Los nombres y apellidos detr¨¢s de los recortes del Gobierno de Rajoy

Javier Hern¨¢ndez es uno de los 250 funcionarios de Justicia que se han manifestado esta ma?ana frente a la sede del PP, en la calle de G¨¦nova. Lleva 22 a?os en el cargo y afirma que los recortes suponen ya un descenso superior al 30% desde el Gobierno de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero.

¡°El que nos quiten la paga extraordinaria supone una bajada del 7% en nuestro salario. Entre los recortes de Zapatero, las congelaciones de sueldo y las bajadas por parte de la Comunidad de Madrid, hemos perdido un 30% de nuestro poder adquisitivo. Si antes dispon¨ªamos de 100 euros para comprar, hoy tenemos que pasar con 70¡±, manifiesta.

¡°No sabemos qu¨¦ m¨¢s medidas va a incluir el decreto que apruebe hoy el Gobierno. Ma?ana tendremos que leerlo bien, pero ya han aprobado cosas que son una aut¨¦ntica burrada, como la movilidad geogr¨¢fica. Los funcionarios y trabajadores p¨²blicos no pueden cerrar su casa e irse a vivir a otra ciudad con los sueldos que cobran¡±.

Asegura que pagan la hipoteca con muchas dificultades y que hay ¡°decenas de compa?eros¡± que ya saben que no podr¨¢n pagar los libros de texto de sus hijos para el pr¨®ximo curso: ¡°Por culpa de esta gente se est¨¢ arruinando a familias enteras¡±

¡°La gente siempre habla mal del funcionario, pero no se da cuenta de que sin m¨¦dicos, sin bomberos, sin trabajadores de Justicia todo esto se hunde. Que la gente no se equivoque. Nosotros tambi¨¦n trabajamos y no es justa la fama de vagos que tenemos¡±.

Victoria Vilar es trabajadora interina del Tribunal Superior de Justicia de Madrid. Esta ma?ana se ha manifestado frente a la sede del PP. Ve con mucha preocupaci¨®n los recortes aprobados esta semana y duda mucho que pueda llegar a final de mes con la pensi¨®n que recibe su marido ya jubilado y su sueldo. Sufre adem¨¢s una discapacidad del 56% en la vista.

¡°Con los recortes nos est¨¢n descontando unos 200 euros al mes, de una n¨®mina de 1.300 euros incluidos los trienios. Limpios, cobrar¨¦ menos de 1.100 euros, lo que es muy poco¡±. A la bajada tambi¨¦n se une que el Gobierno de la Comunidad de Madrid ha descontado dinero a los interinos: ¡°Y eso con mis dos hijas, de 24 y 28 a?os en casa. Son universitarias y con formaci¨®n, pero tienen que vivir con nosotros porque no encuentran nada de trabajo. Est¨¢n en el paro¡±.

¡°Lo que m¨¢s me cabrea es que no se metan con los banqueros. Las medidas que est¨¢n tomando de tanto recorte y de quitar prestaciones deber¨ªan empezar por ellos, por los pol¨ªticos. Dudo mucho que Esperanza Aguirre pase problemas econ¨®micos como nos pasa al resto de empleados¡±.

¡°Si nos bajan todo lo que nos dicen y encima nos quitan la paga extra de Navidad, no s¨¦ c¨®mo vamos a llegar a final de mes. El dinero no nos llega para hacer frente a todos los pagos y a comer, vestir,¡­¡±

Miguel Garc¨ªa ha pasado a?os de su vida dedicado a la Administraci¨®n. En el relato de sus circunstancias hay pinceladas de humor y de enfado. Garc¨ªa es mileurista, su mujer est¨¢ en paro, y sobre su sueldo recae la totalidad de la hipoteca que est¨¢ pagando cada mes, algo m¨¢s de 300 euros. Ambos tienen un hijo que, ¡°gracias a Dios¡±, est¨¢ trabajando. Por la supresi¨®n de la paga extra, afirma, ¡°viajar en verano se acab¨®: estoy moreno porque corro por el parque¡±. Garc¨ªa considera que el Gobierno de Rajoy ¡°est¨¢ muy equivocado¡± y que ¡°se va a liar una de miedo¡±. El empleado p¨²blico reclama que la reacci¨®n antes los recortes sea ¡°mucho m¨¢s dr¨¢stica¡±. ¡°?Lo de los mineros tiene que duplicarse!¡±, dice contundente.

Elo¨ªsa D¨ªez se considera una persona afortunada: no tiene la carga de una hipoteca ni hijos, y cobra m¨¢s de 2.500 euros mensuales. A pesar de ello, estuvo con sus compa?eros en la concentraci¨®n del jueves a mediod¨ªa ante Nuevos Ministerios, en el paseo de la Castellana. ¡°Est¨¢ justificado que se tomen medidas, pero no estas¡±, explica. ¡°La supresi¨®n de la paga de Navidad resulta absurda por burda¡±. D¨ªez cree que los recortes no deben afectar siempre a los mismos. ¡°Hubiera sido m¨¢s razonable aplicar la rebaja de acuerdo con el salario¡±, ya que hay funcionarios que ganan una cantidad ¡°muy por debajo de la que necesitan para vivir¡±. Para esta empleada p¨²blica, la huelga general est¨¢ ahora ¡°totalmente justificada¡±. Lo peor de todo, seg¨²n D¨ªez: en Espa?a no se adoptan pol¨ªticas de crecimiento. El problema es ¡°la falta de reflexi¨®n de los pol¨ªticos¡± y que no se tomen ¡°medidas sosegadas¡±.

