Mabe se prepara para el ¡®efecto Trump¡¯

Para Mabe, las fronteras nunca han sido un problema. Fundada en 1946, en la Ciudad de M¨¦xico, por un egipcio, Eg¨®n Mabardi, y un espa?ol, Francisco Berrondo, la compa?¨ªa se ha convertido en un tit¨¢n de los electrodom¨¦sticos en toda Am¨¦rica. Pero hoy, despu¨¦s de 71 a?os de vida, los nacionalismos podr¨ªan lastrar su crecimiento. El discurso proteccionista del inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump, ha despertado al viejo fantasma de las barreras comerciales y ha acongojado a las grandes firmas mexicanas, como Mabe, que deben parte de su ¨¦xito internacional al NAFTA, el espacio de libre de aranceles inaugurado hace 23 a?os entre los tres gigantes norteamericanos: Estados Unidos, M¨¦xico y Canad¨¢.

La firma, con ventas en 70 pa¨ªses del mundo, enfrenta un panorama incierto. En caso de que el Gobierno de Trump llegase a cumplir sus promesas de campa?a ¡ªentre las que destaca imponer un gravamen a los productos importados del pa¨ªs azteca¡ª el perfil crediticio de Mabe se ver¨ªa afectado, asegura Jay Djemal, director de la calificadora Fitch, a trav¨¦s de un an¨¢lisis. El desgaste no ser¨ªa menor, pues aproximadamente un 30% de los ingresos de la sociedad depende de las exportaciones al mercado estadounidense (si se suma a Canad¨¢ la cuota es de un 46%), donde comercializa neveras, lavadoras, cocinas y microondas.

La devaluaci¨®n del peso ha hecho que la firma haya reducido en la pr¨¢ctica su facturaci¨®n

Para Laura Mart¨ªnez, analista de la calificadora Standard & Poor¡¯s, las amenazas del magnate, mientras no se hagan efectivas, no ser¨¢n un desasosiego para el balance de la compa?¨ªa. ¡°A¨²n es prematuro saber cu¨¢les ser¨¢n las implicaciones para las grandes corporaciones en M¨¦xico, principalmente para las empresas de manufactura de exportaci¨®n¡±, a?ade Luis Manuel Mart¨ªnez, tambi¨¦n analista de S&P. Sin embargo, las cuentas de Mabe (que eludi¨® dar su punto de vista a este peri¨®dico) han sentido, de manera indirecta, la furia de las palabras de Trump.

En el ¨²ltimo a?o, las monedas latinoamericanas, en particular el peso mexicano, han acrecentado su diferencia frente al billete verde, debido al discurso nacionalista del presidente estadounidense, indica Montserrat Ant¨®n, analista de la firma financiera Invex. ¡°Cada vez que Trump hace alguna declaraci¨®n [defendiendo su pol¨ªtica proteccionista], el peso sufre cierta presi¨®n, aunque sea temporal¡±, arguye. Este efecto se aderez¨® con la ca¨ªda de los precios de las materias primas, el alza en las tasas de inter¨¦s en EE UU y la contracci¨®n econ¨®mica de algunas naciones sudamericanas, que a?adieron fuerza al d¨®lar.

Resultados

En 2016, la facturaci¨®n de Mabe cay¨® un 0,4% respecto a un a?o antes, hasta llegar a los 2.736 millones de d¨®lares (unos 2.565 millones de euros), a pesar de que el volumen de electrodom¨¦sticos se dispar¨® un 5%. Sin el efecto del tipo de cambio, el dato facturado se hubiese disparado un 9% y la firma hubiera acumulado ventas por 2.985 millones de d¨®lares (cerca de 2.800 millones de euros), seg¨²n las cifras de la compa?¨ªa. ¡°Mabe est¨¢ en una situaci¨®n compleja¡±, asegura Hugo Javier Fuentes, director del departamento de econom¨ªa del Tecnol¨®gico de Monterrey. ¡°La empresa no solo enfrenta la revalorizaci¨®n del d¨®lar, tambi¨¦n ha perdido presencia en todo el mundo por la expansi¨®n de las marcas asi¨¢ticas y americanas¡±, asegura el acad¨¦mico.

De acuerdo con los datos de Euromonitor, la industria de electrodom¨¦sticos, una de las m¨¢s competidas y pulverizadas del mundo, est¨¢ en constante movimiento. Mabe contin¨²a siendo una de las 10 insignias favoritas del sector en la zona, donde la sueca Electrolux, la francesa SEB y la estadounidense Whirlpool van a la cabeza de la lista.

La firma naci¨® como una peque?a empresa de l¨¢mparas, que despu¨¦s se transform¨® en una montadora de muebles empotrados. Para los a?os cincuenta del siglo pasado, la compa?¨ªa incursionaba en la producci¨®n de cocinas de gas y neveras y apenas ten¨ªa 20 trabajadores (hoy tiene m¨¢s de 20.000). Para 1960, la sociedad era la mayor exportadora de electrodom¨¦sticos en M¨¦xico. Sin embargo, las crisis econ¨®micas desatadas durante los a?os 70 y 80 (que inclu¨ªan devaluaciones continuas, deudas gubernamentales galopantes y falta de inversi¨®n extranjera) forzaron a la compa?¨ªa a buscar un socio que pudiera curar las cuentas y a la par abrir nuevos mercados.

Mercado estadounidense

Los candidatos fueron Whirlpool, Philips y General Electric (GE). Esta ¨²ltima sociedad result¨® elegida por los empresarios establecidos en M¨¦xico y les permiti¨® llegar as¨ª al mercado estadounidense con sus productos. Para los a?os 90, m¨¢s del 66% de las cocinas y neveras que vend¨ªa GE en la primera econom¨ªa del mundo eran fabricadas por Mabe, seg¨²n una investigaci¨®n realizada por Fuentes, del Tecnol¨®gico de Monterrey. En 1993, de la mano de Ceteco, una firma holandesa, la empresa mexicana salt¨® a los mercados latinoamericanos. Venezuela fue el primer pa¨ªs en ser explorado.

A principios de este siglo, los art¨ªculos de la compa?¨ªa estaban en casi todos los rincones de Am¨¦rica desde Canad¨¢ hasta Chile, pasando por Brasil, Colombia, Ecuador, Per¨² y los pa¨ªses de Centroam¨¦rica. Incluso sus productos han llegado a Europa y Medio Oriente. A principios de 2016, GE vendi¨® su participaci¨®n de 48,8% de Mabe a la empresa china Haier, por 5.400 millones de d¨®lares. Dos a?os antes, la estadounidense puso en marcha una campa?a para comercializar las acciones de la empresa mexicana y hab¨ªa anunciado que el comprador ser¨ªa Electrolux, pero las autoridades americanas frenaron la operaci¨®n por cuestiones de competencia.

El nuevo socio, dice Fuentes, abre una nueva ventana de oportunidades. ¡°As¨ª como General Electric dio paso a que Mabe se expandiera a lo largo de Norteam¨¦rica, Haier ser¨¢ clave para que la compa?¨ªa pueda llevar sus productos a Asia¡±, asegura el experto.