Bajo el tel¨®n del petr¨®leo
Es posible que las nuevas subidas de tipos de la Reserva Federal tengan que esperar
El escenario econ¨®mico que se est¨¢ dibujando tras la crisis del viejo mundo est¨¢ desafiando paradigmas y predicciones. El p¨¦simo comienzo de a?o en los mercados y la evoluci¨®n de los precios del petr¨®leo no hab¨ªan sido anticipados, pero lo m¨¢s preocupante es que, detr¨¢s del tel¨®n de lo que acontece con el crudo y las materias primas, hay una realidad m¨¢s oscura y dif¨ªcil de interpretar.
Los analistas de Bolsa se dividen entre los que llaman a la precauci¨®n porque divisan tormenta y los que insin¨²an que ahora puede ser el mejor momento para comprar porque las ca¨ªdas han sido fruto de una sobrerreacci¨®n a factores transitorios. Indicadores de incertidumbre hasta ahora tomados como referencia ¡ªcomo el llamado ¨ªndice del miedo (VIX)¡ª no han mostrado variaciones que sugieran temor. Los llamados factores geopol¨ªticos est¨¢n ganando peso y resulta preocupante que no lo est¨¦n haciendo para mejorar las cosas. As¨ª, por ejemplo, la apertura de relaciones diplom¨¢ticas con Ir¨¢n sienta tan bien a orillas del Atl¨¢ntico como mal en Oriente Medio. La OPEP hace tiempo que dej¨® de ser un bloque y Arabia Saud¨ª esperaba que un petr¨®leo barato asestara un duro golpe al fracking en Estados Unidos. Sin embargo, la econom¨ªa estadounidense est¨¢ disfrutando del empuje de una energ¨ªa barata a pesar de que algunas empresas extractoras sufren para mantenerse. Si Ir¨¢n se suma a la producci¨®n internacional, los precios del crudo podr¨ªan hundirse a¨²n m¨¢s. Y tal vez Arabia Saud¨ª y otros productores tengan entonces que reaccionar. La incidencia a corto plazo del petr¨®leo es tambi¨¦n muy importante (y menos comentada) en China, cuya producci¨®n se estima en 4,2 millones de barriles por d¨ªa. Otro golpe para el gigante. Y la ca¨ªda de la actividad china arrastra, a su vez, a materias primas de la que ese pa¨ªs es el principal demandante mundial, como el cobre o el aluminio.
?Cu¨¢l es el trasfondo de estas tensiones? Se evidencia, para empezar, que desde hace m¨¢s de 10 a?os la burbuja de activos en muchos pa¨ªses no era solo crediticia sino que tambi¨¦n afectaba al crudo y las materias primas. Se comprueba ¡ªun temor fundado pero generalmente obviado¡ª que el avance de las econom¨ªas emergentes se hab¨ªa sobrevalorado. Muchas de ellas (Brasil en cabeza) afrontan ahora su propia crisis. Por otro lado, los movimientos de capitales son hoy considerablemente m¨¢s r¨¢pidos e intensos que hace diez a?os. En China pueden dar fe de ello, pero otros como Arabia Saud¨ª pronto se dar¨¢n cuenta de que el petrod¨®lar no es lo que era y se afanar¨¢n por mantener el capital en casa. En cuanto a Europa y Estados Unidos, no hay signos de inflaci¨®n y es posible que las nuevas subidas de tipos de la Fed tengan que esperar.
Antes del crash de finales de la d¨¦cada de 1980 hubo movimientos similares de forma anticipada en los mercados energ¨¦ticos. Despu¨¦s vino la supuesta mejora que solo fue preludio de la gran ca¨ªda. No funcionan demasiadas cosas y, diga lo que diga el VIX, hay miedo.
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