?Cu¨¢nto vale el tabaco en Argentina? La locura de la inflaci¨®n descoloca a los kioskeros

Los argentinos llevan a?os acostumbrados a una inflaci¨®n de dos d¨ªgitos y han desarrollado m¨²ltiples estrategias para intentar reducir, en la medida de lo posible, el impacto de la subida de los precios. Una de ellas es el estoqueo, que consiste en hacer acopio de grandes cantidades de productos b¨¢sicos no perecederos. Haber llenado la despensa de latas de conserva, art¨ªculos de limpieza, papel higi¨¦nico, etc. para seis meses supone un ahorro de hasta el 20% cuando se terminan las existencias. Con esa misma l¨®gica, numerosos fumadores de todo el pa¨ªs se lanzaron a vaciar los kioskos el pasado 31 de diciembre ante el rumor de que al d¨ªa siguiente el paquete de cigarrillos subir¨ªa un 40%. El rumor se hab¨ªa extendido tambi¨¦n entre los kiosqueros y cobr¨® fuerza cuando varias empresas distribuidoras redujeron el suministro sin dar explicaciones en Buenos Aires y la provincia hom¨®nima. Ante la avalancha de compradores, un vendedor opt¨® por aplicar por anticipado el aumento, otro por racionar las cajetillas y el tercero por negarse a vender ese d¨ªa con la intenci¨®n de beneficiarse de los nuevos precios a partir del 1 de enero. Tres respuestas distintas en tres puntos de venta en un mismo barrio de la capital.

En el resto de la ciudad se vivieron situaciones similares. "No s¨¦ a qu¨¦ precio venderte", fue una de las respuestas escuchadas por los fumadores que deambulaban por las calles en busca de tabaco en la ¨²ltima tarde de 2016. "S¨®lo te puedo vender un atado", dec¨ªan algunos de los que optaron por mantener el precio vigente, que ronda los 50 pesos (3,1 d¨®lares) para una cajetilla de 20. "Dos por persona", era la consigna en puntos de venta m¨¢s generosos, como algunas gasolineras. Fuera de Buenos Aires, en especial en las localidades m¨¢s peque?as, hubo acuerdo entre la mayor¨ªa de vendedores y el precio del tabaco se dispar¨® hasta los 70 pesos (4,3 d¨®lares).

El d¨ªa 1, festivo, la subida de precios prevista no se hab¨ªa oficializado, pero eran pocos los kioskos que manten¨ªan el precio original. La mayor¨ªa opt¨® por subirse al carro de la especulaci¨®n y aumentar un 40%. As¨ª qued¨® hasta el primer d¨ªa h¨¢bil de 2017, el 2 de enero, cuando las distribuidoras mantuvieron los precios y los minoristas dieron marcha atr¨¢s. Algunos kioskeros, adem¨¢s de pedir disculpas, llegaron a devolver la diferencia a su clientela fija. Lo que en otros pa¨ªses hubiese generado indignaci¨®n, en Argentina no pas¨® de ser otra an¨¦cdota m¨¢s de la locura cotidiana de vivir con una inflaci¨®n del 41%.