La industria se apresta a combatir los nuevos impuestos a la electricidad

La panoplia de nuevos impuestos aprobada por el Gobierno para taponar el d¨¦ficit tarifario el¨¦ctrico (24.000 millones de euros) est¨¢ provocando algo poco com¨²n: la formaci¨®n de un frente entre diferentes sectores industriales (del papel a la cer¨¢mica, pasando por la siderurgia) para tratar de modificar lo aprobado durante la tramitaci¨®n del proyecto de ley del denominado Proyecto de Ley de Medidas de Sostenibilidad del Sector Energ¨¦tico. Seg¨²n lo anunciado, y si no se modifica el plan, en enero habr¨¢ un impuesto general del 6% para todas las empresas productoras de electricidad, un canon (22%) a las centrales hidr¨¢ulicas, impuestos a la producci¨®n y almacenamiento de residuos nucleares, fin de exenciones fiscales a los combustibles f¨®siles que se queman para generar electricidad y un nuevo impuesto de 2,79 c¨¦ntimos por metro c¨²bico al gas natural. Dos de esas medidas especialmente: el impuesto general del 6% y el recargo al gas natural (el mal llamado c¨¦ntimo verde) son las que incomodan a la industria. la raz¨®n es simple: numerosas instalaciones industriales utilizan el gas para su funcionamiento y adem¨¢s, en los ¨²ltimos a?os han apostado por instalaciones de cogeneraci¨®n (que utilizan el combustible para producir y aprovechar a la vez electricidad y calor).

Las cuentas que los productores industriales-cogeneradores van a presentar a Industria para defender su postura contraria al "impuestazo", seg¨²n lo denominan son las siguientes: por el impuesto del 6% a la generaci¨®n, impacto negativo de? 205 millones al a?o; por el c¨¦ntimo verde al gas natural, 198 millones y por el fin del impuesto cero del fuel para electricidad, cinco millones m¨¢s. M¨¢s de 400 millones al a?o.

Alertan de que se pueden perder hasta 65.000 empleos

Entre las asociaciones, que esta misma semana han mantenido contactos, corren datos en forma de argumentario. Los principales son: los costes de producci¨®n se disparar¨¢n porque la factura el¨¦ctrica se encarecer¨¢ entre el 8% y el 12%; la cogeneraci¨®n sufrir¨¢ cierres y como representa el 15% del producto interior bruto (PIB) industrial, se perder¨¢n 65.000 empleos. Adem¨¢s, en sectores concretos, se van a manejar cifras espectaculares. Por ejemplo en el sector azulejero, volcado en la exportaci¨®n tras la crisis inmobiliaria. Seg¨²n los datos que manejan las empresas, el aumento de 30 millones de euros anuales en la factura energ¨¦tica del sector se comer¨¢ sus beneficios, que son de 32 millones al a?o.

Para redondear el argumentario, las empresas sostienen que la menor actividad industrial y el menor empleo provocar¨¢n una reducci¨®n de los ingresos fiscales del Estado y de los ingresos de la Seguridad Social que podr¨ªan llegar a anular el aumento de la recaudaci¨®n que persigue el Ministerio de Industria con los nuevos impuestos aprobados.

Como en otras muchas ocasiones, los cr¨ªticos con las medidas aprobadas por el Gobierno examinan la legislaci¨®n comunitaria con lupa para encontrar palancas con las que remover las decisiones inc¨®modas. Y en este sentido sostienen que las Directivas europeas defienden que la generaci¨®n el¨¦ctrica con gas no deber¨ªa estar gravada por el nuevo impuesto.