El tiempo apremia
La normalizaci¨®n de las condiciones financieras pasa por utilizar los mecanismos de la UE
Mientras nuestro Gobierno sigue deshojando la margarita de c¨®mo y cu¨¢ndo solicitar la ayuda financiera al Eurogrupo, la econom¨ªa espa?ola languidece y sigue sumida en la recesi¨®n. Seg¨²n los datos de la contabilidad nacional revisados este verano por el INE, el PIB empez¨® a caer de nuevo en el tercer trimestre de 2011, dando carpetazo a una tenue recuperaci¨®n durante 2010 y primera mitad de 2011 que ni siquiera fue suficiente para estabilizar el empleo. Llevamos, por tanto, ya cuatro trimestres en marcha atr¨¢s, y lo peor es que la ca¨ªda va ganando velocidad. En el segundo trimestre de este a?o el retroceso fue de cuatro d¨¦cimas porcentuales (-1,7% en tasa anualizada), y las previsiones para el tercero y el cuarto apuntan a ca¨ªdas superiores.
Son muchas las causas de este comportamiento, pero la m¨¢s importante es la asfixia financiera que est¨¢ sufriendo desde que en julio de 2011 se recrudeciera la crisis de la deuda soberana europea y los inversores dejaran de proporcionar la financiaci¨®n necesaria a una econom¨ªa que la necesita mucho m¨¢s que otras de la zona euro por estar muy endeudada. Ciertamente, no hemos llegado a la situaci¨®n de los tres pa¨ªses que han tenido que ser rescatados hasta ahora, ya que el Tesoro, gracias a la liquidez que proporcion¨® el BCE a nuestros bancos, ha podido seguir colocando, aunque sea a precios muy gravosos, sus emisiones de deuda para financiar el d¨¦ficit del ejercicio y los vencimientos de emisiones anteriores. Quiz¨¢ esto es lo que ha adormecido a los gobernantes espa?oles y europeos y les ha impedido ver que el problema no era solo la financiaci¨®n del rey (el Tesoro), sino la de los s¨²bditos (los bancos, las empresas y las familias, es decir, la tropa). Y sin tropa no se ganan las batallas. Urge, por tanto, restablecer los canales de financiaci¨®n de la econom¨ªa. Y eso pasa hoy por solicitar la ayuda financiera para que el Fondo de Estabilidad Europeo intervenga comprando deuda espa?ola en el mercado primario y el BCE en el secundario, que es tanto como asegurar a los inversores que no van a sufrir p¨¦rdidas (m¨¢s all¨¢ del riesgo evaluable y asumible) si vuelven a invertir en Espa?a. Como eso lleva aparejado asumir una serie de condiciones, se entiende que el Gobierno intente negociar los mejores t¨¦rminos del acuerdo para el inter¨¦s general del pa¨ªs, pero sin demorar la decisi¨®n innecesariamente. La tropa se muere de hambre.
Las previsiones apuntan a ca¨ªdas del PIB entre siete y nueve d¨¦cimas en el tercer y cuatro trimestres
Los datos disponibles para el tercer trimestre se refieren al mes de julio, y algunos, a agosto. Casi todos ellos siguen mostrando retrocesos [v¨¦anse los gr¨¢ficos adjuntos], pero en general da la impresi¨®n de que el ritmo de ca¨ªda de la econom¨ªa y del empleo no se ha acelerado en estos meses, en contra de lo previsto por los analistas. Ahora bien, hay que tener en cuenta varios factores que pueden empeorar la situaci¨®n. Por un lado, es posible que muchas decisiones de gasto se hayan adelantado a esos meses para evitar la subida del IVA. Si esto fuera as¨ª, es de esperar que a partir de septiembre las ca¨ªdas del gasto privado sean m¨¢s elevadas de lo normal. La subida de la inflaci¨®n a causa del aumento del IVA y de los precios de la energ¨ªa va a afectar a la capacidad de compra. Los indicadores de confianza, de pedidos a las empresas y de expectativas, que generalmente adelantan al ciclo real de la econom¨ªa, han sufrido notables deterioros. Ante esta situaci¨®n de suma debilidad de la demanda y falta de financiaci¨®n, las empresas est¨¢n reduciendo sus inversiones productivas y ajustando plantillas. Por ¨²ltimo, las Administraciones p¨²blicas deben acelerar los recortes de gasto si es que quieren acercarse al objetivo de d¨¦ficit p¨²blico del 6,3% del PIB para el conjunto del a?o.
Todo ello hace prever que la coyuntura empeore significativamente en los meses que restan del a?o. Concretamente, las previsiones de la mayor¨ªa de analistas apuntan a ca¨ªdas del PIB del orden de siete y nueve d¨¦cimas porcentuales en el tercer y cuarto trimestres, respectivamente. Con ello, el retroceso medio anual se situar¨ªa en torno al 1,6%. M¨¢s dif¨ªcil es prever qu¨¦ puede pasar el pr¨®ximo a?o, sobre todo cu¨¢ndo puede estabilizarse la econom¨ªa y empezar a recuperarse. La normalizaci¨®n de las condiciones financieras es fundamental, y ello pasa por utilizar cuanto antes las posibilidades abiertas por los ¨²ltimos mecanismos acordados por la familia europea.
?ngel Laborda es director de coyuntura de la Fundaci¨®n de las Cajas de Ahorros (Funcas).
Buenos datos para el turismo
Afortunadamente, no todo va mal para la econom¨ªa espa?ola. Las exportaciones de bienes apenas crecen, acusando la debilidad de los mercados exteriores, sobre todo los europeos, pero las exportaciones de servicios muestran crecimientos importantes. Dentro de estos, los no tur¨ªsticos son los m¨¢s din¨¢micos, pero tambi¨¦n los tur¨ªsticos van bien. Las pernoctaciones de extranjeros en hoteles mantienen una tendencia al alza muy clara y en julio aumentaron un 4,3% respecto al mismo mes del a?o anterior. Esta semana se han publicado los datos de entradas de turistas en agosto, dando un crecimiento interanual del 5%. La media de julio y agosto de los datos desestacionalizados registran un aumento del 6,4% respecto a la media del trimestre anterior, tras otro del 8,6% en dicho trimestre. Adem¨¢s, y al contrario de lo que ocurre con los turistas espa?oles, el gasto medio por turista aumenta, al menos para compensar la inflaci¨®n, por lo que el gasto total real crece a tasas envidiables para otros sectores de la econom¨ªa.
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