Vender m¨¢s horas no es vender m¨¢s
La facturaci¨®n y el empleo en el sector caen pese a la ampliaci¨®n de horarios comerciales
El paro, la recesi¨®n y la desconfianza pesan m¨¢s en la cesta de la compra que los horarios de las tiendas. Los cambios en las aperturas comerciales, que se convirtieron el a?o pasado en un arma arrojadiza entre Gobiernos, no est¨¢n marcando la diferencia en plena crisis de consumo. A grandes rasgos, dos modelos opuestos imperan en Espa?a: a un lado, Catalu?a, Pa¨ªs Vasco o Andaluc¨ªa, con normativas m¨¢s restrictivas con respecto a las aperturas en festivo. En el otro, Madrid, donde se puede abrir siempre; o Valencia, con amplias zonas tur¨ªsticas declaradas donde los grandes operadores han comenzado a levantar la persiana todos los domingos. La cuesti¨®n, sin embargo, no inclina la balanza: en todos los lugares las ventas se reducen y el empleo del comercio se esfuma.
Pese a los cambios de algunas comunidades, las tiendas (sin contar las estaciones de servicio) vendieron en marzo un 11,3% menos que un a?o antes, seg¨²n el ¨ªndice de comercio al por menor del Instituto Nacional de Estad¨ªstica. En el primer trimestre la bajada fue del 10%. La normativa estatal sobre horarios comerciales, aprobada el verano de 2012, acab¨® en un punto medio: exige que, como m¨ªnimo, las autonom¨ªas permitan a los grandes operadores abrir al menos 10 festivos al a?o y crear zonas en grandes ciudades de afluencia tur¨ªstica con muy pocas limitaciones comerciales. En Catalu?a, donde se abre menos d¨ªas y menos horas, se vendi¨® el 10,6% menos. En Madrid, donde no hay l¨ªmites, se vendi¨® el 13,2% menos.
Grandes cadenas, menores impactos
A la hora de abrir un festivo o no, el tama?o importa. Los peque?os comercios tienen la posibilidad en toda Espa?a de levantar la persiana cuando quieran, mientras que en la mayor¨ªa de comunidades todav¨ªa ponen barreras de apertura a las grandes superficies. Pese a todo, las tiendas peque?as son las que m¨¢s notan la crisis de consumo. En marzo su negocio cay¨® el 14,1%. Tampoco las grandes superficies lo est¨¢n teniendo f¨¢cil: sus ventas bajaron el 9,9%. Solo las grandes cadenas han limitado el descenso de su negocio al 6,9%. Son empresas grandes, como Inditex o Mango, que poseen tiendas peque?as y m¨¢s flexibilidad para reubicar locales o plantilla.
Pero donde destacan estas grandes cadenas es en el empleo: no lo redujeron en marzo sobre un a?o antes. Y en lo que va de a?o aument¨® el 0,1%. Las peque?as empresas unilocalizadas lo redujeron durante el primer trimestre el 1,7% y las grandes superficies un 2,7%.
Pese a que peque?os comerciantes y grandes superficies suelen tener posiciones encontradas, ANGED y la Confederaci¨®n Espa?ola de Comercio coinciden en una cosa: aseguran que los impuestos son un elemento que afecta al consumo y exigen al Gobierno que no eleve de nuevo el IVA. ¡°Los est¨ªmulos a la compra han funcionado con la venta de coches. Deber¨ªan extenderse a otros productos¡±, a?ade Manuel Garc¨ªa-Izquierdo, de la Confederaci¨®n de Comercio.
