Robots para la econom¨ªa europea
La Comisi¨®n Europea apuesta por los aut¨®matas para reindustrializar el continente
En 1921 el dramaturgo Karel Chapek estren¨® en Praga su obra R. U. R., que introdujo por primera vez la palabra robot (de un t¨¦rmino checo relacionado con el trabajo servil) como sin¨®nimo de aut¨®mata. El tiempo se ha ocupado de convertir en realidad la ciencia-ficci¨®n y, nueve d¨¦cadas m¨¢s tarde, la rob¨®tica es un mercado que, seg¨²n la Federaci¨®n Internacional de Rob¨®tica (IFR, en sus siglas en ingl¨¦s), mueve 19.000 millones de euros al a?o. La Uni¨®n Europea estima que, en 2020, el sector valdr¨¢ 60.000 millones de euros; la propia IFR cree que durante los pr¨®ximos tres a?os el mercado crecer¨¢ a un ritmo del 6% anual.
Pese a la potente posici¨®n que tiene Europa en el sector (un 35% de cuota de mercado, seg¨²n la UE), la Comisi¨®n no quiere que el continente pierda comba ante la competencia, sobre todo asi¨¢tica. Es por ello que Bruselas ha decidido encabezar una iniciativa que aportar¨¢ 2.800 millones de euros al sector. El 75% del dinero destinado a esa iniciativa, denominada SPARC, ser¨¢ aportado por el capital privado, mientras que el resto saldr¨¢ de los presupuestos comunitarios.
Para la vicepresidenta de la Comisi¨®n y responsable de la agenda digital europea, Nellie Kroes, es una inversi¨®n imprescindible. ¡°Otros pa¨ªses, como Estados Unidos y Corea del Sur, se est¨¢n tomando este sector en serio¡±, afirm¨® en la presentaci¨®n del programa, en un congreso en M¨²nich este mes de junio. ¡°Nuestro liderazgo vale millones de euros¡±.
Para Bruselas, mantener la preponderancia en el mercado de la rob¨®tica no solo es positivo desde un punto de vista econ¨®mico, sino tambi¨¦n pol¨ªtico. ¡°No podemos salir de la crisis solamente con sacrificios¡±, declar¨® en 2012 el comisario europeo de Industria, Antonio Tajani. ¡°Es necesario el crecimiento econ¨®mico, y eso pasa por proponer alternativas competitivas¡±. Los 240.000 empleos que promete el programa para 2020 ser¨ªan un resultado tangible de las pol¨ªticas comunitarias, cada vez m¨¢s cuestionadas por la ciudadan¨ªa europea.
Una industria en la vanguardia tecnol¨®gica es uno de los objetivos definidos por la Comisi¨®n en la estrategia Horizonte 2020, que prev¨¦ invertir 77.000 millones de euros antes del final de la d¨¦cada para mantener el liderazgo del continente en pol¨ªticas sociales, desarrollo industrial e innovaci¨®n.
El programa prev¨¦ la creaci¨®n de 240.000 puestos de trabajo en siete a?os
Para euRobotics, la patronal del sector y colaboradora del proyecto SPARC, la industria europea est¨¢ preparada para el reto. ¡°La rob¨®tica ha salido de los laboratorios y ha pasado al mundo real¡±, se?ala Uwe Haass, director de la organizaci¨®n, en una conversaci¨®n telef¨®nica.
El mercado de la rob¨®tica est¨¢, en l¨ªneas generales, dividido en dos: los robots industriales ¡ªdestinados a tareas repetitivas y, en muchos casos, pesadas, como en la industria del autom¨®vil¡ª y los robots de servicio, que sirven como auxiliares en actividades humanas, incluidas las dom¨¦sticas.
Para Haass, esta divisi¨®n empieza a estar superada por la propia evoluci¨®n de la tecnolog¨ªa. ¡°Hasta ahora, los robots eran fuertes y est¨²pidos¡±, comenta. ¡°Ahora son m¨¢s inteligentes, m¨¢s flexibles y cooperan con los usuarios. Esto los hace cada vez m¨¢s ¨²tiles en cada vez m¨¢s empresas, especialmente las peque?as y artesanales¡±.
Esto hace que, en el sector industrial, se haya abierto un abanico de nuevas posibilidades para la rob¨®tica, como en el sector de las energ¨ªas renovables, el aeron¨¢utico y el log¨ªstico, especialmente los ferrocarriles.
