Escenas de ciudad en quiebra
Los sepultureros, los polic¨ªas, los conserjes, los administrativos..., no cobran Los autobuses est¨¢n en huelga; los polideportivos, cerrados. Ahogada por la deuda, Jerez agoniza
El buz¨®n es un fr¨ªo indicador econ¨®mico. Uno constata que las cosas ya no marchan bien cuando se acumulan los avisos y los recibos devueltos. Tambi¨¦n sabe que algo va mal cuando tu hija empieza a tener problemas en el colegio porque piensa que sus padres se est¨¢n separando. Francisco Marcos no duerme en casa, pero no porque est¨¦ enfadado con su esposa, como cree su peque?a. Es uno de los 14 empleados del cementerio de Jerez de la Frontera que ha pasado las noches acampado a las puertas del camposanto. Reclaman a este Ayuntamiento gaditano que les pague las dos n¨®minas que les deben. Los sepultureros no cobran desde diciembre, pero tampoco los polic¨ªas locales, ni los administrativos y conserjes. Nadie de la plantilla municipal: unos 2.400 empleados, sumando a los trabajadores del Consistorio y las empresas p¨²blicas.
?Si uno es delegado municipal de Econom¨ªa sabe que su Ayuntamiento ha tocado fondo cuando empieza el a?o sin un euro en la caja. Literalmente. ¡°La liquidez del a?o 2012 es cero¡±, reconoce Enrique Espinosa, del PP, el partido que gobierna desde junio Jerez (212.629 habitantes, la quinta ciudad de Andaluc¨ªa). ¡°No hay dinero ni para las n¨®minas, ni para los servicios esenciales¡±.
Amparo Llamas es otro retrato de esta quiebra local. Ella es una de las 400 empleadas de Acasa, la concesionaria encargada de la ayuda a domicilio en Jerez. Estas empresas de servicios sufren los impagos del Ayuntamiento, con lo que los trabajadores se quedan sin cobrar.
Son las ocho menos cuarto de la ma?ana y hace un fr¨ªo impropio para Jerez. Amparo Llamas y 50 de sus compa?eras de Acasa no se van a mover. Por tercera vez en los ¨²ltimos meses estas trabajadoras, a las que les deben dos salarios, han decidido bloquear la entrada a la sede del ¨¢rea municipal de Bienestar Social. Lo consiguen: ninguno de los 60 empleados municipales entra hoy en esas dependencias. Es mi¨¦rcoles y tres protestas recorren la ciudad. Pero podr¨ªa ser lunes o viernes, porque casi todos los d¨ªas hay concentraciones y manifestaciones en Jerez. Los polic¨ªas locales, las empleadas de ayuda a domicilio para dependientes y los trabajadores del cementerio han decidido acampar.
Los autobuses urbanos est¨¢n en huelga y solo salen la mitad de los que cubren los n¨²cleos rurales porque la concesionaria dice que ya no tiene dinero para combustible; las instalaciones deportivas municipales llevan un a?o sin abrir porque no tienen electricidad; los funcionarios se concentran para reclamar sus sueldos; y un tercio de los puntos de luz de la ciudad est¨¢n apagados porque la concesionaria ya no repone el material del alumbrado p¨²blico debido a los impagos y al robo de cable. ¡°Esto es una ciudad sin ley¡±, resume Jos¨¦ Manuel Trillo, secretario general de CC OO en Jerez.
El municipio ten¨ªa un agujero de 958,7 millones en 2010, sumando lo que debe el Ayuntamiento y las empresas municipales
Los 60 empleados del ¨¢rea de Bienestar Social esperan mientras sus jefes deciden qu¨¦ hacer ante la protesta de las trabajadoras de ayuda a domicilio. Jos¨¦ Mar¨ªa ¡ªprefiere guardarse el apellido¡ª es uno de esos funcionarios que deber¨ªa haber fichado a las 8.00 horas. ¡°Por la fuerza no entro a trabajar¡±, anuncia ante la previsi¨®n de que los agentes del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa saquen las porras. Jos¨¦ Mar¨ªa entiende a las empleadas de Acasa. El Consistorio le debe tambi¨¦n su salario. ¡°El Ayuntamiento est¨¢ colapsado¡±, a?ade.
No hay m¨¢s que levantar la vista para encontrar otra prueba. Este moderno edificio de Bienestar Social se inaugur¨® hace un a?o. Pero las instalaciones no est¨¢n conectadas a la red el¨¦ctrica porque Endesa se niega a darles acceso, tambi¨¦n por los impagos municipales. ¡°Trabajamos con generadores de gasolina¡±, indica Jos¨¦ Mar¨ªa. ¡°En la mitad del edificio no hay calefacci¨®n¡±, lamenta una de sus compa?eras.
