Calder¨®n mueve su gabinete pero no cambia criterio: gana control y premia lealtad
El presidente de M¨¦xico da m¨¢s poder en las carteras que manejan las pol¨ªticas monetarias y fiscales.- A Hacienda llegar¨¢ Ernesto Cordero, su ministro m¨¢s cercano
El cierre de un a?o de cambios en distintos ¨®rganos del Estado mexicano ha tenido hoy su remate con la noticia, nada sorpresiva, de que el Presidente Felipe Calder¨®n enviar¨¢ al Senado mexicano la propuesta para que el nuevo gobernador del Banco de M¨¦xico (Banco Central) sea su hasta ayer (martes) Ministro de Hacienda, Agust¨ªn Carstens, lo que gener¨® enroques en otros ministerios y la ratificaci¨®n de que el mandatario busca m¨¢s control de la econom¨ªa y aprecia por sobre todas las cosas la lealtad.
Carstens ver¨¢ premiada sus negociaciones presupuestales y regresa a la instituci¨®n en la que colabor¨® durante dos d¨¦cadas antes de ser tambi¨¦n funcionario del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial. Su salida era vista como necesaria luego del desgaste que supuso sacar adelante el paquete fiscal que incluye diversos nuevos impuestos para 2010, pero adem¨¢s le permite al Presidente Calder¨®n hacer a un lado al saliente gobernador del Banco de M¨¦xico, Guillermo Ortiz, con el que tuvo una seca convivencia desde 2006 luego de sostener una mala relaci¨®n desde mediados de la d¨¦cada de los noventa.
"Cada uno de los nombramientos es preocupante, pero lo es m¨¢s la combinaci¨®n de los tres, que parece enfatizar que los criterios son la lealtad y el control de la pol¨ªtica econ¨®mica desde una perspectiva partidista"
M¨¢s poder para las carteras econ¨®micas
A Hacienda llegar¨¢ Ernesto Cordero, el ministro m¨¢s cercano a Calder¨®n y a quien durante dos a?os encarg¨® las pol¨ªticas del combate a la pobreza desde la Secretar¨ªa de Desarrollo Social. Una interrogante ayer era si el nombramiento de Calder¨®n reforzaba o sepultaba la apuesta de los calderonistas que ven en Cordero al delf¨ªn rumbo a la renovaci¨®n presidencial del 2012: en Desarrollo Social se reparte dinero, en Hacienda todo lo contrario. El ¨²ltimo candidato que sali¨® de esa cartera es uno de los pol¨ªticos de peor memoria como presidente.
Pero la mayor inc¨®gnita sobre el juego de cambios, completado con el nombramiento en Desarrollo Social de un viceministro sin mayor fama p¨²blica que ser un ex candidato que casi gan¨® la gubernatura hace 5 a?os del estado de Sinaloa, es si a M¨¦xico le esperan buenas noticias con este reacomodo que le da a Calder¨®n m¨¢s poder en las carteras que manejan las pol¨ªticas monetarias y fiscales. Ni este presidente, ni su antecesor Vicente Fox, tuvieron antes a un incondicional en Hacienda, y menos todav¨ªa a alguien cercano en el Banco de M¨¦xico (Ortiz es de extracci¨®n priista).
"El presidente tendr¨¢ el control de todas las canicas. Estamos ante la posibilidad de que pueda influir en cosas en las que no pod¨ªa con Carstens, quien con un perfil m¨¢s t¨¦cnico ten¨ªa que ser m¨¢s cauteloso con los mercados. Cordero en cambio no tiene ni la experiencia ni la trayectoria de Carstens, y llega por su cercan¨ªa con Calder¨®n", opina Gerardo Esquivel, economista por El Colegio de M¨¦xico. "Cada uno de los nombramientos es preocupante, pero lo es m¨¢s la combinaci¨®n de los tres, que parece enfatizar que los criterios son la lealtad y el control de la pol¨ªtica econ¨®mica desde una perspectiva partidista".
El calendario marcaba que en 2009 se renovar¨ªan, entre otras carteras, dos de los once asientos de la Suprema Corte de Justicia de la Naci¨®n, las cabezas de la Comisi¨®n Nacional de Derechos Humanos, del Instituto de Estad¨ªstica (INEGI), de la Auditor¨ªa Superior de la Federaci¨®n y del Banco de M¨¦xico. Resta ahora esperar la reacci¨®n de los mercados internacionales a los nombramientos econ¨®micos. Se dice que ver¨¢n bien a Carstens, uno de los suyos, a quien Calder¨®n de hecho sac¨® un organismo internacional. La inc¨®gnita es Cordero, quien hay que consignar, fue un a?o viceministro de Carstens.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.