El Gobierno rechaza un arbitraje en las cuotas participativas de la CAM
El Ejecutivo argumenta que ya no tiene vinculaci¨®n alguna con la entidad
Hace casi seis a?os y medio desde que comenzaron a cotizar las cuotas participativas de la quebrada Caja de Ahorros del Mediterr¨¢neo (CAM) a 5,75 euros. Unos 50.000 inversores compraron este producto, que era similar a unas acciones, pero emitidas por una caja de ahorros. Tras la quiebra de la entidad, las cuotas pasaron a valer cero y perdieron todo lo invertido, en total 292 millones.
Desde entonces, los afectados han intentado que el Gobierno, la Generalitat o el Banco de Espa?a establezca un sistema para indemnizarles o les conceda una salida arbitrada, como ha ocurrido con las cuotas participativas de otras cajas quebradas. Hace unos d¨ªas, el Gobierno respondi¨® a una pregunta del PSOE negando cualquier posibilidad de arbitraje porque dice que no tiene ninguna participaci¨®n en la CAM, que fue vendida al Banco Sabadell por un euro, tras inyectarle 5.249 millones en ayudas.
Hasta ahora todas las instituciones se han negado a cualquier tipo de resarcimiento a los due?os de las cuotas. Solo el Banco Sabadell ha realizado ofertas comerciales con dep¨®sitos para una parte de los clientes. Antonio Hurtado, diputado socialista, pregunt¨® al Gobierno si ten¨ªa previsto tomar medidas para que los titulares de cuotas participativas recuperen todo o parte de su inversi¨®n, as¨ª como si el Ejecutivo ten¨ªa pensado aclarar si ha habido fraude en la venta de estos productos. Por ¨²ltimo, cuestion¨® si era posible establecer un arbitraje para resarcir a los inversores.
La quiebra de la caja dej¨® sin valor la inversi¨®n de 50.000 ahorradores
Hace unos d¨ªas, el Gobierno respondi¨® colocando otro clavo en el ata¨²d de esta reivindicaci¨®n. Dijo que la supervisi¨®n de la comercializaci¨®n de las cuotas, cuyo coordinador fue Lehman Brothers, entonces dirigido por Luis de Guindos, el actual ministro de Econom¨ªa, fue ¡°la CNMV, a quien no le consta, como resultado de los trabajos de supervisi¨®n, que se produjera ning¨²n tipo de infracci¨®n o fraude, aunque s¨ª detectaron ciertas incidencias menores que no fueron merecedoras de actuaciones disciplinarias¡±.
Sobre el arbitraje, dijo que ¡°no es posible imponer por parte de las Administraciones p¨²blicas un mecanismo de resoluci¨®n de conflictos como el arbitraje. A diferencia de Novagalicia, Catalunya Banc y Bankia, el Gobierno a trav¨¦s del FROB no posee participaci¨®n en el Banco CAM, de manera que no puede imponer un arbitraje para resolver conflictos surgidos por la comercializaci¨®n de las cuotas. Ello no obsta para que, de manera voluntaria, la entidad pueda someter a arbitraje las controversias surgidas, seg¨²n la regulaci¨®n de Consumo¡±.
El Sabadell tambi¨¦n se ha negado argumentando que no compr¨® las cuotas, ya que se quedaron en la Fundaci¨®n y no en el banco. Entre la lista de afectados, adem¨¢s de los particulares, est¨¢ renombradas entidades: el fondo noruego de pensiones, La Caixa, Bankia, JPMorgan, Deutsche Bank, Soci¨¦t¨¦ G¨¦n¨¦rale, UBS y BNP Paribas. El ¨²ltimo resquicio que les queda a los afectados es la investigaci¨®n del juez de la Audiencia Nacional Javier G¨®mez Berm¨²dez contra la exc¨²pula de la CAM. El magistrado ha ampliado al Sabadell la responsabilidad civil subsidiaria por la emisi¨®n de cuotas.
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