China ordena una auditor¨ªa nacional de la deuda p¨²blica

China ha decidido tomar medidas ante el nivel de deuda p¨²blica del pa¨ªs. El Gobierno ha ordenado la realizaci¨®n de forma urgente de una auditor¨ªa a escala nacional para conocer en detalle el endeudamiento de los gobiernos locales, que supone una amenaza para la segunda econom¨ªa del mundo.

As¨ª lo asegura una directiva anunciada el domingo en un comunicado de tan solo una frase, que dice: ¡°De acuerdo a la petici¨®n del Consejo de Estado, el Departamento Nacional de Auditor¨ªas (DNA) organizar¨¢ agencias de auditor¨ªa por todo el pa¨ªs para llevar a cabo una auditor¨ªa de la deuda gubernamental¡±.

El organismo no ha dado m¨¢s detalles, como el plazo en el que deber¨¢ ser llevada a cabo la investigaci¨®n, pero, seg¨²n el Diario del Pueblo ¡ª¨®rgano oficial del Partido Comunista Chino (PCCh)¡ª, la orden fue dictada el viernes pasado y el trabajo comenzar¨¢ esta semana. Pek¨ªn ha se?alado repetidas veces la necesidad urgente de protegerse contra los riesgos financieros, incluido el endeudamiento p¨²blico. El Gobierno teme la amenaza que supone para el sistema bancario estatal.

Las instrucciones indican la creciente preocupaci¨®n de los l¨ªderes chinos sobre el riesgo sist¨¦mico derivado de los crecientes niveles de endeudamiento, en particular la demanda de dinero por parte de las administraciones locales, que si bien ha ayudado a la econom¨ªa a seguir creciendo con celeridad, es insostenible seg¨²n Pek¨ªn. La nueva Administraci¨®n china, encabezada por el presidente, Xi Jinping, y el primer ministro, Li Keqiang, ha acelerado las reformas de la econom¨ªa para bascular de un modelo de desarrollo basado en la inversi¨®n y las exportaciones a otro m¨¢s ligado al consumo interno, aunque sea m¨¢s lento.

Un fuerte endeudamiento es un escenario peligroso para China. El banco alem¨¢n Deutsche Bank asegura que representa un riesgo macroecon¨®mico. Seg¨²n una auditor¨ªa realizada por DNA en 2011, la deuda p¨²blica de los gobiernos locales sumaba un total de 10,7 billones de yuanes (1,3 billones de euros) a finales de 2010. Standard Chartered, Fitch y Cr¨¦dit Suisse estiman que el endeudamiento de las administraciones locales supone el equivalente entre el 15% y el 36% del PIB (producto interior bruto); es decir, hasta 2,3 billones de euros, seg¨²n el PIB de 2012.

Zhu Guangyao, viceministro de Finanzas, ha afirmado este mes que el Gobierno desconoce el valor total de la deuda local, aunque ha asegurado que el nivel es manejable. El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha estimado, tambi¨¦n este mes, que las obligaciones conjuntas de los Gobiernos central y locales representan el 45% del PIB. ¡°Un mayor y m¨¢s r¨¢pido crecimiento de las deudas elevar¨ªa el riesgo de desorden en el ajuste del gasto gubernamental¡±, afirma el FMI. ¡°Esto minar¨ªa el crecimiento, con efectos secundarios adversos¡±.

Las leyes presupuestarias chinas proh¨ªben a las administraciones locales que asuman deuda directamente, pero sus dirigentes han pedido prestado en gran cantidad a trav¨¦s de diferentes v¨ªas ¨Cpor ejemplo a empresas, a alto coste-, y con frecuencia han utilizado el dinero en proyectos inmobiliarios especulativos.

Las autoridades locales se enfrentan a una presi¨®n financiera creciente para construir las escuelas, las infraestructuras sanitarias y llevar a cabo otros programas sociales prometidos por Pek¨ªn a la poblaci¨®n, pero la mayor¨ªa tiene prohibido recolectar sus propios impuestos y dispone de fuentes limitadas para financiarlos. A menudo, acuden a la expropiaci¨®n y venta de suelo ¨Cfuente corriente de corrupci¨®n-, lo que genera protestas sociales y un gran descontento con el partido.

La petici¨®n de pr¨¦stamos se aceler¨® a ra¨ªz de la crisis de 2008, cuando el Gobierno central aprob¨® un plan de est¨ªmulo por valor de cuatro billones de yuanes (491.000 millones de euros al cambio actual) para construir l¨ªneas de metro y otras obras p¨²blicas, que desencaden¨® la petici¨®n de cr¨¦ditos a los bancos estatales y un fuerte endeudamiento en las administraciones locales.