Juan Luis Elorriaga, presidente de la Asociaci¨®n Espa?ola de Rob¨®tica (AER-ATP), cree que el sector de la rob¨®tica industrial debe concentrarse en impulsar la automatizaci¨®n de una mayor variedad de procesos productivos. ¡°Lo importante no es fabricar o no fabricar robots. Lo importante es integrarlos en la industria¡±.
Para el presidente de la patronal espa?ola, la implantaci¨®n de la rob¨®tica industrial ha sido clave para mantener a flote a determinados sectores industriales. ¡°Ahora mismo tenemos f¨¢bricas muy competitivas¡±, comenta. ¡°En el coste de un autom¨®vil fabricado en Espa?a, la mano de obra representa un 8% del total¡±.
Seg¨²n IFR, en todo el mundo hay 1,5 millones de robots industriales, lo que representa un mercado de 26.000 millones de d¨®lares (19.300 millones de euros). En 2013 se vendieron 179.000 robots industriales, un 12% m¨¢s que el a?o anterior.
Aun as¨ª, el propio Haass reconoce que es el mercado de aut¨®matas de servicio el que tiene un mayor potencial de crecimiento en los pr¨®ximos a?os. ¡°Europa tiene un 63% de cuota de mercado en esta clase de robots¡±, comenta. ¡°Estados Unidos y Asia tienen programas para incentivar esta industria. Tenemos que hacer algo en Europa¡±. Elorriaga est¨¢ de acuerdo con el llamamiento. ¡°Vivimos una cuarta revoluci¨®n industrial en la que la rob¨®tica va a tener mucho protagonismo. Europa se debe poner las pilas¡±, afirma.
Grandes empresas espa?olas, como Indra, ya est¨¢n presentes en la rob¨®tica de servicio y han indicado su compromiso con el programa SPARC. ¡°Supone un esfuerzo que, estamos convencidos, veremos recompensado¡±, afirman desde la compa?¨ªa, que, entre otros productos, fabrica robots sanitarios, de seguridad y de uso agr¨ªcola. ¡°Tenemos claro que es necesario invertir y aunar esfuerzos con los investigadores y empresas europeas m¨¢s relevantes del sector¡±.
Los expertos coinciden en que la rob¨®tica empieza a entrar en los hogares y es ah¨ª donde est¨¢ el potencial negocio
Hay dos clases de robots de servicio. Por un lado, los aut¨®matas auxiliares destinados al uso profesional, como el agr¨ªcola, sanitario u hostelero; por el otro, los robots de uso puramente dom¨¦stico, cuyo ejemplo m¨¢s extendido son las cada vez m¨¢s populares aspiradoras robotizadas.
Macco Robotics es una empresa sevillana que comercializa robots orientados a la hosteler¨ªa. Su producto estrella es un aut¨®mata camarero, del que esperan vender 100 unidades para 2015.
¡°Nosotros est¨¢bamos en la rob¨®tica industrial¡±, cuenta V¨ªctor Mart¨ªn, su consejero delegado. ¡°Pero vimos c¨®mo estaba el mercado y decidimos darle una vuelta al negocio¡±. La compa?¨ªa, que seg¨²n Mart¨ªn factura en torno a cinco millones de euros, est¨¢ presente fuera de las fronteras espa?olas, en pa¨ªses como Estonia o Emiratos ?rabes. Para Mart¨ªn, m¨¢s que la construcci¨®n de aut¨®matas, el verdadero frente del avance tecnol¨®gico es la creaci¨®n de programas adaptados a los servicios a prestar.
El crecimiento de la rob¨®tica de servicio no est¨¢ libre de trabas. Una de ellas es que los robots de servicio est¨¢n muy presentes en el imaginario colectivo. ¡°Y, claro, la gente tiene demasiadas expectativas¡±, explica Celestino ?lvarez, de Adele Robots, una empresa especializada en robots que interact¨²an con las personas. ¡°Las universidades cuelgan en [el portal de v¨ªdeos] YouTube una pel¨ªcula mostr¨¢ndote un aut¨®mata haciendo algo asombroso y los clientes te preguntan por qu¨¦ no puedes hacer algo parecido. Hay que explicarles que en la universidad, en la mayor¨ªa de los casos, el robot deja de funcionar al apagar la c¨¢mara y que no se puede comercializar un producto que no funciona siempre¡±.
¡°Hace falta comunicar lo que pasa¡±, reflexiona Uwe Haass. ¡°Se sabe muy poco de c¨®mo est¨¢ avanzando la tecnolog¨ªa, en industrias como la del calzado, que utilizan materiales muy espec¨ªficos, muy delicados y costosos. La gente no tiene idea de cu¨¢nto han cambiado las cosas, y desde aqu¨ª nos esforzamos en explicarlo¡±.?
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