"El f¨²tbol se vive aqu¨ª con una pasi¨®n que no he visto antes"
Se le nota abatido. Juan Jos¨¦ Maqueda (Madrid, 1969) no entiende qu¨¦ pudo pasar en el descanso entre el Masry y el Ahly, qu¨¦ empuj¨® a los hinchas al c¨¦sped. Y quiere comprenderlo porque a ¨¦l, entrenador del Ittihad, esa pasi¨®n por el f¨²tbol, te?ida de violencia el mi¨¦rcoles, le aup¨® hace unos d¨ªas como nunca antes.
Debut¨® con el Madrid de la quinta del Buitre y colg¨® las botas en 2000 tras pisar los terrenos de M¨¦xico y Grecia. Hace un par de semanas dimiti¨® como t¨¦cnico de su actual equipo. Pero tuvo que recular ante las l¨¢grimas de sus jugadores y las manifestaciones de la afici¨®n.
Pregunta. ?Son los estadios la trinchera del malestar social?
Respuesta. No. Podr¨ªa haber pasado en Tahrir o en cualquier otro rinc¨®n por el cansancio de la gente ante el continuismo camuflado . El pa¨ªs vive algo nuevo. Y la polic¨ªa ha desaparecido de las calles porque se le perdi¨® el respeto.
P. ?Qu¨¦ sienten por el f¨²tbol?
R. Se vive con una pasi¨®n enorme y ejemplo de ello fue mi renuncia. El presidente, Effat el Sadat, sobrino del asesinado Anuar el Sadat, estaba hundido. No pod¨ªa irme. No estoy acostumbrado a algo as¨ª. Emocionalmente fue fuerte y rectifiqu¨¦.
P. ?Qu¨¦ le pas¨® por la cabeza cuando vio lo de Port Said?
R. Es un campo muy dif¨ªcil. La ¨²ltima vez que jugamos all¨ª sentimos desde el t¨²nel c¨®mo ca¨ªan las piedras. Ah¨ª no puede ganar nadie. Pero lo del mi¨¦rcoles no lo entiendo.
P. ?Por qu¨¦?
R. Hab¨ªa unos 3.000 polic¨ªas. Hace un mes y medio, el Ahly jug¨® con el Mahalla. Estaban empatados y un bal¨®n entr¨® por el lateral de la red. El ¨¢rbitro dio el gol y estall¨® el campo. Dos cordones policiales se desplegaron por el c¨¦sped y se evitaron los choques.
P. ?Temi¨® alguna vez que le pasase algo similar?
R. Llegamos a estar dos horas dentro del vestuario tras el partido con el Ismaily. Y salimos detr¨¢s de un autob¨²s que sirvi¨® de se?uelo.
P. ?Seguir¨¢ entrenando?
R. Voy a ver qu¨¦ sucede para tomar decisiones. El f¨²tbol aqu¨ª se vive con una pasi¨®n que no he visto antes en ning¨²n pa¨ªs.
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