Las ventas al por menor no mejoraron en ninguna comunidad y, adem¨¢s, la ca¨ªda de consumo parece lejos de solucionarse: entre febrero y marzo el desplome fue de media en Espa?a del 10%. ¡°Estamos pasando un momento cr¨ªtico. La situaci¨®n econ¨®mica es compleja. Pero creo que hay que ver una fotograf¨ªa m¨¢s amplia. Si se observan los ¨²ltimos 10 a?os, queda claro que las comunidades con mayor liberalizaci¨®n han evolucionado mejor que las que han mantenido pol¨ªticas m¨¢s restrictivas, tanto en n¨²mero de comercios como en empleo¡±, defiende Carmen C¨¢rdeno, directora general de Comercio en el Ministerio de Econom¨ªa, que recuerda, adem¨¢s, que hay segmentos que crecen, como el electr¨®nico.
En cuanto al empleo, tampoco los horarios marcan diferencias. En la liberalizada Madrid el empleo en el comercio (sin estaciones de servicio) en marzo cay¨® un 2,2%, seg¨²n el INE. Arag¨®n, donde solo se puede abrir 11 festivos al a?o, es la comunidad donde se produjo el menor descenso, un 0,1%. Pero Andaluc¨ªa, tambi¨¦n muy restrictiva, se desploma el 3,1%. C¨¢rdeno, sin embargo, asegura que, aunque esta estad¨ªstica es muy negativa, hay otras, como la EPA, que s¨ª observan crecimiento en los puestos de trabajo de algunas comunidades como Baleares o Madrid este trimestre.
¡°Los horarios comerciales no est¨¢n teniendo ning¨²n efecto en el empleo. La coyuntura actual no permite crear puestos de trabajo aunque se abra m¨¢s porque el problema est¨¢ en la ca¨ªda de la demanda. La gente no puede comprar m¨¢s porque no tiene dinero, no porque no tenga horas para hacerlo¡±, opina Ignacio Cruz Roche, catedr¨¢tico de Comercializaci¨®n en la Universidad Aut¨®noma de Madrid. Este economista, director general de Pol¨ªtica Comercial en el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio hasta 2008, cree que los grandes operadores son quienes m¨¢s han presionado para poder abrir los domingos. ¡°Y ahora se ha convertido en una especie de huida hacia adelante, porque no les sale rentable¡±, se?ala. Y eso a pesar de que, recuerda Cruz Roche, el ¨²ltimo convenio colectivo de la gran distribuci¨®n aprobado en enero elimin¨® la obligaci¨®n de pagar a los empleados por trabajar cada d¨ªa festivo.
Las cifras no dan la raz¨®n (al menos este trimestre) a los estudios que afirmaron que abrir m¨¢s horas se traducir¨ªa en mayores ventas y, sobre todo, en m¨¢s empleo. Un informe de un profesor de la UNED en el que se apoy¨® el Gobierno calculaba que la liberalizaci¨®n completa de horarios (no se lleg¨® a este extremo) podr¨ªa aumentar el PIB espa?ol un 0,78% y generar 162.272 empleos. Fernando Fern¨¢ndez, del IE Business School, asegur¨® que la ampliaci¨®n del calendario comercial permitir¨ªa mejorar las ventas al menos un 2,8% en el a?o siguiente a su entrada en vigor. Fern¨¢ndez se?ala ahora que es pronto para tener evidencias t¨¦cnicas que demuestren si abrir ha influido para bien o para mal. Pero recuerda que quiz¨¢, si no se hubiera aplicado la medida, la ca¨ªda ser¨ªa todav¨ªa mayor, porque, por ejemplo, se habr¨ªan perdido muchas de las compras que hacen los turistas. ¡°Pero al margen de eso, lo esencial es que la ley ofrece la libertad para abrir, no la obligaci¨®n. El que no quiera abrir, que no lo haga. Si las grandes superficies, pese a la crisis, eligen abrir, ser¨¢ porque les sale rentable¡±, recuerda.
Ese es uno de los razonamientos que defiende la patronal de grandes superficies, ANGED. ¡°Es importante que los empresarios tengan libertad para adaptarse a las necesidades del consumidor y tienen derecho a tratar de ser m¨¢s competitivos¡±, insiste la organizaci¨®n, que exige al Gobierno que incluso liberalice por completo las aperturas en toda Espa?a.
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