, a la presidencia de la Generalitat. Aparcada la deriva soberanista de CiU y olvidado el recurso del PP al Estatuto, ambos partidos se han entendido en todas las leyes importantes aprobadas en Catalu?a. Y la relaci¨®n sigue: el portavoz del PP catal¨¢n, Enric Millo, anunci¨® ayer que el PP facilitar¨¢ la aprobaci¨®n definitiva de los presupuestos de Catalu?a, igual que hizo en 2011. Las cuentas est¨¢n tramit¨¢ndose en el Parlament y el PP ya permiti¨®, con su abstenci¨®n, que superaran las enmiendas a la totalidad presentadas por el resto de los partidos.

La formaci¨®n que dirige Alicia S¨¢nchez-Camacho ha tardado menos de una semana en destapar sus cartas. La l¨ªder del PP catal¨¢n insisti¨® el mi¨¦rcoles pasado en que la abstenci¨®n ante el tr¨¢mite inicial de las cuentas no presupon¨ªa que permitieran su aprobaci¨®n definitiva. Las comisiones del Parlament revisan esta semana los presupuestos departamento a departamento, y la votaci¨®n final en el pleno ser¨¢ el 15 de febrero. Mill¨® dej¨® claro que el PP no bloquear¨¢ los presupuestos. A CiU le vale con la abstenci¨®n de los 18 diputados populares, un gesto de m¨ªnimos garantizado por S¨¢nchez-Camacho con la ¨²nica condici¨®n de matizar la tasa tur¨ªstica y el euro por receta para introducir excepciones. Millo subray¨® que rechazar las cuentas ser¨ªa "irresponsable" y aprovech¨® para poner al PP como ejemplo y criticar al resto de la oposici¨®n. Los nacionalistas tienen la abstenci¨®n asegurada, pero el PP aument¨® sus condiciones para votar s¨ª: impulsar la aprobaci¨®n de una ley de emprendedores, seguir con la reducci¨®n del d¨¦ficit, aumentar el control sobre la Administraci¨®n y aprobar una ley de transparencia para que sean p¨²blicos los sueldos, retribuciones, nombramientos y compras que realizan todos los organismos p¨²blicos.

La buena relaci¨®n entre CiU y PP se visualizar¨¢ el 1 de febrero, en la reuni¨®n que mantendr¨¢ Mas con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. Para allanar el camino del encuentro, los consejeros de la Generalitat se reunir¨¢n con los ministros de su ¨¢rea. Los contactos se iniciaron ayer: el titular de Bienestar Social, Josep Llu¨ªs Cleries, arranc¨® de la ministra de Sanidad, Ana Mato, el compromiso de revisar la financiaci¨®n de la Ley de Dependencia, informa Ferran Balsells. Mato tambi¨¦n trat¨® con el consejero de Salud, Boi Ruiz, de las reformas necesarias para mantener el sistema sanitario. Felip Puig, titular de Interior, complet¨® los primeros contactos en una reuni¨®n con su hom¨®logo, Jorge Fern¨¢ndez, en la que hablaron de la importancia de luchar contra la multirreincidencia.La multitud de gestos entre CiU y el PP tambi¨¦n se vivi¨® en el Congreso, donde los nacionalistas apoyaron los primeros recortes de Rajoy. El portavoz de CiU en la C¨¢mara baja, Josep Antoni Duran Lleida, mostr¨® ayer su predisposici¨®n total a hablar tambi¨¦n sobre la reforma laboral. Los gestos de CiU servir¨¢n, seg¨²n Duran, para que Catalu?a reciba el dinero pendiente de la disposici¨®n adicional tercera del Estatuto. Son 759 millones de euros pendientes de la liquidaci¨®n de 2008 que el Gobierno de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero nunca abon¨® pese a que se comprometi¨® a hacerlo. Duran se mostr¨® convencido de que Rajoy saldar¨¢ esta deuda cuando apruebe los presupuestos y confi¨®, incluso, en recibir 219 millones adicionales correspondientes a la liquidaci¨®n de 2009.

El PP subray¨® que su relaci¨®n con CiU se acerca al pacto estable. Enric Millo reivindic¨® que CiU ha tenido al PP como socio en todas las leyes importantes. Sin embargo, los nacionalistas no quieren ni o¨ªr hablar de una alianza duradera con el Grupo Popular. En p¨²blico y en privado, dirigentes de la federaci¨®n alertan sobre el peligro de reeditar los errores del pacto del Majestic. El acuerdo sirvi¨® en 1996 para aupar a Jos¨¦ Maria Aznar a la presidencia, pero CiU lo pag¨® caro en la segunda legislatura de Aznar. Jordi Pujol depend¨ªa en exclusiva de un PP con mayor¨ªa absoluta. El apoyo incondicional de CiU a Aznar provoc¨® una considerable sangr¨ªa de votos a los nacionalistas, que acabaron perdiendo por primera vez la Generalitat en 2003.

Con este fantasma en el recuerdo, CiU vot¨® en contra en la investidura de Rajoy, gesto que corrigi¨® apoyando los recortes. Para justificar su alianza con el PP, los nacionalistas insisten en que no tienen alternativas en Catalu?a para pactar, argumento que se encargan de anular el Partit dels Socialistes y Esquerra, que en los ¨²ltimos dos meses han pujado fuerte para llegar a un acuerdo con CiU. Los nacionalistas se reunir¨¢n ma?ana con el PSC en el inicio de una ronda de contactos que debe servir, en teor¨ªa, para acercar posiciones en los grandes temas que afectan a Catalu?a, una vez aprobados los presupuestos. Millo minimiz¨® la reuni¨®n y dej¨® claro que CiU siempre aprueba las leyes importantes con el PP.