Cuanto m¨¢s hablas en los descansos del trabajo, m¨¢s productivo eres

Dos programadores trabajan en una compa?¨ªa estadounidense de viajes online con cientos de empleados. Los dos comen cada d¨ªa en la cafeter¨ªa de la empresa. Uno se sienta en una mesa para 12 personas y el otro en una en la que solo caben cuatro. Este ¨²ltimo es menos hablador y siempre come con los mismos compa?eros, que como ¨¦l, conversan poco. La tarea de ambos trabajadores consiste en completar c¨®digos; el que come en la mesa grande siempre los resuelve m¨¢s r¨¢pido. No es m¨¢s brillante, solo habla con m¨¢s gente y por eso es m¨¢s productivo.

Este es el resultado de un an¨¢lisis de la startup?(empresa emergente de base tecnol¨®gica)?Humanyze, desarrollada en 2011 por tres doctores del Massachusetts Institute of Technology (MIT) y uno de Aalto University en Finlandia. La empresa se dedica a medir las interacciones entre los empleados de las compa?¨ªas para detectar cada uno de los movimientos de los m¨¢s eficientes: cu¨¢ntas veces se levantan de su sitio, qu¨¦ tono utilizan al hablar por tel¨¦fono con los clientes o en qu¨¦ momentos del d¨ªa hablan con otros colegas de la oficina sobre cuestiones personales o laborales. Todo queda registrado por un sensor que cuelga del cuello de los trabajadores en forma de tarjeta. Con esa informaci¨®n, las empresas pueden realizar peque?as modificaciones e incrementar al menos en un 25% su productividad.

¡°En un primer momento puede asustar, pero nuestra intenci¨®n no es invadir la intimidad de los empleados y pasar todos esos datos a sus jefes, sino detectar los patrones de comportamiento de los m¨¢s productivos para ayudar a la empresa a redefinir su estrategia¡±, explica el mexicano Daniel Olguin, cofundador de Humanyze, en conversaci¨®n telef¨®nica desde Cambridge (Boston). Hasta la fecha, ya han probado el sistema en 12 empresas estadounidenses y tienen m¨¢s de 40 clientes en el mundo, la mayor¨ªa universidades que lo usan con fines de investigaci¨®n.

Olguin, ingiero el¨¦ctrico, dise?¨® los primeros prototipos del hardware de Humanyze tras finalizar un doctorado en el MIT Media Lab¡¯s Human Dynamics Laboratory, que se bas¨® en el estudio y desarrollo de herramientas para medir las interacciones entre personas. ¡°Ya exist¨ªa mucha literatura cient¨ªfica sobre la vinculaci¨®n entre las relaciones sociales y la productividad, pero se basaban en encuestas. Nosotros hemos demostrado con datos y m¨¦tricas reales que estas teor¨ªas eran ciertas¡±, asegura.

En el caso de la empresa de viajes online, cuyos propietarios prefieren no revelar el nombre, la ecuaci¨®n era simple. Tras varias semanas de mediciones se detect¨® que los inform¨¢ticos que com¨ªan con grupos grandes resolv¨ªan su trabajo en menos tiempo porque aprovechaban las conversaciones para compartir con otros compa?eros los problemas que les surg¨ªan frente al ordenador. La compa?¨ªa retir¨® de la cafeter¨ªa todas las mesas de peque?as dimensiones y las sustituy¨® por otras con capacidad para 12. ¡°Un tema que en principio parece menor como la disposici¨®n de las mesas ha ayudado a la empresa a conseguir mejores resultados¡±, destaca Olguin.

El sensor lleva incorporado un micr¨®fono, bluetooth e infrarrojos. El empleado debe dar su consentimiento para formar parte del an¨¢lisis.

El sensor lleva incorporado un micr¨®fono, bluetooth e infrarrojos, entre otros dispositivos de almacenamiento. El empleado debe dar su consentimiento para formar parte del an¨¢lisis. ¡°Construimos una imagen de cada persona, de c¨®mo se relaciona con los dem¨¢s. Podemos saber incluso su nivel de estr¨¦s por los cambios en el tono de voz¡±, a?ade Olguin. Una vez recopilada esa informaci¨®n, se realizan gr¨¢ficas y m¨¦tricas generales, que luego se le pasan a la compa?¨ªa. Solo el propio trabajador puede acceder a sus datos para compararse con la media y ver en qu¨¦ puede mejorar.

Otro de sus clientes es Bank of America, que acudi¨® a ellos para tratar de encontrar el motivo por el que algunos call centers (centralitas)?de determinados estados funcionaban mejor que otros pese a recibir los empleados la misma formaci¨®n. Un mes despu¨¦s se descubri¨® que aquellos que interactuaban con otros compa?eros completaban las llamadas en la mitad de tiempo; el 80% de las conversaciones se produc¨ªan durante los descansos para comer.

Los trabajadores se las ingeniaban para coincidir, ya que normalmente en este tipo de oficinas los empleados se turnan para que haya el m¨¢ximo n¨²mero de personas atendiendo las llamadas. El banco escogi¨® varios centros de trabajo y dividi¨® a las plantillas en dos grupos: uno en el que los descansos coincid¨ªan y otro en el que no. Tres meses despu¨¦s los trabajadores del primer grupo completaban sus llamadas un 23% m¨¢s r¨¢pido, la cohesi¨®n se hab¨ªa incrementado un 18% y los niveles de estr¨¦s hab¨ªan bajado un 19%, asegur¨® el CEO de Humanyze Ben Waber en una entrevista publicada en la revista MIT Sloan Management Review.

¡°Este tipo de empleos pueden generar frustraci¨®n. Al cabo del d¨ªa recibes decenas de llamadas de gente enfadada por cosas que no dependen de ti. Compartir esos problemas con tus compa?eros ayuda, tranquiliza. Se genera m¨¢s confianza¡±, apunta Daniel Olguin. Entre sus clientes internacionales hay una empresa espa?ola, Midentity Coaching, que asesora a otras compa?¨ªas para que los equipos rindan al m¨¢ximo. ¡°Hemos probado las tarjetas de Humanyze en dos ocasiones y los resultados han sido muy ¨²tiles¡±, cuenta Daniel Laya, director de Midentity Coaching.

En uno de los casos detectaron que durante una reuni¨®n un directivo monopolizaba la conversaci¨®n sin dejar espacio a la participaci¨®n de los asistentes. La impresi¨®n del jefe era que hab¨ªa hablado entre el 15% y el 20% de tiempo, pero los datos mostraron que lo hab¨ªa hecho el 40%. ¡°Nuestro objetivo es mostrar a los l¨ªderes empresariales que prestar atenci¨®n a su interacci¨®n con los empleados mejora los resultados a corto y largo plazo¡±, a?ade. En su opini¨®n, este sistema solo es apto para compa?¨ªas con ganas de innovar y confianza en el potencial del big data.