El Santander compra el portugu¨¦s Banif por 150 millones de euros

El Banco Santander ha llegado a un acuerdo con para la compra de la mayor parte de los activos de la entidad portuguesa Banif-Banco Internacional do Funchal, seg¨²n ha anunciado el banco central portugu¨¦s y ha confirmado esta ma?ana el banco espa?ol. El Santander, ya presente en Portugal, se ha hecho as¨ª con la entidad en un proceso de resoluci¨®n con un apoyo p¨²blico de 2.255 millones de euros para contingencias futuras. Banif, participado al 60,5% por el Estado, se hab¨ªa hundido en Bolsa durante las ¨²ltimas semanas.

Del total de esos 2.255 millones que recibir¨¢ Banif para ser saneado, el Estado inyecta directamente 1.766 millones y el resto provendr¨¢ del Fondo de Resoluci¨®n, al que contribuyen los propios bancos, que tambi¨¦n es una entidad p¨²blica y, por tanto, cuenta para el d¨¦ficit del Estado.

. "S¨¦ que la resoluci¨®n de un banco es dolorosa y costosa para lo contribuyentes", ha se?alado el primer ministro portugu¨¦s, Ant¨®nio Costa, en un discurso televisado, seg¨²n recoge la agencia Bloomberg.

En la subasta para hacerse con el maltrecho banco portugu¨¦s, Santander se ha impuesto al tambi¨¦n espa?ol Banco Popular, a la gestora de fondos Apollo Global Management y a un fondo de inversi¨®n chino, entre otras ofertas.? "La operaci¨®n se ejecuta mediante la transferencia de una parte sustancial (el negocio de banca comercial) de los activos y pasivos de Banco Banif a Santander Totta. Banco Santander Totta pagar¨¢ 150 millones de euros por los activos y pasivos de Banco Banif, que se transmiten adecuadamente provisionados. Otros activos y pasivos quedan en Banco Banif, que es la entidad responsable de los posibles litigios derivados de su actividad en el pasado, para su liquidaci¨®n o venta ordenada", ha explicado Santander en un comunicado al regulador burs¨¢til espa?ol.

Es decir, que parte de los activos y pasivos del banco se transfieren a una especie de banco malo y una parte muy peque?a de activos as¨ª como de deuda subordinada quedan como parte de Banif para la liquidaci¨®n de la entidad.

Un desastre anunciado

La venta al descuento de Banif era un desastre tan anunciado como aplazado. El 1 de enero entraban en vigor las nuevas normas europeas por las cuales los accionistas y depositantes tienen que asumir las p¨¦rdidas de la entidad; pese a esa fecha l¨ªmite, el anterior Gobierno del PSD-CDS aplaz¨® este problema para dar prioridad a la venta de Novo Banco, donde su compromiso p¨²blico supera los 4.100 millones de euros y, adem¨¢s, con las elecciones generales de por medio. El resultado ha sido fatal: Novo Banco no se vendi¨® porque los presuntos compradores daban menos de 2.000 millones y el Banif llegaba a las navidades con el 60,5% del capital propiedad del Estado. Y el nuevo Gobierno socialista no quer¨ªa que cargara sobre sus espaldas un problema del anterior gobierno conservador.

Banif, un banco nacido en Madeira y donde tiene el 30% del mercado, es un pilar del Gobierno aut¨®nomo de aquel archipi¨¦lago donde el PSD ha gobernado durante d¨¦cadas. Ahora con este grave perjuicio para las arcas p¨²blicas, los partido PS, PCP y Bloco de Esquerda han pedido una comisi¨®n de investigaci¨®n en el Parlamento para buscar responsabilidades de gesti¨®n de este banco dirigido por Jorge Tome, un hombre del PSD que anteriormente dirigi¨®, catastr¨®ficamente, la Caixa Geral de Dep¨®sitos, que va a ser el siguiente dolor de cabeza del Gobierno socialista de Ant¨®nio Costa.

La venta al Santander y los perjuicios p¨²blicos le van a suponer al Gobierno seguir en la senda del d¨¦ficit excesivo. Por s¨¦ptimo a?o consecutivo cerrar¨¢ el ejercicio por encima del 4%. La previsi¨®n del anterior ejecutivo era del 2,7%, aunque luego matiz¨® que quedar¨ªa por debajo del 3%. Sin embargo, el nuevo ministro socialista de Finanzas, Mario Centeno, al llegar al Gobierno lo primero que ha hecho ha sido congelar gastos de la Administraci¨®n p¨²blica para no rebasar ese sagrado 3%. Ahora todo ello se va al traste, a no ser que el primer ministro Costa consiga en Bruselas alguna eximente.

Banif es la primera patata caliente que le ha dejado el anterior gobierno conservador al nuevo socialista; la siguiente es Novo Banco, cuya venta deber¨ªa cerrarse en enero y con la que tambi¨¦n se cuentan con grandes p¨¦rdidas. Los presumibles compradores no van a llegar a los 2.000 millones cuando se le han inyectado cerca de 4.900 millones de euros. Y tambi¨¦n tendr¨¢ que encarar el Gobierno la situaci¨®n de la Caixa Geral, el primer banco del pa¨ªs; de Montep¨ªo y del BCP. Todos ellos con ayudas p¨²blicas o con situaciones delicadas. Antes de esta venta de Banif, el Estado portugu¨¦s era el propietario del 40% de todo el sistema bancario del pa¨ªs.