Mirka Arendacz, polaca de 31 a?os, se ha ido a apuntar esta ma?ana al paro. Desde septiembre ha trabajado como profesora de ingl¨¦s en una academia de idiomas. Su contrato se termin¨® y no tiene esperanzas de encontrar algo antes de que se reinicie el curso. En su ¨²ltimo trabajo ya hab¨ªa sido v¨ªctima de los recortes. ¡°En enero nos bajaron el salario un 20%. Adem¨¢s, todos ten¨ªamos que ser aut¨®nomos para que no nos tuvieran que pagar la Seguridad Social¡±, relata. Ahora est¨¢ preocupada por el futuro de sus finanzas: ¡°Desde que me vine de Polonia, hace dos a?os, todo ha empeorado mucho¡±. Cuenta que sus amigos est¨¢n tambi¨¦n en el paro y que le llama la atenci¨®n comparar la situaci¨®n que vive Espa?a con la de otros pa¨ªses europeos. ¡°La gente no ve un futuro, es muy triste¡±. Aun as¨ª piensa permanecer en el pa¨ªs, por lo menos por ahora.

En agosto de 2011 Eduardo Ruiz de Velasco, un inform¨¢tico que trabajaba como teleoperador, pidi¨® una excedencia y dej¨® su puesto de trabajo para montar un locutorio con su mujer. La crisis se llev¨® su negocio y muchos de los sue?os de ambos por delante. Este viernes ha acudido a inscribirse como parado. Su excedencia se lo permite. Cobrar¨¢ en torno a 800 euros mensuales. Su hijo de 20 a?os tambi¨¦n est¨¢ en paro. ¡°Ni la reforma laboral ni reducir la prestaci¨®n por desempleo un 10% o un 70%: el problema es la clase empresarial¡±, afirma rotundo. ¡°Cuando eres joven, te dicen que no tienes experiencia; y cuando tienes experiencia eres demasiado viejo, ?qu¨¦ es lo que quieren?¡±. Ruiz de Velasco se muestra pesimista respecto a la posibilidad de encontrar empleo: ¡°No tengo ninguna esperanza en que me contraten. S¨¦ que debo montar algo yo o irme de aqu¨ª¡±.

Laureano Men¨¦ndez ha dedicado 27 de sus 57 a?os a trabajar en la cervecer¨ªa que posee junto a su hermano Pedro en la calle Mayor de Madrid. Cuenta que su negocio se ha visto afectado tanto por la crisis como por la prohibici¨®n de fumar en ¨¦l. ¡°Ahora se vende mucho menos de comer y poco de tomar¡±, afirma. Por eso teme que el alza en el IVA (del 8% al 10% en hosteler¨ªa) repercuta todav¨ªa m¨¢s en la afluencia de clientes. ¡°No he vivido una ¨¦poca tan mala como esta¡±, sostiene. Men¨¦ndez asegura que no ha subido los precios en los ¨²ltimos cuatro a?os. Tampoco cree que lo pueda hacer ahora, porque considera que perder¨¢ p¨²blico. Por eso ve que la ¨²nica alternativa para pagar los mayores costes que se producir¨¢n con el alza del IVA ser¨¢ aumentar sus horas de trabajo.

A Cecilia Nieto se le empa?an los ojos al hablar de la situaci¨®n econ¨®mica por la que atraviesa su sector. ¡°?La subida del IVA? No tengo palabras¡±. Su tienda de licores, abierta al p¨²blico desde hace tres a?os, se ha visto afectada por la crisis. Las ventas directas al p¨²blico y a bares y restaurantes han bajado considerablemente: ¡°Se cargan la hosteler¨ªa. A veces vamos a cobrar los pedidos hechos y el negocio ha quebrado¡±. Con la subida del IVA, que en hosteler¨ªa ser¨¢ de dos puntos (de un 8 % a un 10%), teme que haya a¨²n menos ventas: ¡°Acabaremos cerrando todos, ?qu¨¦ vamos a hacer? Es insoportable¡±. Nieto se muestra muy desesperanzada: ¡°Se hacen recortes en todo, pero siempre a los mismos. La clase media termina y volvemos a una sociedad de ricos y pobres¡±.

Rafael Monteagudo trabaja en una agencia de viajes. Mientras toma un caf¨¦ con hielo en un bar delante de su casa asegura haber notado c¨®mo su calidad de vida ha mermado. Ahora se prepara para que las medidas aprobadas por el Gobierno, especialmente la subida del IVA, sigan profundizando esa situaci¨®n. ¡°Nos atracan¡±, asegura. ¡°Lo ¨²nico que importa en Espa?a es el f¨²tbol, y mientras tanto, a aguantar con todo¡±. De momento, Monteagudo ve el desempleo desde lejos, pero afirma que muchas personas de su alrededor lo sufren. A la vez se muestra especialmente con la clase pol¨ªtica: ¡°La ¨²nica soluci¨®n que veo es echarlos a la calle. Ellos se supone que son los que tienen que arreglar Espa?a, y ?qu¨¦ hacen?¡±, se pregunta.

Isabel Sierra, a sus 29 a?os, ha vivido en carne propia el desempleo juvenil. Est¨¢ en el paro desde que, hace unos meses, cerraron el centro de apoyo psicol¨®gico a drogodependientes en el que trabajaba junto a otras 60 personas. ¡°Los despidieron a todos¡±, comenta. Sierra no ve posible tomarse vacaciones y ya ha reducido su gasto en el supermercado, sobre todo remplazando unos productos por otros m¨¢s econ¨®micos. Comparte piso y teme que por su situaci¨®n tenga que mudarse. ¡°Puedo pasar de algunas marcas, pero espero no tener que recortar adem¨¢s en vivienda¡±, sostiene. Sobre el aumento del IVA, es categ¨®rica: ¡°No estoy nada de acuerdo con estas pol¨ªticas¡±.