¡°Necesitamos m¨¢s Europa en la econom¨ªa¡±

Decenas de millones de personas en todo el mundo tienen la oportunidad de ver cada fin de semana por televisi¨®n sus productos. Esas manchas de colores que se vislumbran entre las ruedas de los Ferrari y otras cinco escuder¨ªas de la f¨®rmula 1 son los frenos Brembo. De paso por Madrid para recibir el Premio Tiepolo, Alberto Bombassei, presidente de la firma y uno de los industriales m¨¢s influyentes de Italia, cree que la salida de Europa a la crisis pasa por apostar por la investigaci¨®n y la educaci¨®n.

Pregunta. En un momento como este, en el que los pol¨ªticos buscan soluciones para salir de la crisis ?los empresarios creen que est¨¢n siendo escuchados?

Respuesta. Es muy dif¨ªcil hacer un juicio en el ¨¢mbito europeo, porque las circunstancias pol¨ªticas son diferentes en cada pa¨ªs. En Italia, la cercan¨ªa del Gobierno Monti a la industria ha sido extraordinaria. No solo ha declarado su disponibilidad para hacer algo a favor de la industria, sino que ha reconocido que su Gobierno t¨¦cnico no ten¨ªa un conocimiento al detalle y ha pedido ayuda a las empresas para saber qu¨¦ se puede hacer para reindustrializar el pa¨ªs, que es un asunto no solo italiano, sino com¨²n a toda Europa. Esta cercan¨ªa tan constructiva ha sido una sorpresa para el sistema industrial, al menos mientras yo he tenido responsabilidad en las asociaciones de empresarios. Siempre se nos ha consultado. En estos momentos, en Italia hay una buena relaci¨®n entre las empresas y la pol¨ªtica. En el pasado no ha sido siempre as¨ª. El Gobierno Monti es muy apreciado por la industria, y eso que se est¨¢n pidiendo grandes sacrificios al sistema industrial y a los ciudadanos en general.

P. Pero el Gobierno Monti no es un Gobierno pol¨ªtico, sino t¨¦cnico. Es decir, es una excepci¨®n que no puede resultar permanente.

R. Es cierto, y hay movimientos que quieren un segundo Gobierno Monti. Este Gobierno tiene una gran credibilidad en el exterior, y esto ayuda a Italia, pero tambi¨¦n la tiene dentro del pa¨ªs, y esto es extremadamente importante para lograr superar la crisis y hacer una pol¨ªtica de reindustrializaci¨®n, lo que significa crear puestos de trabajo y realizar algunas reformas que tambi¨¦n est¨¢n haciendo otros pa¨ªses europeos. Todos tenemos problemas similares, si bien es verdad que algunos pa¨ªses tienen una posici¨®n mejor que otros. Hace dos semanas se celebr¨® un encuentro de asociaciones de empresarios italianos y alemanes. Y yo, que no soy un pol¨ªtico, o¨ªa hablar de la soluci¨®n de este desaf¨ªo, que vivimos a nivel global y que los europeos tenemos encima de la mesa, con una actitud europea que en el pasado nunca se hab¨ªa escuchado.

¡°Hay que dar pasos enormes en cuanto a la fiscalidad en Europa¡±

P. El momento es dif¨ªcil, pero ?no es m¨¢s dif¨ªcil porque hay demasiadas voces discordantes que afectan a la econom¨ªa? Por ejemplo, en un mismo d¨ªa podemos encontrarnos declaraciones ¡ªno siempre en el mismo sentido¡ª de Mario Draghi, del Banco Central Europeo (BCE), del presidente de la Comisi¨®n Europea, Jos¨¦ Manuel Dur?o Barroso, y del ministro de Finanzas alem¨¢n, Wolfgang Sch?uble, por citar a tres.

R. Es cierto. Y es la demostraci¨®n de la necesidad de que toda Europa se conduzca de manera conjunta. No que el Banco Central Alem¨¢n dice una cosa, y el mismo d¨ªa, el de Italia, otra¡­ Creo que los ciudadanos necesitamos una mayor presencia europea en la parte econ¨®mica, es decir, bancaria y fiscal. Hay que dar pasos enormes en cuanto a la fiscalidad. Hoy, cada pa¨ªs tiene su pol¨ªtica fiscal, pero hay que dar un paso de gigante para que Europa cuente algo, porque al final todos ¡ªpol¨ªticos, periodistas¡ª dicen cu¨¢l es el remedio, pero hay que dar salto cualitativo para hacerlo.

