Trabajar en tiempos revueltos
M¨¢s all¨¢ de la informaci¨®n coyuntural sobre la econom¨ªa espa?ola, el tema estrella de la semana ha sido la decisi¨®n del banco central de los EE.UU, la Reserva Federal (la Fed para los amigos), de subir el rango objetivo para los fondos federales (los tipos de inter¨¦s principales de intervenci¨®n en el mercado monetario) en un cuartillo de punto porcentual, para dejarlo entre el 0,25 y el 0,50%, tras siete a?os entre el 0 y el 0,25%. La decisi¨®n es importante para todo el mundo. Por ello no est¨¢ de m¨¢s comentarla brevemente en esta p¨¢gina de coyuntura nacional.
En primer lugar, es una muy buena se?al, ya que significa que la Fed da pr¨¢cticamente por finalizada la grave crisis iniciada en 2007. Finalizada, claro est¨¢, en EE?UU, donde a mediados de 2011 ya hab¨ªan recuperado el nivel de PIB real anterior a la crisis y la tasa de paro se sit¨²a actualmente en el 5%, un punto por debajo de su media hist¨®rica. En Europa nos quedan a?os hasta que podamos dar por superada la crisis.
Pero, a pesar de ser una buena se?al, esta decisi¨®n puede exacerbar los problemas que vienen registrando muchos mercados, como los de la energ¨ªa y otras materias primas y los de bonos, sobre todo los de alto rendimiento (y alto riesgo). Tambi¨¦n es un reto para los pa¨ªses emergentes endeudados en d¨®lares. Por otro lado, esta decisi¨®n intensifica la divergencia entre las pol¨ªticas monetarias de EE?UU y las de la zona euro y Jap¨®n, lo que deber¨ªa dar lugar a una mayor apreciaci¨®n del d¨®lar, que tambi¨¦n puede complicar la vida a mucha gente en todo el mundo. No ser¨ªa la primera vez que las subidas de tipos de inter¨¦s en EE?UU provocan crisis financieras en muchos pa¨ªses, con posibilidades de contagiarse a otros, as¨ª que las autoridades monetarias tendr¨¢n que estar muy vigilantes y actuar r¨¢pidamente si es necesario.
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Si surgen problemas graves en los mercados financieros, tambi¨¦n los sentiremos en Espa?a, pero afortunadamente en mucha menor medida que en otros momentos hist¨®ricos similares. Ahora el euro nos protege: nuestra deuda externa ya no est¨¢ nominada predominantemente en d¨®lares o en alguna otra moneda fuerte, sino en nuestra propia moneda; la depreciaci¨®n del euro nos vendr¨¢ bien; y el BCE nos puede asegurar unas condiciones financieras relajadas durante los pr¨®ximos a?os, permiti¨¦ndonos digerir poco a poco la enorme deuda. Por primera vez desde la crisis, el euro nos est¨¢ siendo de gran ayuda, en vez de causarnos problemas (en realidad el euro no fue el que nos caus¨® los problemas, sino el haber llevado a cabo pol¨ªticas inconsistentes con la pertenencia a la UEM).
Costes laborales
Otra estad¨ªstica conocida en la ¨²ltima semana fue la Encuesta de Costes Laborales del tercer trimestre. El coste total por hora efectiva, corregido de estacionalidad y calendario, se situ¨® en 19,7 euros, con descensos del 0,2% respecto al trimestre anterior y del 0,1% respecto al mismo periodo del a?o anterior (gr¨¢fico inferior izquierdo). En t¨¦rminos interanuales el coste salarial aument¨® un 0,1% y los costes no salariales (el 25,5% del total de costes), disminuyeron un 0,9%. A pesar de su pr¨¢ctico estancamiento, el salario por hora registr¨® una ganancia interanual en t¨¦rminos reales del 0,5%, ya que los precios de consumo cayeron en este trimestre un 0,4%. Las horas trabajadas por asalariado aumentaron, de forma que el coste salarial por trabajador creci¨® un 0,5% interanual. En todo caso, este sigue siendo inferior al establecido en los convenios colectivos (gr¨¢fico inferior derecho).
Entre los indicadores nacionales m¨¢s significativos de la semana, conocimos el IPC de noviembre. La tasa de inflaci¨®n anual subi¨® cuatro d¨¦cimas, hasta -0,3%, como consecuencia principalmente de que la tasa de los productos energ¨¦ticos pas¨® de -13,1% a -9,9%. La inflaci¨®n subyacente, mucho m¨¢s indicativa de la tendencia de los precios, tambi¨¦n aument¨® unas cent¨¦simas, hasta el 1%, reflejando la progresiva fortaleza de la demanda y el aumento de los precios de los productos terminados de importaci¨®n por la depreciaci¨®n del euro. El diferencial de la misma con la UEM se va cerrando, lo que reflejar¨ªa la mayor pulsaci¨®n de la demanda interna espa?ola respecto a la europea.
Las previsiones apuntan a que en diciembre la tasa del IPC subyacente se mantenga en el 1% y la total pase a terreno positivo, un 0,2%. Esto ¨²ltimo ser¨¢ saludado por algunos con alivio (?por fin tasas de inflaci¨®n positivas!), pero realmente no traer¨¢ ninguna ventaja a la econom¨ªa espa?ola. Al rev¨¦s, dado que ser¨¢ consecuencia de la menor ca¨ªda de los precios de la energ¨ªa importada, supondr¨¢ una menor ganancia de poder adquisitivo para los salarios y otras rentas. Con la incertidumbre de la evoluci¨®n de los precios de la energ¨ªa, las previsiones para 2016 apuntan a tasas de inflaci¨®n muy moderadas: 0,5% en media anual y 1,2% en diciembre.
?ngel Laborda es director de coyuntura de la Fundaci¨®n de las Cajas de Ahorros (FUNCAS).
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