Las fronteras del blanqueo
Probablemente, con las herramientas disponibles, no est¨¦ habiendo otro modo de luchar contra el blanqueo de capitales que la cooperaci¨®n bilateral y parece que es una buena opci¨®n en ausencia de acuerdos m¨¢s globales. Que en el mundo hay para¨ªsos fiscales no es novedad alguna. Lo que resulta irritante es que existan tratamientos escandalosamente distintos de la fiscalidad y de los movimientos de capitales separados por muy finas fronteras pol¨ªticas. Ah¨ª est¨¢ Andorra, Suiza o el mism¨ªsimo Vaticano en Europa. Lo que se ha destapado con la Banca Privada d¡¯Andorra (BPA) es la consecuencia de un aumento de las colaboraciones internacionales. Todo ello, partiendo de la denuncia que ha realizado Estados Unidos desde la preocupaci¨®n de que cuestiones como el terrorismo se alimentan tanto de fanatismo y maldad, como de ceros en algunas cuentas corrientes. De fondos que viajan sin que nadie se percate de ello. Son estos entramados, adem¨¢s, el principal hilo por el cual se van desmadejando las tramas delictivas en un n¨²mero importante de casos. El blanqueo parece no saber de fronteras porque se mueve muy r¨¢pido a trav¨¦s de ellas.
La preocupaci¨®n inicial desde Espa?a fue tratar de salvaguardar la independencia operativa de Banco Madrid, cuesti¨®n que se torn¨® imposible cuando algunos directivos andorranos comunes a ambas entidades resultaron implicados. Ha supuesto la liquidaci¨®n de BPA en Andorra. En cuanto a Banco Madrid, ha iniciado un concurso de acreedores. Las consecuencias econ¨®micas y financieras depender¨¢n de c¨®mo se gestione este proceso de resoluci¨®n, en el que ser¨¢ importante generar mecanismos de liquidez para desbloquear las inversiones de los clientes. Esta liquidez generar¨ªa confianza en todo este proceso tan complejo. Al margen de esto, queda la investigaci¨®n penal en curso.
El desfile de cuentas ahora conocidas en Suiza o Andorra es poco edificante
Con este caso, se abre de nuevo el debate sobre c¨®mo actuar en la lucha contra el blanqueo y sus terribles causas y consecuencias. Puede que Andorra haya optado por cooperar pero ahora debe enfrentarse a la realidad que implica su colaboraci¨®n. Que es cabezona: un sistema financiero no puede contemplar la evasi¨®n fiscal desde los territorios de origen ni el blanqueo. Dada la importancia de la banca en ese territorio, los hechos acontecidos han propiciado incluso que las agencias de rating bajen la calificaci¨®n de Andorra y parece abrirse una nueva y necesaria realidad para el Principado. En Espa?a, se ha producido la ca¨ªda de una entidad que ten¨ªa cierto prestigio en gesti¨®n de patrimonios. En Andorra, lo que baja es la reputaci¨®n financiera del pa¨ªs. Mientras puedan trasladarse f¨¢cil y opacamente fortunas dentro de la UE con la facilidad que se ha hecho hasta ahora, ser¨¢ muy complicado conseguir que el com¨²n de los ciudadanos entienda la importancia de la responsabilidad fiscal y la presi¨®n impositiva a la que puedan estar sometidos. El desfile de cuentas ahora conocidas en Suiza, Andorra y otras plazas es, como m¨ªnimo, muy poco edificante.
No es que sea algo nuevo pero la masiva evidencia que est¨¢ emergiendo ahonda en el malestar social. Todo ello teniendo en cuenta que banca privada, fraude y blanqueo son tres cosas muy distintas. La primera es una industria financiera importante en la mayor parte de las sociedades avanzadas. El fraude es un mal en distintos niveles con escasa ejemplaridad y el blanqueo el mecanismo que financia acciones criminales.
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