¡°Se podr¨¢n pagar pensiones razonables, pero trabajando m¨¢s¡±
Su ¨²ltimo trabajo escrito junto con Nicholas Barr analiza "la reforma necesaria"
Hace ya dos a?os que Peter Diamond (Nueva York, 1940) dej¨® de dar clases de Econom¨ªa en el prestigioso Massachusetts Institute of Technology. Ahora es un jubilado que no tiene miedo porque un d¨ªa la Seguridad Social de Estados Unidos deje de pagarle su pensi¨®n. ¡°Mucha gente est¨¢ preocupada y dice cosas como: yo no espero conseguir nada de la Seguridad Social. Creo que tienen una actitud completamente irrealista. Los ingresos por cotizaciones continuar¨¢n llegando mucho tiempo despu¨¦s de que yo ya no viva. Puede que no haya suficiente dinero para pagar hasta el ¨²ltimo centavo con la ley actual, pero habr¨¢ suficiente dinero para pagar pensiones razonables¡±.
Envejecimiento de la poblaci¨®n, largas carreras de cotizaci¨®n o la llegada a la jubilaci¨®n de la generaci¨®n del baby boom de posguerra han extendido en los occidentales el temor por el futuro de las pensiones. Diamond, que gan¨® el Nobel de Econom¨ªa en 2010 no lo tiene, aunque para estar tranquilo pide cambios: ¡°Hay que detectar los problemas. El problema no est¨¢ en la econom¨ªa subyacente, sino en el dise?o del sistema de pensiones. As¨ª que hay que ajustar los sistemas a la demograf¨ªa y a la econom¨ªa¡±, analiza el economista, que llega a Espa?a para participar en un foro organizado por la Fundaci¨®n Rafael del Pino.
En esa teor¨ªa se asienta su ¨²ltimo trabajo, La reforma necesaria: el futuro de las pensiones (editado por El Hombre de Tres). Lo ha escrito a cuatro manos con otra autoridad mundial sobre la materia: el profesor de la London School of Economics, Nicholas Barr. Y tras el trabajo, llega a una conclusi¨®n tranquilizadora: ¡°S¨ª [en el futuro] se podr¨¢n pagar pensiones confortables¡±. Aunque vuelve a aparecer el matiz: ¡°La pregunta a hacerse es qu¨¦ tama?o quieres que tengan. Eso es una elecci¨®n. Pensiones grandes o peque?as. La parte dif¨ªcil es reconocer que la gente tiene que trabajar m¨¢s o tener pensiones m¨¢s peque?as. La esperanza de vida crece y la natalidad baja. Tienes que ajustarte preferiblemente en las dos dimensiones. En parte, haciendo que la gente trabaje m¨¢s y, en parte, con pensiones m¨¢s bajas. Es importante reconocer que no todo el mundo es igual, tiene que haber leyes que se ajusten para la gente con diferente salud, trabajo, con diferentes oportunidades e ingresos¡±.
?Y toda reforma de pensiones tiene que pasar necesariamente por recortes? ¡°Depende de las circunstancias del sistema¡±, explica el que fuera profesor del actual presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, que fue rechazado hace tres a?os por los republicanos para compartir con su exalumno el Consejo de Gobernadores de la Fed. ¡°En Estados Unidos las cotizaciones son bajas, aumentarlas deber¨ªa ser una meta de la reforma, pero en pa¨ªses con cotizaciones altas es otra historia. All¨ª el tema clave deber¨ªa ser que la gente se retirara m¨¢s tarde¡±, explica.
El Nobel no conoce el sistema espa?ol al detalle. As¨ª que no llega con una receta detallada de c¨®mo tiene que ser el factor de sostenibilidad ¡ªel mecanismo de ajuste autom¨¢tico de las pensiones seg¨²n la marcha de la econom¨ªa y la esperanza de vida¡ª. Aunque su manual es amplio y le da para facilitar unas l¨ªneas generales. ¡°En muchos pa¨ªses si retrasas tu edad de jubilaci¨®n tienes una pensi¨®n mayor. Si un sistema no te da nada m¨¢s por retrasar la edad de jubilaci¨®n, te retirar¨¢s lo antes posible y eso es un mal dise?o, es malo para el mercado de trabajo y malo para el sistema financiero. Los pa¨ªses tienen la opci¨®n de tirarlo todo y empezar de cero. As¨ª que la pregunta no es qu¨¦ hacemos, sino c¨®mo definimos la pensi¨®n cuando t¨² te jubiles y c¨®mo dise?amos la actualizaci¨®n a?o a a?o en la pensi¨®n para los que ya est¨¢n retirados¡±. ¡°Ning¨²n [mecanismo] es perfecto, pero no necesitamos perfecci¨®n, sino un sistema que funcione razonablemente bien¡±, zanja.
Si la reforma tarda, puede ser tarde, en su opini¨®n. Ni la distorsi¨®n que puede introducir en el debate una tasa, creciente, de paro del 26%, sirve de excusa. ¡°Siempre es dif¨ªcil hacerlo, esto es algo que la gente entiende y es importante para la gente¡±.
Cuando Diamond gan¨® el Nobel junto con Dale T. Mortensen y Chistopher A. Pissarides, la Academia Sueca destac¨® sus investigaciones y modelos matem¨¢ticos para estudiar las imperfecciones de los mercados laborales, lo que los economistas llaman fricciones: ?Por qu¨¦ no encajan perfectamente las ofertas y las demandas de trabajo? ?Est¨¢ bien dise?ado el seguro de desempleo? As¨ª que cuando el tambi¨¦n exprofesor de la Universidad de Berkeley aterriza en Espa?a la pregunta es obvia: ?Acabar con esas fricciones resolver¨ªa el paro? ¡°Hay un debate: ?qu¨¦ parte del desempleo responde a fricciones?, ?qu¨¦ parte se debe a falta de demanda agregada? La demanda agregada es importante hoy, pero eso no quiere decir que las fricciones no sean importantes para la econom¨ªa. No debemos perder de vista la importancia del crecimiento econ¨®mico, no solo para el desempleo sino tambi¨¦n para afrontar deudas. M¨¢s crecimiento econ¨®mico rebaja el ratio de deuda sobre el PIB y eso es importante. El mundo no est¨¢ fuera de la Gran Recesi¨®n todav¨ªa, ni por asomo. As¨ª que es importante hacer cosas que ayuden al crecimiento econ¨®mico¡±.
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