Un pa¨ªs dentro de un aeropuerto

La reci¨¦n inaugurada terminal de Pek¨ªn es m¨¢s un peque?o pa¨ªs que un aeropuerto. De hecho su creador, el arquitecto brit¨¢nico Norman Foster, asegura que no s¨®lo es el m¨¢s grande en su especie, supera a todas las terminales de Heathrow juntas, si no que tambi¨¦n es el mayor edificio del mundo jam¨¢s construido.

Con m¨¢s de tres kil¨®metros de longitud y un total de 986.000 metros cuadrados ¨²tiles, el Gobierno chino quiere que la flamante infraestructura impresione a las oleadas de extranjeros que se esperan con motivo de los Juegos Ol¨ªmpicos. Que les impacte incluso antes de bajar del avi¨®n ya que, desde el cielo, la silueta de la terminal est¨¢ dise?ada para que recuerde a la de un drag¨®n chino con una cubierta que imita sus escamas, aunque decidir si lo han conseguido o no ser¨¢ cuesti¨®n de los futuros visitantes.

Hecha a toda velocidad con un presupuesto cercano a los 5.000 millones de euros, los funcionarios todav¨ªa est¨¢n realizando los ¨²ltimos ajustes bajo la seria mirada de multitud de guardias de seguridad generalmente vestidos con chaquetas dos tallas m¨¢s grandes que las suyas, seg¨²n cuenta el reportero de la BBC James Reyunolds desde el terreno.

El vidrio y el acero son los principales materiales que forjan esta estructura con forma de 'I' y cuyo techo curvil¨ªneo se compone de claraboyas triangulares que permiten aprovechar al m¨¢ximo la luz y conservar el calor.

Unos cuantos metros por debajo, el suelo pulcramente abrillantado refleja el color dorado tradicional del pa¨ªs que domina la cubierta jaspeado por el rojo de las columnas en homenaje a los palacios imperiales. Algunas mujeres aprovechan la balanza de uno de los m¨¢s de trescientos mostradores de facturaci¨®n de la terminal para pesarse mientras en las pantallas se indica que el primer vuelo que ha empleado las nuevas infraestructuras, el SC1151 procedente de la provincia oriental china de Shandong, ha aterrizado a las 8.50 hora local.

El empleo de la m¨¢s moderna tecnolog¨ªa queda patente en su servicio de maletas, capaz de gestionar m¨¢s de 19.000 bultos a la hora.

Todo en este aeropuerto es gigante y maximalista, desde las pistas -dise?adas para acoger al A380, el gigante de la compa?¨ªa europea Airbus- al interior de sus instalaciones. En ellas se dan cita m¨¢s de 64 restaurantes chinos y occidentales y 90 tiendas.

Capacidad para 76 millones de pasajeros

Cuatro a?os ha tardado Norman Foster en erigir una estructura que permitir¨¢ el tr¨¢nsito de 76 millones de pasajeros al a?o frente a los 53,7 millones que circularon en 2007 por el aeropuerto de Pek¨ªn, el noveno m¨¢s transitado del mundo hasta la fecha aunque seguro que este a?o escalar¨¢ alg¨²n puesto.

La terminal de Pek¨ªn duplica el tama?o de nueva Terminal 5 del aeropuerto de Heathrow, que se prev¨¦ abrir el pr¨®ximo mes, y quintuplica su coste. No obstante, la diferencia m¨¢s destacada es que la de la capital china se ha acabado en cuatro a?os mientras la de Londres lleva veinte en construcci¨®n.

Por supuesto, en China, el Gobierno no ha realizado concurso alguno ni ha establecido ning¨²n tipo de control p¨²blico de la obra, lo que le ha permitido hacer lo que quer¨ªa. Sin sindicatos y con cualquier tipo de protesta laboral prohibida, los trabajos han avanzado 24 horas al d¨ªa durante siete d¨ªas a la semana.

La nueva terminal acoger¨¢ a 26 aerol¨ªneas nacionales e internacionales de las que 6 son ya operativas: Sichuan Airlines, Shandong Airlines, Qatar Airways, Qantas Airways, British Airways y El Al Israel Airlines. Otras compa?¨ªas como Air China y Lufthansa, empezar¨¢n a operar en esta terminal el 26 de marzo.

"Ha llevado el mismo tiempo construir la terminal que lo que ha durado conseguir los permisos p¨²blicos para Heathrow", rese?a Foster, responsable tambi¨¦n de la nueva infraestructura del principal aeropuerto de Londres. "Pero lo que ha costado dos siglos en el Viejo Continente, urbanizar Europa, en China parece que les va a llevar apenas 20 a?os", sentencia.

Aunque el Gobierno chino se ha esforzado con esta infraestructura en dar una mejor imagen de sus mermados servicios p¨²blicos, ahora ha tocado la hora de mejorar tambi¨¦n el trato al viajero en los pocos meses que quedan hasta los juegos. Hasta los dirigentes de los aeropuertos del gigante asi¨¢tico han admitido que queda mucho por hacer para alcanzar la calidad de los aer¨®dromos rivales de Hong Kong, Singapur o Kuala Lumpur.

Revoluci¨®n urban¨ªstica y orgullo nacional

En este sentido, mires donde mires en Pek¨ªn se pueden ver edificios en construcci¨®n. El nuevo estadio ol¨ªmipico, conocido como el Nido del P¨¢jaro, estar¨¢ acabado en unas semanas. Un complejo auditorium, dise?ado como un ovni, ha acogido su primer espect¨¢culo en el distrito este de la capital.

Las torres dentadas de la nueva sede central de la televisi¨®n estatal china China tambi¨¦n est¨¢n avanzando r¨¢pidamente.

No obstante, asociaciones de derechos humanos denuncian que 1,25 millones de chinos han sido desplazados desde sus lugares de residencia para participar en la reconstrucci¨®n de Pek¨ªn.

Sin embargo, las autoridades chinas est¨¢n orgullosas de la velocidad a la que avanzan los trabajos. "Hemos realizado en cuatro a?os el sue?o de la naci¨®n China. La apertura de la infraestructura es una prueba del talento de nuestro pueblo y su capacidad de trabajar duro", se limita a declarar Dong Zhiyi, responsable del proyecto designado por el Gobierno estatal entre aplausos de la multitud congregada en una rueda de prensa sin preguntas.

"Nosotros hemos hecho en cuatro a?os lo que en Heathrow est¨¢ tardando veinte, ?cu¨¢l de los dos m¨¦todos es el mejor?", interroga Zhiyi mientras algunos oficiales bostezan junto a una de las inmensas columnas de color rojo imperial que ascienden hasta el techo.

Inaugurada en Pek¨ªn la mayor terminal aeroportuaria del mundo