Del vendedor al ¡®sales manager¡¯

El empleo, la empresa, las profesiones y todo el entramado laboral han vivido cambios radicales en las ¨²ltimas tres d¨¦cadas, ¨ªntimamente ligados a las transformaciones sociales y, sobre todo, a las crisis econ¨®micas. El mundo acad¨¦mico ha visto desaparecer las carreras de cinco a?os; ha dado la bienvenida a los grados de cuatro y al Plan Bolonia; se ha disparado la oferta de postgrados y m¨¢steres y han proliferado las universidades privadas. La Administraci¨®n ha congelado las oposiciones y han surgido nuevos perfiles profesionales. Las escuelas de negocios han ganado espacio y se reconoce t¨ªmidamente la formaci¨®n profesional, ahora dual.

Lo mismo ha ocurrido con los cambios organizativos, de procesos, de tecnolog¨ªa, de internacionalizaci¨®n, de I+D, financieros y de marketing en las empresas. La implantaci¨®n del sistema SAP en la empresa supuso, para el profesor de Relaciones Laborales de IESE Sandalio G¨®mez, una revoluci¨®n. ¡°Produjo una descentralizaci¨®n organizativa con la creaci¨®n de centros de servicios comunes para todas las empresas de un mismo grupo empresarial extendido por todo el mundo¡±.

Ha habido un cambio espectacular en cuanto a ahorro de costes, internacionalizaci¨®n y mayor control en la lucha contra la corrupci¨®n. Todo ello ¡°exigi¨® un cambio muy brusco en las mentalidades de los empleados y directivos, que vieron sucederse despidos, bajas incentivadas y recolocaciones¡±. Una ¨¦poca, a?ade Cristina Sim¨®n, profesora de Gesti¨®n de Personas en el IE Business School, en la que se pas¨® de una demanda de profesiones generalistas como las de consultor¨ªa, abogados, fiscalistas, comerciales o auditor¨ªa, a una b¨²squeda fren¨¦tica de perfiles especializados: t¨¦cnicos, de ingenier¨ªas, tecnol¨®gicos o inform¨¢ticos. Esta b¨²squeda se especializa con la llegada del Big Data y el Business Analytics.

La incorporaci¨®n plena de la mujer al trabajo y de la poblaci¨®n inmigrante son dos nuevos retos de estos a?os. Las reformas laborales han tenido un gran protagonismo: hay un antes y un despu¨¦s de 1985, a?o en el que por primera vez, y bajo el Gobierno socialista de Felipe Gonz¨¢lez se reforma el Estatuto de los Trabajadores. La estrella de esta reforma fue el contrato de fomento del empleo. ¡°Con su impulso se consigui¨® reducir el paro de un 30% a un 20% aunque es cierto que aument¨® la temporalidad al 30%¡±, valora Sandalio G¨®mez.

Los trabajadores cualificados se cotizan en los portales? laborales

A partir de entonces ha habido seis reformas del Estatuto. ¡°La reforma de 1998, la ¨²nica que se bas¨® en un acuerdo social (Acuerdo sobre la Estabilidad del Empleo), trajo m¨¢s protecci¨®n social para los j¨®venes. Impuls¨®, a trav¨¦s de los grupos profesionales, la movilidad funcional interna de las empresas y la movilidad geogr¨¢fica. Cre¨® el contrato de fomento a la contrataci¨®n indefinida, que reduc¨ªa el coste de las indemnizaciones de 45 a 33 d¨ªas y concret¨® la ampliaci¨®n de las causas objetivas de despido individual, que se hab¨ªan aprobado en la reforma de 1994, de tal manera que la empresa pod¨ªa despedir a un trabajador por causas organizativas o de producci¨®n, con una indemnizaci¨®n de 20 d¨ªas. La reforma de 2012 impulsa el contrato de emprendedores¡±, analiza el profesor de IESE. Regulaciones que no han evitado un aumento del paro juvenil, lo que para muchos expertos ser¨ªa evitable con la formaci¨®n profesional dual. ¡°En Alemania esta nueva modalidad, que alterna las horas de formaci¨®n entre el centro de estudios y la empresa, se traduce en un paro juvenil del 8%¡±, asevera G¨®mez.

M¨¢s flexibilidad

Tambi¨¦n han sido 30 a?os de transformaci¨®n entre los trabajadores que demandan mayor flexibilidad. ¡°La transformaci¨®n y evoluci¨®n del mercado laboral ha tra¨ªdo nuevas profesiones, nuevos oficios que requieren formas diferentes de gesti¨®n a como se hac¨ªa hace 30 a?os¡±, apunta el presidente de Adecco, Enrique S¨¢nchez. ¡°El mercado de hoy pide m¨¢s flexibilidad, movilidad y polivalencia, es m¨¢s colaborativo, basado en proyectos, requiere nuevas habilidades y competencias, una capacitaci¨®n diferente. Conlleva una nueva forma de gesti¨®n de la diversidad, de las personas y del talento como factor de competitividad¡±.

