?lvaro Tejero, dramaturgo de nuevos espacios

No falt¨® a ninguna funci¨®n de TurliTava Teatro, su compa?¨ªa: cada domingo, cortaba las entradas a la puerta, como hace Arianne Mnouchkine en su Th¨¦?tre du Soleil. Los d¨ªas de diario, llegaba al final de la funci¨®n, tras echar el cierre de su librer¨ªa La Marabunta, tambi¨¦n en el madrile?o barrio de Lavapi¨¦s. ?lvaro Tejero, exvocalista de Armagedon y director teatral, ha muerto a los 33 a?os, arrollado cuando regresaba en moto a su Legan¨¦s natal por una automovilista de 21 a?os que cuadruplicaba la tasa de alcoholemia. La excelencia de Los vivos y los m(¨ªos), de Jos¨¦ Cruz, premio L¨¢zaro Carreter 2009, su ¨²ltimo montaje, en cartel desde principios de temporada, abri¨® unas expectativas inmensas sobre su prometedora carrera teatral.

Antes de abordar un texto con sus actores, Tejero se preocupaba de recrear con todas las herramientas posibles la atm¨®sfera del lugar donde sucede: por eso su compa?¨ªa no act¨²a en teatros, sino en espacios desafectados, escogidos para la ocasi¨®n. Para su pr¨®ximo espect¨¢culo, una s¨¢tira autocr¨ªtica sobre el buenismo del 15-M (movimiento del que particip¨® activamente), inspirada en el Pl¨¢cido de Azcona y Berlanga, ya ten¨ªa localizada una antigua tintorer¨ªa como escenario ideal. Tambi¨¦n estaba gestando un montaje sobre piezas breves del Siglo de Oro con Las Huellas de La Barraca, proyecto que perpet¨²a el esp¨ªritu del m¨ªtico grupo itinerante de la Espa?a republicana.

Entre 1999 y 2005, Tejero grab¨® con Armagedon los discos A pike, Nada nuevo bajo el sol, Dignidad y P¨¢salo. Licenciado en Filolog¨ªa Hisp¨¢nica por la Universidad Complutense, dej¨® a un lado la m¨²sica para trabajar de lector de espa?ol en la Universidad de Skopje (Macedonia), cuya Aula de Teatro dirigi¨® durante tres a?os. All¨ª empez¨® a hacer montajes de marcado car¨¢cter social. De vuelta a Espa?a, en 2010 conoce en el M¨¢ster de Artes Esc¨¦nicas del Instituto del Teatro de Madrid a quienes pronto ser¨ªan sus actores en la compa?¨ªa TurliTava, cuyo nombre (el de un pisto macedonio de verduras con carne) alude a su voluntad de mezcla y al aliento horizontal y cooperativo de su r¨¦gimen de trabajo. La empat¨ªa de Tejero, su amor al arte y la inmensa generosidad de sus actores explican en ¨²ltima instancia el ¨¦xito fulgurante de Los vivos y los m(¨ªos), espect¨¢culo ¨ªntimo sobre la memoria hist¨®rica donde solo se ponen a la venta 14 entradas por funci¨®n para, rompiendo los l¨ªmites entre escenario y auditorio, hacer la experiencia m¨¢s intensa. Su texto teatral La violence, escrito junto a Jos¨¦ Cruz, se estrena en marzo en el Espacio Cultural TurliTava, dirigido por Paloma Rodero.