Quien concilia, gana (mucho)

Dicen que los ni?os vienen con un pan bajo el brazo. En el caso de Sara, la hija de Nati, ejecutiva de cuentas, su llegada al mundo lleg¨® acompa?ada de algo que, para algunas madres, suena mucho mejor: el proyecto de una guarder¨ªa. Pero la idea no surgi¨® de su madre, sino de la jefa de esta, Isabel Aires, directora de Aires News, la agencia de comunicaci¨®n en la que trabaja. Isabel, con un equipo formado exclusivamente por mujeres, comprendi¨® que el reloj biol¨®gico le estaba marcando el camino a seguir: se mud¨® a una nueva oficina de dos plantas con la idea de que la de abajo estuviera reservada a la guarder¨ªa. Comenzar¨¢ a funcionar el pr¨®ximo mes de septiembre. ¡°Nati ya tiene una ni?a; Jana, otra de mis trabajadoras, tambi¨¦n est¨¢ embarazada, y yo misma podr¨ªa ser madre el a?o que viene. Lo primordial para m¨ª es el equipo, al que pongo por delante de la empresa. Jana y Nati llevan casi una d¨¦cada conmigo y quiero que sigan aqu¨ª¡±, afirma Isabel, que no duda que su idea ser¨¢ una aliada para la productividad. ¡°Al final, todas vamos a estar tranquilas sabiendo que nuestros hijos se encuentran a solo unos metros de distancia y la hora de la comida la pasaremos juntos¡±.

?Pero este ejemplo dista mucho de ser la norma general en nuestro pa¨ªs. Seg¨²n el Informe de Evoluci¨®n de la Familia Europea en 2014, del Instituto de Pol¨ªtica Familiar, en Espa?a el 88,2% de las empresas definen de forma cerrada el horario de sus trabajadores, un porcentaje que baja hasta el 44,8% de Finlandia, donde la flexibilidad es mucho mayor. Y el caso de Aires News resulta a¨²n m¨¢s sorprendente por tratarse de una pyme, el sector que m¨¢s dificultades encuentra para poner en marcha medidas de este tipo, sobre todo desde el inicio de la crisis econ¨®mica.

?La Fundaci¨®n M¨¢sfamilia, que desarrolla acciones para la protecci¨®n y mejora de la calidad de vida y bienestar de la familia, otorga los reconocimientos a la empresa familiarmente responsable y tiene marcado en negro el ¨²ltimo lustro. ¡°Desde 2009 hemos visto c¨®mo un 35% de las pymes que ten¨ªan el certificado efr lo han perdido. Muchas de ellas han cesado su actividad o han visto reducida su plantilla a la m¨ªnima expresi¨®n¡±, explica Roberto Mart¨ªnez, director de la fundaci¨®n. ¡°Muchas pymes han hecho suyo el discurso del ¡®ahora no toca¡¯ y del ¡®hay que echar m¨¢s horas¡±. Este ¨²ltimo dato lo avala el Instituto de Estudios Econ¨®micos, que recoge datos de la OCDE: la jornada laboral en nuestro pa¨ªs es de 1.690 horas anuales, claramente por encima de pa¨ªses como Dinamarca (1.522) o Alemania (1.413). Jornadas laborales extendidas con las que conciliar se convierte en misi¨®n imposible.

?La mujer y su acceso al mercado laboral

?Las dificultades para la conciliaci¨®n acaban poniendo la zancadilla a la mujer y su acceso al mercado laboral. El segundo Estudio sobre la Situaci¨®n de la Conciliaci¨®n en Espa?a, elaborado por el Instituto Internacional de Ciencias Pol¨ªticas, refleja que el 97,70% de las mujeres tiene un contrato a tiempo parcial para poder simultanear el trabajo con sus obligaciones familiares, frente al 2,30% de los hombres. Pero adem¨¢s de un fracaso en materia de igualdad, el informe tambi¨¦n pone de manifiesto que hay empresas que lo est¨¢n haciendo bien: es el caso de Repsol, a la que considera la mejor compa?¨ªa para conciliar.

