El Tesoro vuelve a vender deuda por debajo del 1% por primera vez desde octubre
Espa?a esquiva los recelos del mercado sobre el acuerdo sobre el plan de rescate europeo y coloca 2.100 millones en letras a tres y seis meses
El Tesoro espa?ol ha vuelto a demostrar hoy que mantiene la confianza de los inversores y sigue en su camino por recuperar la normalidad al vender deuda a largo plazo al menor precio de los ¨²ltimos cinco meses. De hecho, ha logrado colocar sus letras a tres meses con un inter¨¦s inferior al 1% por primera vez desde octubre, antes del a debacle de Irlanda y el recrudecimiento de las tensiones sobre el resto de socios de la moneda ¨²nica bajo la sospecha de los mercados. Adem¨¢s, gracias a la fuerte demanda que ha registrado la operaci¨®n, el organismo dependiente del Ministerio de Econom¨ªa ha alcanzado el rango alto del objetivo previsto al captar 2.100 millones, 400 millones por debajo del objetivo m¨¢ximo de la subasta.
En concreto, el Tesoro ha colocado 1.208 millones de euros en letras a tres meses a un tipo de inter¨¦s marginal -el ¨²ltimo antes de cortar la subasta- del 0,929% cuando hace apenas un mes tuvo que ofrecer un 1,120% para superar los crecientes recelos de los inversores ante el temor de un contagio de los problemas a Portugal. La demanda de estos t¨ªtulos, adem¨¢s, ha aumentado hasta superar en 4,33 veces la oferta, cuando en la ¨²ltima operaci¨®n a estos mismos plazos del 22 de febrero se qued¨® en una ratio de 3,3. Echando la vista atr¨¢s, la rentabilidad de hoy es la m¨¢s baja desde la subasta realizada el 28 de septiembre, cuando Espa?a segu¨ªa sacando lustre a los ¨²ltimos coletazos de la mejora motivada por las pruebas de resistencia del pasado verano.
En t¨ªtulos a seis meses ha vendido 842 millones con una rentabilidad del 1,378%, 22 puntos b¨¢sicos menos que en la pasada subasta. En su caso, hay que retrotaerse al 26 de noviembre para encontrar un inter¨¦s inferior. Tambi¨¦n la demanda ha crecido con fuerza al pasar de una ratio de cobertura del 5,5 al 7,6. Entre ambas, el volumen de t¨ªtulos solicitados ha multiplicado por seis los vendidos. Para hacerse una idea de la relevancia que tiene el precio de colocar deuda, si se hubiesen mantenido las dudas sobre los llamados perif¨¦ricos del euro que atenazaron al mercado a finales de 2010 tras el descalabro de Irlanda, a Espa?a le hubiera costado 21 millones m¨¢s la operaci¨®n de hoy. Este sobreprecio, multiplicado por las 12 subastas de letras a los mismos plazos que tiene anunciadas el Tesoro arroja la nada desde?able cifra de 254 millones. Aunque es un ejercicio matem¨¢tico hipot¨¦tico, sirve para poner en evidencia la importancia de lograr reducir los intereses que paga el Estado por endeudarse, m¨¢xime cuando esta partida se ha convertido en la segunda en importancia de los presupuestos del Estado por detr¨¢s del paro.
El resultado de la subasta ha reforzado el alivio de la presi¨®n sobre la deuda espa?ola en los mercados secundarios, que es donde se negocian los t¨ªtulos una vez emitidos. A media sesi¨®n, la prima de riesgo de Espa?a, considerada como el mejor term¨®metro de la confianza de los inversores en las finanzas de un pa¨ªs y que se establece a partir del diferencial entre sus bonos a 10 a?os con los alemanes, de referencia, ha llegado a bajar hasta los 186 puntos b¨¢sicos, unos cuatro menos que ayer. A su favor, en las ¨²ltimas horas ha recibido un importante espaldarazo: que el el segundo mayor fondo soberano del mundo, el de las pensiones de Noruega, haya triplicado su inversi¨®n en deuda espa?ola.
Adem¨¢s, al igual que ya ocurri¨® ayer, la deuda del Tesoro era la que menos sufr¨ªa hoy entre todos los socios del euro. As¨ª, si en el caso de Portugal, considerada como la pr¨®xima v¨ªctima de la crisis y que esta semana afronta una aut¨¦ntica rev¨¢lida, B¨¦lgica o Italia la salida de inversores se traduc¨ªa en un repunte de entre dos a seis puntos b¨¢sicos de la rentabilidad exigida a sus bonos, los espa?oles solo ve¨ªan aumentar su inter¨¦s en un punto b¨¢sico, aunque se mantiene sobre el 5,1%. El motivo de este correctivo es que, tras la alarma desatada la semana pasada por el accidente nuclear de Jap¨®n y las dudas sobre el impacto de la cat¨¢strofe en la econom¨ªa internacional, lo que increment¨® la apuesta por activos considerados como refugio como la deuda soberana, esta semana est¨¢ teniendo lugar el efecto contrario y, seg¨²n los analistas, vuelve el apetito hacia el riesgo. No obstante, seg¨²n apuntan Bloomberg, tambi¨¦n est¨¢ condicionado la jornada el recelo que suscita el acuerdo de la UE sobre el fondo de rescate y que prev¨¦ hacer part¨ªcipes a los inversores privados del coste de futuros rescates.
Si hace dos a?os las colocaciones de deuda soberana pasaban pr¨¢cticamente desapercibidas para el gran p¨²blico, la crisis desatada en los mercados a ra¨ªz de los problemas de d¨¦ficit de algunos pa¨ªses del euro, entre ellos Espa?a, ha tra¨ªdo al primer plano las subastas. Con estas operaciones, los pa¨ªses captan la financiaci¨®n necesaria para mantener su liquidez y pagar religiosamente los vencimientos de su deuda. No obstante, si los inversores no se f¨ªan de un determinado Estado, tal y como le ocurri¨® a Grecia en mayo y en noviembre a Irlanda, le van exigiendo cada vez m¨¢s dinero por aceptar sus t¨ªtulos en una peligrosa espiral que puede llegar a poner en duda su sostenibilidad y, al mismo tiempo, cierra su acceso a la financiaci¨®n. De ah¨ª la relevancia de mantener la confianza de los inversores, para poder mantener la m¨¢quina en marcha.
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