El alma de Ford cabalga m¨¢s lejos
El Mustang alivia al fabricante de EE UU tras superar en ventas a los deportivos alemanes
¡°El Mustang es m¨¢s que un coche, es el alma de Ford¡±, coment¨® Raj Nair, el responsable de producto global de la compa?¨ªa de Detroit, tras presentar las ¨²ltimas cifras de ventas del modelo. El ic¨®nico pony-car levanta ahora pasiones m¨¢s all¨¢ de su mercado natural en Estados Unidos, hasta el punto de que supera en Reino Unido y Alemania a deportivos de marcas tan asentadas como Jaguar o Porsche. La historia se repite en pa¨ªses clave como Francia, Espa?a, Australia, India o Sud¨¢frica.
El Mustang es una marca inmensamente poderosa en el mercado estadounidense. Es como un im¨¢n. El que no tiene uno en su garaje intenta alquilarlo al menos una vez en su vida para experimentar ese sentimiento de libertad que algunos comparan con la experiencia de pilotar una Harley-Davidson. Un modelo que el dise?ador Carroll Shelby elev¨® hasta convertirlo en un muscle-car a finales de los sesenta.
El coche lleva cinco d¨¦cadas col¨¢ndose en las portadas de las revistas de todo el mundo desde que Steve McQueen lo llev¨® a la gran pantalla en Bullitt y es protagonista en pel¨ªculas taquilleras como Need for Speed. Por eso no es una sorpresa que el mercado global est¨¦ recibiendo con entusiasmo el afamado deportivo. Esto se ve, por ejemplo, en las matriculaciones en Reino Unido. Durante la primera mitad del a?o se vendieron 2.317 unidades del Mustang con el volante a la derecha, un 60% m¨¢s que las del Jaguar F Type.
Lo que no esperaban en Ford es que fuera m¨¢s popular en Alemania que Porsche, BMW o Audi. ¡°La demanda es insaciable¡±, indica Erich Merkle, analista de ventas de Ford. El fabricante lleva vendidas m¨¢s de 20.000 unidades del Mustang en Europa, ¡ªde las que 6.000 corresponden a Alemania¡ª desde que el modelo empez¨® a cruzar el Atl¨¢ntico hace menos de un a?o para ser vendido en los concesionarios oficiales con todas las garant¨ªas de la marca.
El nuevo Mustang se present¨® en abril de 2014, en un evento en el mirador del Empire State. Ah¨ª hab¨ªa empezado a cabalgar 50 a?os antes. Donald Frey lo dise?¨® con la idea de producir un deportivo asequible para la mayor¨ªa en la clase media, inspirado en los coches europeos. Ahora, como entonces, Ford quiere atraer a un p¨²blico joven que busca nuevas sensaciones. Los coches estadounidenses de gran potencia fueron siempre criticados por poner demasiado peso en el poder de su motor y descuidar su eficiencia y maniobrabilidad. Eso cambi¨® con la sexta generaci¨®n del Mustang. Su dise?o es m¨¢s agresivo y tiene un perfil m¨¢s bajo. Aunque fue ganando tama?o con el tiempo, es tambi¨¦n t¨¦cnicamente m¨¢s sofisticado.
El reto para el equipo de Nair era formidable, porque al modernizar el deportivo para hacerlo m¨¢s europeo y llegar a un nuevo consumidor corr¨ªa el riesgo de alienar a los entusiastas m¨¢s leales. Pero la realidad es que Ford no ten¨ªa otra opci¨®n que desmarcarse del pasado y dar el salto hacia el mercado internacional para poder dar un impulso a las ventas.
El nuevo Mustang se dise?¨® precisamente para que pudiese ser comercializado en m¨¢s de 100 mercados y as¨ª expandir el poder de la marca. El precio de entrada es, tambi¨¦n, mucho m¨¢s bajo que el de los deportivos que fabrican sus rivales europeos a¨²n vendi¨¦ndose m¨¢s caro que en EEUU. Eso permiti¨® que se convirtiera en el ¨²nico coup¨¦ del mundo con m¨¢s de 100.000 unidades registradas el a?o pasado.
Una de las claves del ¨¦xito del Mustang es que la ¨²ltima versi¨®n mejora el consumo sin sacrificar su potencia. El Mustang GT que se vend¨ªa en 1995, generaba 215 caballos con un motor de cinco litros V8. El actual lo elevaba a 310 caballos con la mitad de motor. As¨ª responde a un consumidor que se preocupa por la eficiencia y al comprador de un muscle car.
Margen para crecer
Merkle indica que los datos globales muestran margen para elevar las ventas. Tambi¨¦n se?ala que los primeros clientes internacionales se est¨¢n interesando mucho por los Mustang con motores V8. Contrasta con la demanda en EE UU, donde los j¨®venes prefieren el de 2,3 litros EcoBoost. El a?o pasado se vendieron 122.350 unidades del Mustang en el mercado estadounidense, un 50% m¨¢s gracias al tir¨®n inicial que acompa?¨® a la introducci¨®n del nuevo modelo. Eso le desmarc¨® de su archienemigo, el Chevrolet Camaro, hasta el punto de doblarlo en ventas. Rompi¨® as¨ª con cinco a?os de victorias en los concesionarios. Tambi¨¦n machac¨® al Challenger de Dodge.
El Mustang volver¨¢ a imponerse en 2016. Pero las espadas est¨¢n en alto entre los dos rivales y la ventas del deportivo de Ford se han estabilizado en las 8.300 unidades mensuales. El Camaro logr¨® recortar algo las distancias al matricular 5.600 veh¨ªculos en agosto con la venta de un modelo m¨¢s ligero y eficiente. Pero estos deportivos tambi¨¦n est¨¢n atrapados en una espiral de ca¨ªda que preocupa a los inversores.
Ford atraviesa un momento extra?o en Wall Street, donde ha perdido un 20% del valor desde el m¨¢ximo anual en octubre, porque es cada vez m¨¢s evidente que las ventas de coches han tocado techo. Robert Shanks, el director financiero, admite incluso que empieza a ver algo parecido a lo que podr¨ªa ser una ¡°recesi¨®n¡± en el negocio del motor.
Las ventas del Mustang tambi¨¦n se moderaron en EE UU, aunque a un ritmo menor que otros modelos. En lo que va de a?o se matricularon 80.830 unidades del deportivo hasta final de agosto, un 7% menos respecto los ocho primeros meses de 2015. En total se vendieron 478.780 utilitarios de la marca Ford. Es el tercer modelo de coche m¨¢s popular por detr¨¢s del Fusion y del Focus.
Esta situaci¨®n, junto al endurecimiento de la regulaci¨®n, provoc¨® que Ford y Chevrolet anunciaran en agosto algo que hace una d¨¦cada hubiera sido impensable. Sus ingenieros est¨¢n colaborando ya en varios proyectos que incluyen la transmisi¨®n del Mustang y del Camaro. Aunque los componentes ser¨¢n id¨¦nticos, se integrar¨¢n de una manera diferente para preservar su car¨¢cter. Cada uno utilizar¨¢ su propio sistema de control.
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