A la playa con la familia (y el inspector de Hacienda)

A las 11.00 de la ma?ana de un d¨ªa de mediados de julio, una se?ora de mediana edad, de aspecto agradable, pero visiblemente acalorada, se acerc¨® al porche de una casita en la localidad playera de Alcossebre, al norte de Castell¨®n. Carpeta en mano, se fij¨® en el n¨²mero de la vivienda y se dirigi¨® despu¨¦s a Arancha Piney, madrile?a de 38 a?os, que en ese momento estaba dando de comer a su hija menor. ¡°Me pregunt¨® por los due?os, si viv¨ªamos all¨ª de alquiler y si ten¨ªamos contrato¡±, cuenta Piney. ¡°Al principio cre¨ª que se trataba de una encuesta, pero enseguida vi que los papeles de su carpeta llevaban el sello de la Agencia Tributaria¡±.

Si en 2014 los funcionarios de Hacienda visitaron 7.410 viviendas con indicios de estar arrendados sin declarar, este a?o se han reforzado esas inspecciones, seg¨²n declar¨® el pasado marzo el ministerio del ramo en una nota. Adem¨¢s, en la Comunidad Valenciana, las visitas son dobles, pues la Agencia de Turismo, dependiente de la Presidencia de la Generalitat, hace sus propias inspecciones. En este caso, es un agente de turismo el que se desplaza junto a la polic¨ªa local. ¡°Sancionaremos las irregularidades [las multas pueden llegar a los 90.000 euros] e informaremos a la Agencia Tributaria del Estado¡±, explic¨® el presidente de la Agencia de Turismo, Francesc Colomer.

Durante la campa?a, de mediados de julio a mediados de septiembre, rastrear¨¢n alquileres en 15 municipios con una larga tradici¨®n de sol y playa y segundas residencias: Benidorm, Denia, Torrevieja, El Campello y Calpe (en Alicante); Vinar¨°s / Benicarl¨®, Pe?¨ªscola, Alcossebre, Oropesa y Benic¨¢ssim (Castell¨®n); y Oliva, Miramar, Bellreguard, Tavernes de la Valldigna y Gandia (Valencia).

En el caso de Arancha Piney, que pasaba unos d¨ªas de vacaciones en Alcossebre junto a su marido, sus hijos y su suegra, la visita fue de una trabajadora de la Agencia Tributaria. ¡°Me pidi¨® el contrato de alquiler de la casa y lo revis¨®, pero nada m¨¢s, no hizo copia ni nada. Luego me estuvo preguntando una media hora todo tipo de cosas, sobre lo que hab¨ªamos pagado, si nos hab¨ªan cobrado alg¨²n extra por agua o luz, si hab¨ªa trastero, limpieza...¡±, a?ade Piney.

Rastreo por Internet

Aquella casa de Alcossebre, una de las 2.300 que inspeccionar¨¢ este a?o Hacienda solo en la Comunidad Valenciana, no era un destino al azar. Los funcionarios revisan la informaci¨®n de alquileres que se ofrece en la web para elegir sus objetivos, un trabajo previo muy parecido al que hace la Agencia Valenciana de Turismo. Despu¨¦s, contrastan con la informaci¨®n tributaria de los due?os y con la que consiguen in situ. Desde que comenzaron las inspecciones, en 2012, hasta el a?o pasado, un 35% de pisos visitados estaban en situaci¨®n irregular, seg¨²n inform¨® en el Congreso el pasado febrero el director de la Agencia Tributaria, Santiago Men¨¦ndez.

El trabajo de los inspectores no es f¨¢cil, pues algunos inquilinos ofrecen nombres y DNI falsos y otros, aunque reconocen en un primer momento ser inquilinos, env¨ªan d¨ªas despu¨¦s un escrito a la Agencia Tributaria diciendo que en realidad son familiares o amigos del due?o, seguramente aconsejados por el propietario de la casa, seg¨²n fuentes de Hacienda.

Estas dificultades cuadran perfectamente con la actitud ambigua con la que la inspectora del fisco se acerc¨® a Arancha Piney en Alcossebre. ¡°Se qued¨® de pie, sin decir quien era, apuntando apoyada en la pared, hasta que le ped¨ª que se sentara. Al final, me entreg¨® una copia de todo lo que hab¨ªa apuntado, se identific¨® y me indic¨® donde pod¨ªa comprobar su identidad y resolver cualquier duda que tuviera¡±.

En este caso no lo fue, pero pueden llegar a producirse situaciones violentas. No en vano, los trabajadores valencianos de turismo van siempre acompa?ados en sus inspecciones por la polic¨ªa local. Los funcionarios de Hacienda, sin embargo, van solos, pero han tenido que pedir ayuda a los agentes en momentos de tensi¨®n grave, cuando alg¨²n propietario o algunos vecinos les han increpado mientras hac¨ªan su trabajo.

La batalla del sector

No se trata solo de recaudar los impuestos distra¨ªdos, explican fuentes de Hacienda, sino de evitar la competencia desleal a los alojamientos regulados que s¨ª pagan y de que todos los que no lo est¨¦n haciendo empiecen a declarar al ver que cualquier d¨ªa les puede tocar la inspecci¨®n. En la Comunidad Valenciana, se han inscrito en el Registro General de Empresas 680 nuevos apartamentos (m¨¢s de 3.600 nuevas plazas) desde que comenz¨® la campa?a de Turismo el pasado 15 de julio. En total, hay registrados en toda la comunidad 41.000 apartamentos que ofrecen 200.000 plazas.

La oferta de apartamentos tur¨ªsticos ofrecidos por d¨ªas o semanas no ha hecho m¨¢s que crecer en los ¨²ltimos a?os de la mano de p¨¢ginas de Internet como Airbnb o HomeAway, de tal manera que en 2014 m¨¢s de medio mill¨®n de turistas extranjeros utilizaron esta opci¨®n. Unas cifras que han hecho al sector hotelero ponerse en guardia: aseguran que los apartamentos vacacionales son un nido de fraude ¡ª¡°Una parte relevante de esta oferta pertenece a la econom¨ªa sumergida¡±, dicen¡ª y reclaman una regulaci¨®n m¨¢s dura.

Cada autonom¨ªa tiene norma una distinta y tambi¨¦n la tienen muchos Ayuntamientos. Unas permiten el alquiler, pero obligan a estar registrados (como en Valencia, Arag¨®n o Catalu?a), mientras otras solo lo permiten si no el piso no est¨¢ en primera l¨ªnea de playa (Canarias) o si son casas individuales y no pisos en edificios de vecinos (Baleares).