El discreto encanto del jefe

La discreci¨®n emparenta a Pablo Isla con Amancio Ortega. Como a Ortega, a Isla no le gustan las entrevistas, dosifica las apariciones en p¨²blico, guarda celosamente su intimidad y prefiere pasar inadvertido. Huye del protagonismo. ¡°Siempre me da un poco de verg¨¹enza hablar de Inditex¡±, admit¨ªa ¨¦l mismo hace unos d¨ªas.

El presidente del grupo propietario de Zara, Berskha y Massimo Dutti, entre otras cadenas, nunca va a la inauguraci¨®n de un establecimiento. Desde que lleg¨® a la compa?¨ªa como consejero delegado a mediados de 2005, Inditex ha abierto m¨¢s de 4.000 tiendas, m¨¢s de una diaria. Pero Isla prefiere acudir algo despu¨¦s, cuando puede ver de verdad c¨®mo funciona.

¡°Inteligente, sobrio, discreto, con una apariencia algo t¨ªmida que combina con una sonrisa y amabilidad permanentes. Transmite seguridad, genera confianza, escucha m¨¢s que habla¡±, le defin¨ªa la semana pasada Ram¨®n Adell, vicepresidente de la Confederaci¨®n Espa?ola de Directivos.

Isla, madrile?o de 51 a?os, de padre aragon¨¦s y madre ceut¨ª, es el tercero de cuatro hermanos. Est¨¢ casado y tiene tres hijos. De tal palo, tal astilla: su padre fue directivo de empresa y su hijo mayor estudia direcci¨®n de empresas (aunque al tiempo toca en una banda de rock). Se form¨® en los jesuitas, en Madrid, estudi¨® Derecho en la Complutense y, antes de acabar, empez¨® a preparar las oposiciones de abogado del Estado, que sac¨® con el n¨²mero 1 de su promoci¨®n. Desde entonces, su carrera ha sido imparable. Tras ejercer brevemente como abogado del Estado, pas¨® a dirigir los servicios jur¨ªdicos del Banco Popular, desde donde volvi¨® al sector p¨²blico, como director general de Patrimonio, en 1996, con solo 32 a?os. En 1998 regres¨® al Popular y en 2000 fue nombrado copresidente de Altadis en sustituci¨®n de C¨¦sar Alierta, uno de sus mentores.

Aunque la decisi¨®n final de su fichaje fue de Ortega, Isla fue seleccionado para Inditex por una firma de cazatalentos, algo poco com¨²n en la gran empresa espa?ola, donde los trampolines habituales son las relaciones de amistad o familiares, las decisiones pol¨ªticas o la promoci¨®n interna.

Tras seis a?os en Inditex, Ortega le entreg¨® la presidencia y con ella, acciones valoradas en 13,7 millones (que hoy valen 33 millones). La qu¨ªmica entre ambos funcion¨® desde el principio, pese a sus or¨ªgenes tan diversos. Hay una especie de admiraci¨®n mutua, dicen quienes les conocen. Y una excelente relaci¨®n personal, que les lleva a verse tambi¨¦n fuera del trabajo.

No va a la inauguraci¨®n de una tienda. Prefiere acudir despu¨¦s, cuando puede ver de verdad c¨®mo funciona

¡°La cultura de nuestra empresa respira Amancio Ortega por todas partes¡±, reconoc¨ªa Isla recientemente en A Coru?a. ¡°Es la forma de entender el negocio que parte de la figura de Amancio Ortega, su esp¨ªritu emprendedor, inconformismo, autocr¨ªtica y ambici¨®n, pero siempre con humildad. Intentamos gestionar la empresa como si fu¨¦ramos una pyme, pero sin olvidar que somos un gran grupo con m¨¢s de 140.000 personas¡±.

Isla apenas habla de su relaci¨®n con Ortega. En un acto p¨²blico en CUNEF s¨ª hizo referencia a su fichaje: ¡°Ya pasados unos a?os, Ortega me dijo: ¡®Te arriesgaste mucho aceptando la oferta de venir aqu¨ª¡¯ y yo le dije: ¡®Bueno, y t¨² tambi¨¦n arriesgaste lo tuyo¡±.