Las trabajadoras de Acasa deber¨ªan cobrar. Quien paga los servicios de atenci¨®n domiciliaria de la Ley de Dependencia es la Junta de Andaluc¨ªa. El Gobierno regional ha cumplido con los pagos. El dinero que deber¨ªa haber recibido Acasa llega a las arcas municipales, pero se pierde en el enorme agujero econ¨®mico del Ayuntamiento y acaba parcheando otros gastos gracias al principio de caja ¨²nica que rige en la administraci¨®n de los Consistorios.
Jerez ten¨ªa un agujero de 958,7 millones a 31 de diciembre de 2010, sumando lo que debe el Ayuntamiento (663 millones) y las empresas municipales. Son los datos que esgrime el delegado de Econom¨ªa para justificar el colapso: ¡°Y nuestro presupuesto es de 222 millones¡±.
El desglose de la deuda del Consistorio tambi¨¦n es llamativo. De esos 663 millones, 162 millones se le adeudan a entidades bancarias, seg¨²n una auditor¨ªa encargada por el PP del periodo 2006/2010, cuando gobernaba el PSOE. Pero el grueso, 461 millones, corresponde a acreedores comerciales, es decir, a empresas como las contratas que prestan los servicios municipales.
De ah¨ª que muchos de los empleados de las concesionarias ¡ªque tienen derecho a que sus contratos se subroguen aunque cambie la empresa que presta el servicio municipal¡ª no solo sufran los retrasos en los salarios ahora. Les deben n¨®minas de a?os atr¨¢s. A Francisco Javier Pazos, conductor de autob¨²s, la actual concesionaria (Urbanos Amarillos) le adeuda tres sueldos. Pero Cojetursa, que abandon¨® Jerez en noviembre de 2010, le debe otros 4.600 euros. ¡°Sobrevivo pidiendo dinero a la familia y a amigos¡±, cuenta Pazos a las puertas del Ayuntamiento, de donde parte una protesta de los ch¨®feres.
Los problemas de Jerez se han acentuado con la crisis, pero no nacen de la crisis. Ya en 2005, cuando Espa?a cabalgaba en la bonanza, el Ayuntamiento aprob¨® un plan de saneamiento para tratar de bajar su deuda, cifrada entonces en 300 millones. ?D¨®nde nace la asfixia entonces? ¡°Es el resultado de gastar m¨¢s de lo que se ingresa durante 20 a?os¡±, responde Enrique Espinosa. El delegado pone como ejemplo la gran remodelaci¨®n de 2001 del circuito de Jerez, que debe 37 millones y est¨¢ en concurso de acreedores.
El alcalde andalucista de la ciudad durante 27 a?os, Pedro Pacheco, se revuelve en su sill¨®n actual de concejal y portavoz del Foro Ciudadano. ¡°Nadie se quejaba cuando la F¨®rmula 1 ven¨ªa cuatro d¨ªas y abrieron ocho hoteles¡±. ?l fue el que emprendi¨® la reforma del circuito: ¡°Esa es la herencia recibida¡±. Pacheco acusa al actual gobierno del PP de una inacci¨®n premeditada: ¡°Hay orden de no hacer nada hasta abril [despu¨¦s de las elecciones regionales], desde que entraron en mayo no han hecho nada¡±.
Jerez no recibe del Estado los 40 millones anuales que le corresponder¨ªan. Esas transferencias est¨¢n bloqueadas debido a la deuda de 133 millones que el Consistorio mantiene con Hacienda y la Seguridad Social. El ministro de Crist¨®bal Montoro se ha comprometido a reunirse con el Ayuntamiento para buscar una salida. La alcaldesa, Mar¨ªa Jos¨¦ Garc¨ªa Pelayo, ha anunciado esta semana que el Consistorio va a recuperar la recaudaci¨®n de los ingresos de los impuestos municipales, que se cedi¨® en 2008 a la Diputaci¨®n dentro de un plan de pago a acreedores. Esta medida permitir¨ªa al Ayuntamiento ingresar 6,5 millones al mes para poder ¡°sobrevivir¡± y pagar, al menos, las n¨®minas. ¡°Para vivir necesitamos 10¡±, admite Pelayo.
La alcaldesa cree que, si su plan funciona, a final de mes se podr¨¢n pagar la n¨®minas. Mientras, los trabajadores seguir¨¢n con la angustia de los n¨²meros rojos. Y con la ¡°incertidumbre¡± sobre el futuro, como reconoce el sepulturero Francisco Marcos. Sus compa?eros decidieron levantar la acampada tras el ¨²ltimo anuncio de la alcaldesa. Pero temen que, con la reforma laboral aprobada, puedan empezar en unos meses los despidos en el Ayuntamiento.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.