P. ?Cu¨¢l es ese salto?

R. Cada pa¨ªs ha cometido sus errores, pero estamos convencidos de que los errores del pasado nos ense?an y pueden servir para hacer una pol¨ªtica europea de invertir en desarrollo, en investigaci¨®n o en educaci¨®n. Por ejemplo, ning¨²n pa¨ªs europeo puede competir en el ¨¢mbito global en funci¨®n del coste de la mano de obra, pero el desaf¨ªo es crear productos nuevos, de gran calidad, donde se refleje nuestra cultura. El hecho cultural es determinante en el ¨¦xito, pero es necesario inventar, y para esto hay que invertir en investigaci¨®n e innovaci¨®n.

P. El mundo econ¨®mico europeo gira en torno una sola palabra: rescate. ?Considera eficaces los rescates o son medidas t¨¦cnicas que no funcionan?

R. Hay necesidades pol¨ªticas y necesidades econ¨®micas. Por ejemplo, en Italia, Monti est¨¢ pidiendo grandes sacrificios que afectan a todos los estratos de la sociedad. Obviamente, una rebaja del 10% en el salario no me afecta igual a m¨ª que a uno de mis empleados; ¨¦l lo sufre mucho m¨¢s. Pero quiero subrayar el sentido com¨²n de la gente, que a pesar de las dificultades ¡ªy le puedo asegurar que hay muchas familias que lo pasan mal para llegar a fin de mes¡ª sabe que esto es necesario para tener al menos la esperanza de que en el futuro tendr¨¢n una mejor calidad de vida. Est¨¢ claro que hay quienes abusan de este concepto de sacrificio y es cierto que igual que cada pa¨ªs tiene unas caracter¨ªsticas diferentes, la soluci¨®n no puede ser la misma para todos. En cualquier caso, empujar en la direcci¨®n del europe¨ªsmo es trabajar por el futuro de nuestros hijos. Creo que una de las cosas m¨¢s peligrosas que est¨¢n ocurriendo es que nunca hemos tenido en nuestros pa¨ªses tasas de desempleo tan altas. Mi generaci¨®n tiene un deber. Ha vivido por encima de sus posibilidades, y hoy los j¨®venes corren el riesgo de pagar por ello. Es necesario un pacto generacional a favor de los j¨®venes. A los j¨®venes no les asusta la pobreza, sino el no tener la esperanza de mejorar su vida. Quitarles esta esperanza es un delito, y la pol¨ªtica y la econom¨ªa est¨¢n obligadas a dar una respuesta al sentido com¨²n.

¡°Europa debe invertir sobre todo en investigaci¨®n e innovaci¨®n¡±

P. Italia tiene una gran presencia industrial en Espa?a. ?Es f¨¢cil ceder a la tentaci¨®n de la desinversi¨®n como medida inmediata de defensa?

R. Hay una grand¨ªsima presencia italiana en Espa?a desconocida para el gran p¨²blico. Y no solo en Espa?a. La gran mayor¨ªa de los italianos no saben, por ejemplo, que Espa?a importa desde Italia un volumen mayor que China, Brasil e India juntas. Y no estamos hablando de productos t¨ªpicos. Para una industria italiana siempre ha sido natural pensar en Espa?a como su primer paso fuera del pa¨ªs. Hoy ha cambiado la geograf¨ªa industrial y los productos italianos deben competir con otros pa¨ªses, como los chinos o los de Este de Europa, pero no es verdad que haya menos oportunidades, tenemos que buscarlas.

P. ?C¨®mo valora las ¨²ltimas deslocalizaciones de la industria del autom¨®vil?

R. Primero quiero subrayar que cuando los medios hablan de f¨¢bricas de autom¨®viles que se trasladan suelen olvidar los sectores de fabricaci¨®n de componentes, que suponen el 75% del valor del autom¨®vil. El cierre de una f¨¢brica conlleva el cierre de decenas de empresas de componentes. Sobre esto, Europa deber¨ªa ser m¨¢s estricta para hacer respetar las reglas. Por ejemplo, la normativa europea impide las ayudas estatales a las industrias del autom¨®vil. D¨ªgame una que no la tenga. Hoy, por primera vez en la historia, el mercado es verdaderamente global. Hay que coordinarse en el ¨¢mbito europeo. No puede ser que cada pa¨ªs o cada marca act¨²en en perjuicio de todos los dem¨¢s.