Isla acaba de ser elegido por una publicaci¨®n de referencia, la Harvard Business Review, como el tercer ejecutivo m¨¢s exitoso del mundo. Las cifras le avalan. Inditex es la primera empresa espa?ola por valor en Bolsa, con 97.000 millones de euros, muy por encima de gigantes como Santander, Telef¨®nica o BBVA. Desde 2005, tanto las ventas como el beneficio del grupo se han triplicado. Es la empresa l¨ªder de su sector en el mundo, por delante de la sueca H&M, la estadounidense GAP y la japonesa Fast Retailing (Uniqlo).

?Cu¨¢nto del m¨¦rito es suyo? Como en la F¨®rmula 1, es dif¨ªcil ganar carreras sin un buen coche. Isla est¨¢ al volante de una empresa con una trayectoria de ¨¦xito impresionante, pero ¨¦l la ha pilotado en su salto a Internet, en su apuesta por nuevos mercados, como China y Rusia, o en la compra de tiendas emblem¨¢ticas. El valor de la compa?¨ªa se ha multiplicado en su periodo.

El presidente de Inditex dedica casi la mitad de su tiempo a viajar para conocer emplazamientos de las ciudades y hablar con los equipos de las tiendas en todo el mundo. Dada su expansi¨®n y la localizaci¨®n de su sede en Arteixo (A Coru?a), Inditex, presente ya en 88 mercados, fue de las primeras empresas espa?olas en disponer de avi¨®n. En Espa?a, tambi¨¦n aprovecha para acercarse cuando puede a las tiendas, especialmente tras una reforma o ampliaci¨®n. Recientemente, le han visto en Madrid en el Zara y el Massimo Dutti de Serrano y en el Zara Home de Hermosilla.

Isla tambi¨¦n realiza giras peri¨®dicas para entrevistarse con accionistas e inversores. A los analistas les trata de forma exquisita, comparece cada trimestre ante ellos, pero se cuida muy mucho de dar ni un solo dato de m¨¢s. Tiene f¨®rmulas predefinidas con las que despeja las preguntas sobre dividendos, ventas por Internet o evoluci¨®n por pa¨ªses cuando considera que no tocan. Con toda amabilidad, eso s¨ª.

Madridista ac¨¦rrimo, comulga m¨¢s con el estilo de Casillas o Del Bosque que con el de Ronaldo o Mourinho

En Arteixo, Isla prefiere visitar los departamentos que despachar en su oficina. Casi todas las ¨¢reas de trabajo son zonas abiertas, por lo que no es raro verle reunido en las mesas centrales de cada secci¨®n, en un estilo que de nuevo recuerda al de Ortega, que siempre tuvo alergia al despacho. Es un jefe exigente (¡°constantemente vemos cosas que mejorar¡±, dec¨ªa hace poco), pero marcados los criterios y los objetivos, sabe delegar. Suele comentar que le gusta que cada director de ¨¢rea trabaje como si fuera el jefe de una peque?a empresa externa que presta sus servicios a Inditex.

Madridista ac¨¦rrimo, comulga m¨¢s con el estilo de Casillas o Del Bosque que con el de Ronaldo o Mourinho. Es buen conversador, tiene posiciones firmes, pero las transmite con elegancia, sin estridencias, con talante conciliador. Le gusta estar bien informado. Disfruta con la lectura y el cine y juega al tenis y al p¨¢del. Viste ropa de Massimo Dutti, donde usa el servicio de sastrer¨ªa a medida.

Para muchos, la de Inditex ha sido una transici¨®n mod¨¦lica, con el fundador y anterior presidente cediendo todos los poderes ejecutivos al nuevo presidente y depositando en ¨¦l toda la confianza. Pero hay quienes creen que el apoyo en la sombra de Ortega y su ocasional presencia en la empresa, junto a los equipos de dise?o y comerciales, sigue siendo una ayuda de valor incalculable. Por eso, los m¨¢s esc¨¦pticos creen que a Pablo Isla a¨²n le falta por superar la prueba definitiva, la de gestionar la compa?¨ªa con el mismo ¨¦xito cuando no est¨¦ a su lado el fundador y alma mater de la empresa.