La c¨²pula de la contrata de basuras de FCC en Barcelona conoc¨ªa el fraude

La pr¨¢ctica totalidad de los responsables de la contrata de limpieza viaria y recogida de basuras de FCC en Barcelona conoc¨ªan que la compa?¨ªa mezclaba residuos de distinto tipo ¡ªenvases para reciclar con basura normal, por ejemplo¡ª para maximizar sus ingresos. As¨ª lo pone de manifiesto la investigaci¨®n llevada a cabo por el Ayuntamiento de Barcelona, que revela que hasta 14 personas ¡ªentre ellas la jefa de la contrata, ingenieros, encargados de log¨ªstica...¡ª mandaron o recibieron correos electr¨®nicos en los que se organizaba la manipulaci¨®n de los sistemas de recogida.

Esta investigaci¨®n, a cuyo informe final ha tenido acceso este diario, concluye el expediente informativo abierto por el Consistorio el pasado noviembre, cuando EL PA?S destap¨® el caso. El Ayuntamiento ha abierto ahora un expediente sancionador, que podr¨ªa acabar con la rescisi¨®n del contrato. Barcelona acusa a FCC de defraudar deliberadamente entre 2013 y 2015 un total de 3,3 millones de euros. La empresa es la adjudicataria de la limpieza en tres distritos de la capital catalana ¡ªCiutat Vella, Eixample y Gr¨¤cia¡ª, por los que ingresa 106 millones anuales.

Las mayor parte de las irregularidades son admitidas por la propia empresa, que ha hecho una investigaci¨®n de tipo interno cuyas conclusiones recoge el expediente municipal. FCC, sin embargo, rechaza rotundamente la interpretaci¨®n que hace el Consistorio sobre los hechos. "Ha habido errores de gesti¨®n, es cierto, pero nunca intenci¨®n de defraudar", explica un portavoz. "Son errores que hay que entender dentro de la enorme complejidad de la gesti¨®n diaria de un servicio como el que FCC presta en Barcelona"

Toda la documentaci¨®n sobre el caso ya est¨¢ en manos de la fiscal anticorrupci¨®n Teresa Duerto. Esta ha solicitado al Cuerpo Nacional de Polic¨ªa que investigue los hechos. Est¨¢ previsto que en las pr¨®ximas semanas sean llamadas a declarar las primeras personas relacionadas con el caso.

Las irregularidades cometidas por FCC se dividen en dos tipos: la facturaci¨®n de miles de servicios no prestados y la mezcla de distintos residuos con el objetio de aumentar irregularmente sus ingresos. En el primer caso, destacaron los responsables municipales el pasado mi¨¦rcoles, FCC cobr¨® entre 2013 y 2015 al Ayuntamiento 5.195 brigadas de limpieza que en realidad nunca salieron a la calle, a las que hay que sumar otras 1.079 que lo hicieron con menos personal del facturado.

El informe municipal evidencia c¨®mo la empresa hab¨ªa logrado sortear las inspecciones ¡ªm¨¢s de 9.000 al a?o¡ª con las que el Consistorio fiscalizaba la contrata. De los 5.195 servicios cobrados y no prestados en esos tres a?os, los inspectores apenas hab¨ªan localizado y sancionado 143 (el 2,75%). Entre los servicios prestados con menor personal del facturado, esta cifra es a¨²n m¨¢s baja: una vez en 1.079 servicios (el 0,09%).

La investigaci¨®n municipal tambi¨¦n muestra c¨®mo FCC reaccion¨® a la publicaci¨®n por EL PA?S ¡ªel pasado 17 de noviembre¡ª de la primera informaci¨®n sobre el supuesto fraude. As¨ª, si en los 10 d¨ªas previos la compa?¨ªa no sacaba a la calle de media 8,7 brigadas de limpieza diarias, esta cifra se desplom¨® hasta 0,5 brigadas diarias en los 30 d¨ªas posteriores a la noticia.

Estos datos y la estimaci¨®n de 3,3 millones de fraude solo proceden de la mitad de la zona cubierta por FCC en Barcelona. Del resto, el Ayuntamiento no ha podido llevar a cabo investigaci¨®n alguna ya que no cuenta con documentos sobre los que basarla.

La investigaci¨®n interna de FCC, por su parte, realiza una comparaci¨®n entre "el personal necesario para cubrir el servicio" y el que la empresa realmente ten¨ªa contratado. La conclusi¨®n de FCC es que "durante 2013, 2014, y 2015 contaba con 11, 8 y 24 trabajadores de m¨¢s, respectivamente, de los necesarios para prestar el servicio". Esto, recoge el informe municipal, "lleva a la empresa a concluir que no hay raz¨®n para no haber prestado los servicios".

Esta explicaci¨®n no ha satisfecho al Ayuntamiento de Barcelona. Por un lado, porque considera que el hecho de que FCC dispusiera "anualmente y de forma global de m¨¢s personal del estrictamente necesario", no demuestra que "d¨ªa a d¨ªa y turno a turno fueran cubiertos todos los servicios". Por otro, porque FCC no utiliz¨® una herramienta inform¨¢tica que permite a las empresas adjudicatarias avisar de que una brigada no ha salido a la calle. La investigaci¨®n municipal censura que "FCC no declaraba anulaciones de itinerarios [de las brigadas] y, por tanto, certificaba [y cobraba] el total del servicio con independencia de que este se prestase o no".

La investigaci¨®n municipal tambi¨¦n confirma que los responsables de la contrata manipulaban la contabilidad del tonelaje de residuos recogidos en las calles. El objetivo era evitar "saltar el tramo" ¡ªno recoger m¨¢s de una cantidad determinada de toneladas¡ª para evitar as¨ª que bajara el precio por unidad pagado por el Ayuntamiento. La forma de hacerlo, mezclar distintos tipos de residuos para que las toneladas fueran contabilizadas de la forma que m¨¢s interesaba a FCC.

La investigaci¨®n municipal y la interna de la empresa coinciden en este punto en que las maniobras no tuvieron impacto econ¨®mico real, ya que aunque el desv¨ªo de residuos no hubiera existido, no se habr¨ªa "saltado de tramo" igualmente.

Para FCC, esto demuestra que no ha existido fraude en ning¨²n sentido. Para el Ayuntamiento, en cambio, esto no le resta gravedad al caso. En t¨¦rminos muy duros, el informe concluye que "han quedado demostradas 'alteraciones preventivas' del servicio con la intenci¨®n de alterar el precio del contrato", que estas pr¨¢cticas eran hechas "de forma voluntaria y con una metodolog¨ªa organizada" y tambi¨¦n "conocidas y compartidas por una gran parte de la organizaci¨®n [FCC] con responsabilidades de direcci¨®n, coordinaci¨®n y organizaci¨®n del contrato en Barcelona".

Por ¨²ltimo, el informe destaca que "la mezcla de residuos, reconocida por la empresa, afecta muy negativamente a las pol¨ªticas p¨²blicas de reciclaje, alteran el concepto que tiene la ciudadan¨ªa sobre la recogida selectiva y desincentiva la separaci¨®n de residuos, que es uno de los ejes de las pol¨ªticas p¨²blicas".

Por su parte, FCC asegura en un comunicado que "ya ha tomado por iniciativa propia medidas superiores a las establecidas en el contrato para mejorar el control en la prestaci¨®n del servicio". La empresa tambi¨¦n afirma que "prestar¨¢ toda la colaboraci¨®n con el Ayuntamiento para esclarecer los hechos".

investigacion@elpais.es