El patrocinio social se impone
Las empresas ya no buscan dar s¨®lo dinero, sino participar en proyectos colaborativos
La crisis ha hecho cambiar el perfil de la participaci¨®n social de los empresarios espa?oles. Si antes las empresas se conformaban con actividades simb¨®licas en las que participaban tirando de talonario de cheques, ahora insisten en proyectos con un efecto real en la sociedad en los que puedan colaborar de forma activa. Esta es una de las conclusiones del Bar¨®metro de Empresas elaborado por Deloitte por encargo de EL PA?S, que repite una serie de preguntas de una anterior edici¨®n, publicada en 2012.
Si hace tres a?os las estrategias de responsabilidad social corporativa (RSC) se centraban en el medio ambiente y la salud, hoy el 69% de encuestados que afirman tener un plan de patrocinio y mecenazgo participan en actividades de car¨¢cter social (cooperaci¨®n y atenci¨®n a la infancia y a discapacitados), y un 67% en proyectos de formaci¨®n.
Las empresas est¨¢n interesadas en patrocinar, sobre todo, ONG, universidades e instituciones cient¨ªficas. Organizaciones religiosas y centros culturales ocupan el fondo de la tabla.
El objetivo m¨¢s importante de las empresas a la hora de vincularse a una instituci¨®n es fortalecer su imagen de marca: un 85% de los directivos encuestados lo apunta como motivo. Tres de cada cuatro lo justifica por pol¨ªticas de RSC, mientras que un 65% de los empresarios tiene conexiones previas con las instituciones con las que colaboran. Menos de uno de cada cinco apunta como motivo del acuerdo la posibilidad de ser parte de instituciones de prestigio u obtener privilegios como visitas guiadas o acceso a eventos.
RAZONES DEL MECENAZGO
Los beneficios fiscales, tradicionalmente se?alados como uno de los motivos principales del mecenazgo, tienen una importancia mucho menor de la que se cree. Dos de cada tres lo consideran poco importante a la hora de tomar la decisi¨®n. Un 88% de los empresarios afirma recibir menos de un 5% de lo aportado en ventajas fiscales, y casi la misma proporci¨®n (89%) no participar¨ªa aunque hubiera m¨¢s beneficios fiscales. Eso s¨ª: los directivos defienden un mejor r¨¦gimen fiscal para atraer nuevos mecenas.
La forma preferida de participaci¨®n es a trav¨¦s de un convenio de colaboraci¨®n: un 52% de los empresarios da bastante o mucha importancia a firmar esta clase de acuerdos. Las donaciones puntuales de dinero est¨¢n en tercera posici¨®n (con el 41% de los encuestados), mientras que las de bienes, productos y servicios ocupan la quinta plaza (32%). El r¨¦gimen jur¨ªdico que provoca m¨¢s rechazo es el de la fundaci¨®n empresarial propia: el 59% de los directivos afirma que no la crear¨ªa nunca.
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