?¡°En Repsol contamos desde 2007 con un Comit¨¦ de Diversidad y Conciliaci¨®n formado cuyo objetivo es impulsar la cultura del respeto a las diferencias, as¨ª como fomentar la diversidad y facilitar el equilibrio entre la vida profesional y personal de sus empleados. Ahora tenemos 1.300 teletrabajadores en todo el mundo, se ha fomentado la flexibilidad horaria y se han puesto en marcha programas de autogesti¨®n del tiempo. Tambi¨¦n contamos con un servicio asistencial de salud y un banco de tiempo¡±, explica Jaime Mart¨ªnez, director de Cultura Corporativa y Desarrollo de Personas de Repsol. La raz¨®n que les impuls¨® a poner en marcha este programa es, seg¨²n Mart¨ªnez, ¡°la b¨²squeda del bienestar del equipo humano que forma Repsol y cuyo talento es una de las fortalezas de la empresa¡±. Entre los beneficios, la creatividad, la innovaci¨®n, la mejora del clima laboral y el orgullo de pertenencia a la compa?¨ªa. ¡°Adem¨¢s, fomenta la actuaci¨®n de responsabilidad con la estrategia de negocio con impacto en la consecuci¨®n de objetivos¡±, a?ade.

?Sobre la capacidad de conseguir objetivos e hitos mientras se concilia sabe mucho Virginia Mosquera, directora creativa en la agencia de publicidad McCann Erickson en Madrid. ¡°Despu¨¦s de tener a mi hija, ped¨ª una reducci¨®n de jornada y mis jefas, que tambi¨¦n son madres, me la otorgaron. Sigo llevando cuentas importantes y haciendo el mismo trabajo que antes e incluso logr¨¦ un Sol de Oro en el ¨²ltimo Festival de San Sebasti¨¢n. Mucha gente me felicita y me cuenta que les parece imposible que sea capaz¡±. Su situaci¨®n, que describe como ¡°ideal, pero no f¨¢cil¡±, puede seguirse en su blog Mam¨ªferas al borde de un ataque de nervios. ¡°Hay d¨ªas en los que parece que no te sale nada, muchas veces tienes que trabajar despu¨¦s de acostar a la ni?a. Resulta complejo, a veces es como vivir en el alambre¡±, explica. En el mismo sentido se manifiesta Yolanda Madrid, enfermera en el Hospital Universitario de Alcorc¨®n: ¡°Yo tengo reducci¨®n de jornada, pero a veces acumulas las horas con el fin de coger algunos d¨ªas en Navidad o para ir a la fiesta del colegio de tu hijo¡±. Y, al mismo tiempo, se?ala los aspectos menos id¨ªlicos del situaci¨®n: ¡°Al final es reducci¨®n de horas, pero tambi¨¦n de tu salario¡±.

El dif¨ªcil fomento de la conciliaci¨®n

?¡°La conciliaci¨®n est¨¢ dispersa en nuestro reglamento jur¨ªdico. Hay cosas que se recogen en la Ley 39/1999 para promover la conciliaci¨®n de la vida laboral y familiar; mientras que otras aparecen en la 3/2007 sobre igualdad. Esto hace que sea m¨¢s dif¨ªcil aplicar las medidas de una forma integral¡±, reflexiona Roberto Mart¨ªnez, de Fundaci¨®n M¨¢sfamilia, que busca razones tambi¨¦n en ¡°determinados aspectos propios de la cultura popular espa?ola, como el presentismo o unas jornadas alargadas en demas¨ªa por las dos horas diarias para comer¡±.

?Otra barrera hacia la conciliaci¨®n tiene que ver con la dificultad para asociarla con un incremento directo en las cifras de negocio. ¡°Lo que no podemos hacer es decirle a la gente que por el hecho de impulsar iniciativas de este tipo va a ganar m¨¢s dinero. Muchas veces, las medidas de conciliaci¨®n van relacionadas con los intangibles: con posicionar tu marca o mejorar el ambiente laboral, al menos en el corto plazo¡±, concluye Mart¨ªnez.