Una de cada 10 empresas de Wall Street es ¡®pecadora¡¯, seg¨²n S&P

Pecado y virtud conviven en Wall Street. Hay empresas rentables y ruinosas, reci¨¦n nacidas o consolidadas, las que pagan bien, las que pagan mal y las que hacen ambas cosas al mismo tiempo¡­ Y la mayor parte de ello se puede conocer por la memoria de las empresas que cotizan en Bolsa. Pero ahora, gracias a S&P Dow Jones Indices, supuestamente tambi¨¦n se puede identificar a las que son buenas cat¨®licas y las que no en base a una serie de criterios muy particulares. La compa?¨ªa acaba de lanzar el primer ¨ªndice S&P 500 de Valores Cat¨®licos, que ha elaborado a partir del ¨ªndice general ya existente (el S&P 500), excluyendo a una cincuentena que no cumplen con esos par¨¢metros.

El filtro no consiste exactamente en identificar los siete pecados capitales, uno de los cuales es la codicia y podr¨ªa generar m¨¢s expulsiones en el selectivo de la Bolsa m¨¢s famosa del mundo. S&P Dow Jones ha seleccionado a las compa?¨ªas en funci¨®n de si sus pr¨¢cticas se adhieren a las directrices establecidas por la Conferencia Episcopal de EE UU. En base a ello, ha dejado fuera a los grupos que usan mano de obra infantil o que se lucran con armas qu¨ªmicas, biol¨®gicas o nucleares. Pero tambi¨¦n han sido expulsadas de la lista cat¨®lica a las que ganan dinero con medios anticonceptivos o con la investigaci¨®n con las c¨¦lulas madre.

El pecado de la lujuria tiene un tratamiento muy espec¨ªfico en esta suerte de librillo de la empresa cat¨®lica: se puede distribuir pornograf¨ªa, pero no producirla, y siempre y cuando solo hasta un 1% del negocio de la empresa dependa de ello. En cambio, hay poco problemas con las armas: el negocio con material militar s¨ª se acepta si no significa m¨¢s de la mitad de los ingresos.

Berkshire Hathaway, el grupo de inversiones de Warren Buffet, est¨¦ en el grupo imp¨ªo. Boeing, General Electric, Google, Monsanto y firmas farmac¨¦uticas como Pfizer, Johnson&Johnson o Merck tampoco tienen hoy por hoy abierto el paso en el ¨ªndice de compa?¨ªas de valores cat¨®licos. S¨ª entran Goldman Sachs, JP Morgan, Ralph Lauren o Procter&Gamble, entre otras.

Frente a los 502 valores que forman parte del S&P 500 general, el ?ndice Cat¨®lico queda reducido a 448 miembros, as¨ª que son 54 los rechazados por sus pr¨¢cticas de dudoso catolicismo.

Mattel, Disney o Wal-Mart han sido excluidas en base al criterio del empleo de mano de obra infantil, seg¨²n fuentes de S&P Dow Jones Indices, dependiente de McGraw Hill Financial. Preguntadas por ello, un portavoz de Disney recalca la "tolerancia cero" del grupo con el trabajo infantil en su extensa cadena de producci¨®n y cree que la decisi¨®n de esta firma de excluirlo se basa en una investigaci¨®n ¡°anticuada y no corroborada¡± en una factor¨ªa en China. Esto dio a lugar a una investigaci¨®n cuyos resultados se comunicaron a EIRIS, una firma de auditor¨ªa de gobernanza que, seg¨²n Disney, no ha actualizado sus datos. Wal-Mart no respondi¨® y Mattel defendi¨® que la compa?¨ªa ¡°est¨¢ comprometida¡± en asegurar que ¡°cada persona que fabrique nuestro productos sea tratada de forma justa, con respeto y en un entorno sano y seguro¡±. ¡°Nuestras normas y programas de salud y seguridad reflejan este compromiso¡±, insisten fuentes de la firma, la cual, aseguran ¡°cumple con todas las leyes de cada pa¨ªs¡±.

Fondos cat¨®licos

Este tipo de ¨ªndices sirve como herramienta de an¨¢lisis para la comunidad inversora ¡ªa veces se les agrupa por sectores o por otras caracter¨ªsticas¡ª y tambi¨¦n como gu¨ªa de inversiones. El Oblate International Pastoral Investment Trust, con 200 instituciones cat¨®licas participantes en todo el mundo, es p¨²blico objetivo para esta iniciativa. El Padre S¨¦amus Finn, jefe de inversiones, destaca que rentabilidad y ¨¦tica no son contradictorios, como muestra la buena salud de muchos fondos vinculados al catolicismo. En cuanto a la industria militar, Finn destaca que la inversi¨®n en ella es muy limitada y que se reconoce el ¡°derecho de los pa¨ªses a defenderse¡±, por eso la prohibici¨®n de las armas ¡°no es absoluta¡±.

No es que S&P se case con una religi¨®n en exclusiva. Ya en 2006 la compa?¨ªa lanz¨® un ¨ªndice vinculado a la shar¨ªa (S&P 500 Shariah Index) con empresas que cumplieran las leyes del Cor¨¢n.

Dinero y religi¨®n entran en contradicci¨®n muchas veces. El Papa Francisco, por ejemplo, alert¨® recientemente contra el calentamiento global e hizo cr¨ªticas al uso excesivo de energ¨ªas f¨®siles, cuando resulta que grandes organizaciones cat¨®licas estadounidenses tienen fuertes inversiones en compa?¨ªas energ¨¦ticas. Seg¨²n Reuters, la Archidi¨®cesis de Chicago ha dicho que reexaminar¨¢ m¨¢s de 100 millones de d¨®lares invertidos en el sector de la energ¨ªa f¨®sil.