Los taxis del aeropuerto de la Ciudad de M¨¦xico, acusados de monopolio

En un momento en el que cada vez m¨¢s gente usa Uber para transportarse desde el aeropuerto de la Ciudad de M¨¦xico hacia sus hoteles o casas, la Comisi¨®n Federal de Competencia Econ¨®mica (Cofece) ha puesto el dedo en el irritante conflicto con los taxistas locales. Las empresas que operan en el aeropuerto de la capital, que hasta hace poco eran las ¨²nicas que brindaban el servicio ah¨ª, est¨¢n siendo investigadas por monopolio.?

Una de las recomendaciones que m¨¢s escucha un turista primerizo en M¨¦xico es que debe de apostar por la seguridad en el transporte: "No tomes nunca un taxi de la calle". Una afirmaci¨®n con la que han jugado bien las empresas que se dedican a recoger a los primeros que llegan a la capital. "Taxi seguro" es el mensaje que venden, a veces grabado en letras grandes en los veh¨ªculos. A cambio de esa seguridad que ellos publicitan, sus precios se multiplican. Y son casi la ¨²nica opci¨®n para quienes no conocen la ciudad.

Los coches, en su mayor¨ªa amarillos, se distinguen f¨¢cilmente de los taxis regulares, los "de la calle", m¨¢s viejos y desgastados. Pero sobre todo, la diferencia est¨¢ en los precios. El costo del trayecto de los primeros puede llegar a ser hasta tres veces mayor. Sin importar la empresa que el pasajero escoja, el m¨ªnimo de los amarillos ronda los 20 d¨®lares por un trayecto de 15 kil¨®metros, cuando lo habitual en la capital es que ese trayecto cueste unos cinco.

La Cofece ha apuntado directamente a que tiene indicios de que estas empresas que ofrecen servicios en el aeropuerto se han organizado entre ellas para sacar un beneficio. El organismo lleva investigando las pr¨¢cticas irregulares de estas firmas desde 2013, cuando abrieron el primer procedimiento judicial por monopolio. No ha habido ninguna sanci¨®n, por el momento.

En el aeropuerto de la Ciudad de M¨¦xico operan cinco empresas privadas de taxis: Confort, Nueva Imagen, Porto Taxi Ejecutivo, Sitio 300 y Yellow Cab. Los veh¨ªculos que ofrecen ese servicio que no pertenezcan a estas firmas tienen prohibido trabajar en las puertas del recinto. S¨ª pueden llevar a gente pero no recoger a nadie. Los ¨²nicos que se han podido saltar esa norma son los de la aplicaci¨®n Uber y aquellos que no disponen de una licencia de taxi, porque no hay una regla espec¨ªfica para ellos.

La Comisi¨®n ha abierto ya un proceso de juicio y la sentencia se podr¨¢ resolver de tres formas, seg¨²n se?alan desde la instituci¨®n: el organismo tiene la capacidad de cerrar los negocios, de aplicarles una sanci¨®n o de obligarles a operar bajo unos compromisos. El dominio de los amarillos se tambalea.