Aquello de trabajar en la misma empresa toda la vida se rompi¨® en los noventa. ¡°En esos a?os el v¨ªnculo entre empleado y empleador era muy claro y superpotente: estabilidad a cambio de lealtad¡±, opina Cristina Sim¨®n. ¡°Con el triunfo de la llamada nueva econom¨ªa, las empresas ya no son capaces de asegurar estabilidad y adem¨¢s es el principio de la volatilidad desde el que las compa?¨ªas se asoman en busca de talento externo¡±. Con el cambio de siglo, coincide Amber Wigmore, directora de Carreras Profesionales del IE, ¡°las empresas se vuelcan en su internacionalizaci¨®n y demandan talento extranjero porque necesitan profesionales con ingl¨¦s, que sepan moverse por el mundo y posean networking¡±.

Tras la crisis no han vuelto los niveles de empleo y bienestar anteriores

La irrupci¨®n de Internet dej¨® bien claro que el proceso tecnol¨®gico era imparable. Un proceso que trajo en su anverso la ca¨ªda de los trabajos manuales cualificados y no cualificados, que pasaron del 55% del empleo al 34% actual. Los empleos no manuales, sin embargo, pasan de absorber el 45% al 55% de la fuerza laboral, mientras que el sector servicios se dispara al 76% del empleo. Un sector en aumento ya que seg¨²n datos del Directorio Central de Empresas (DIRCE), en 2014 las vinculadas al mismo crecieron un 3,9% con un total de 1,8 millones, lo que supone el 51% de las empresas en Espa?a. El estudio confirma adem¨¢s un incremento del 2,2% en el n¨²mero de empresas por primera vez desde 2006.

Lucha por el talento

Retener el talento de este sector es una prioridad. La crisis, la tecnolog¨ªa y la globalizaci¨®n representan la troika perfecta para avanzar hacia un empleado cualificado que, adem¨¢s, a?ade Cristina Sim¨®n, ¡°sopesa sus opciones en los reci¨¦n aparecidos y revolucionarios portales de empleo (LinkedIn, Xing, Infojobs¡­) y que es consciente de que moverse y hacerse cotizar depende de ¨¦l¡±. ¡°El desarrollo de las TIC est¨¢ cambiando el modelo productivo nacional y modificar¨¢ el mercado de trabajo¡±, apunta Mar¨ªa ?ngeles Tejada, directora general de Public Affairs de Randstad.

El empleo se resetea. Cambian por completo las reglas de juego, cuyo espaldarazo, la aprobaci¨®n de la Ley de Emprendimiento, dibuja unas posibilidades nunca vistas. Asistimos a la irrupci¨®n masiva de las startups. ¡°Los j¨®venes que salen de la crisis carecen de la motivaci¨®n del incentivo econ¨®mico de los a?os anteriores. Buscan trabajar en compa?¨ªas con significado, montar sus propias empresas, ser sus jefes y manejar sus tiempos. Tambi¨¦n nos piden que les busquemos procesos de selecci¨®n en organismos internacionales, fundaciones y en ONG¡±, puntualiza la directora de Carreras Profesionales del IE.

Toda una revoluci¨®n en las contrataciones de las plantillas que ha evolucionado desde los baby boomer (1943-64), la Generaci¨®n X (1965-1976) y la Generaci¨®n Y (1977-94), hasta la irrupci¨®n de los millenials, que han dado la ¨²ltima vuelta de tuerca. ¡°Los chicos nacidos a partir de 1990 establecen nuevos patrones laborales donde no se acepta una autoridad per se, piden una mayor flexibilidad, libertad horaria, una responsabilidad social corporativa comprometida y real de sus empresas, a las que van a penalizar por sus infracciones no consumiendo sus productos, que no quieren hipotecas, ni bancos, y que buscan trabajar en marcas de las que sentirse orgullosos¡±, apunta Sim¨®n.

Un panorama que ha llegado para quedarse. Es lo que definen en norteam¨¦rica como el new normal, [el nuevo normal], seg¨²n el cual la crisis de 2008 ¡°es diferente, porque no se vuelve a los mismos niveles de bienestar y empleo anteriores, ya que se ha creado un ¡®nuevo normal¡¯ que nos sit¨²a ante otra econom¨ªa con dos patrones muy claros: modelos de negocio tecnol¨®gicos, startups, y profesionales que buscan flexibilidad y bienestar en sus empresas¡±, contin¨²a Cristina Sim¨®n.

Una tendencia que ratifica el informe The Spanish Startup Scene in 2014, que revela un crecimiento de la inversi¨®n en empresas tecnol¨®gicas en Espa?a de 320 millones de euros, un 30% m¨¢s que el a?o anterior, y coloca a la espa?ola Cyberclick como mejor lugar para trabajar. ¡°Apuesto por la felicidad, la flexibilidad de horarios y vacaciones, cuentas abiertas y transparentes, la confianza para exponer aquello que se considera err¨®neo o molesto, y por preguntar al equipo y hacerle part¨ªcipe de las decisiones¡±, concluye su fundador David Tom¨¢s.