Malos datos del mercado laboral

Todav¨ªa no nos hab¨ªamos recuperado del susto que nos dio la EPA del cuarto trimestre la semana anterior cuando en esta el rebautizado Ministerio de Empleo y Seguridad Social public¨® puntualmente, como todos los segundos d¨ªas laborables de cada mes (esto no ha cambiado, afortunadamente), las estad¨ªsticas de paro registrado, contratos, prestaciones por desempleo y afiliados ocupados a la Seguridad Social del mes de enero. Otro susto. Todos estos datos fueron bastante peores de lo que pronosticaban los modelos.

Frente a un aumento previsto de 136.000 parados, el real fue de 177.470. Ciertamente en este aumento hay mucho de componente estacional, y en enero siempre aumenta el paro incluso aunque la econom¨ªa est¨¦ en plena expansi¨®n, pero el de este a?o es el segundo mayor de la serie hist¨®rica despu¨¦s del de enero de 2009 (198.838 parados), el peor momento de la recesi¨®n. Si desestacionalizamos los datos para quedarnos con la tendencia de corto plazo, el aumento se reduce a unos 50.000 [gr¨¢fico superior izquierdo]. La diferencia es muy sustancial, pero aun as¨ª no podemos quedarnos tranquilos: si continuara este ritmo en los restantes meses del a?o, es decir, si anualizamos el dato, a lo largo de 2012 se habr¨ªa producido un aumento de 600.000 parados registrados, casi el doble del que se produjo en 2011. As¨ª pues, el a?o ha empezado mal.

En t¨¦rminos absolutos, los parados casi alcanzaban la cifra de 4.600.000 personas, un 8,7% m¨¢s que en enero de 2011, aunque si a?adimos colectivos que esta estad¨ªstica no computa como parados, pero s¨ª lo hace la EPA, esta cifra asciende a 4.948.000, muy cerca de la estimaci¨®n de la EPA del cuarto trimestre del pasado a?o.

A pesar de la tendencia del paro al alza, los beneficiarios de prestaciones contributivas por desempleo descienden, lo que significa que a muchos se les acaba el periodo de recibir prestaciones sin haber encontrado un empleo. El riesgo de un aumento en las desigualdades sociales y de fractura social se incrementa. En diciembre, ¨²ltimo mes con datos disponibles, los beneficiarios no llegaban a los tres millones, un 2,9% menos que en el mismo periodo del a?o anterior. La tasa de cobertura, que no incluye, entre otros colectivos, a los parados que antes no han tenido empleo, se situ¨® en el 69,9%, es decir, 7,5 puntos porcentuales por debajo de un a?o antes. Por su parte, los gastos en dichas prestaciones ascendieron a 2.584 millones de euros en diciembre y a 30.000 millones en todo el a?o 2011, un 7% menos que en 2010. Esta es una cifra similar a los pagos por intereses de la deuda p¨²blica y no es previsible que ninguna de estas dos facturas baje en 2012, por lo que la reducci¨®n del d¨¦ficit p¨²blico ya se encuentra con los primeros obst¨¢culos.

Las previsiones para febrero apuntan tambi¨¦n mal, aunque la estacionalidad ya no es tan desfavorable como en enero

El aumento del paro en enero fue coherente con la disminuci¨®n de los afiliados a la Seguridad Social, si bien ambas estad¨ªsticas no son directamente comparables, pues estos ¨²ltimos se refieren a la media diaria del mes, y los parados, al ¨²ltimo d¨ªa. El n¨²mero de afiliados a la Seguridad Social se redujo en 283.684 personas, frente a un descenso esperado de 218.000. En cifras desestacionalizadas, el descenso se qued¨® en unos 60.000. Como se ve en el gr¨¢fico superior derecho, el ritmo de ca¨ªda de la afiliaci¨®n ha ido intensific¨¢ndose a lo largo de 2011 y lo mejor que puede decirse es que en los dos ¨²ltimos meses se ha estabilizado en torno a una tasa anualizada del 3,5%. Si esta tasa se mantuviera el resto del a?o, ello indicar¨ªa que el PIB podr¨ªa caer en media anual entre el 1,5% y el 2%. Las cuentas cuadran con las ¨²ltimas previsiones del Fondo Monetario Internacional y el Banco de Espa?a. La estabilizaci¨®n en el ritmo de disminuci¨®n de los afiliados se debe a los sectores de la industria y la construcci¨®n (en este ¨²ltimo caso, a una tasa del orden del 15%), mientras que en los servicios no se observa a¨²n el suelo. Entre estos, las ramas que peor se comportaron relativamente en enero fueron las de comercio, hosteler¨ªa, actividades profesionales y actividades sanitarias y de servicios sociales.

Las previsiones para febrero apuntan tambi¨¦n mal, aunque la estacionalidad ya no es tan desfavorable como en enero. Por ello, el aumento del paro puede reducirse a unas 100.000 personas, y la disminuci¨®n de los afiliados, a 40.000. J

?ngel Laborda es director de coyuntura de la Fundaci¨®n de las Cajas de Ahorros (Funcas).