Doce a?os sin piedad
El ministro de Hacienda, Crist¨®bal Montoro, sentenci¨® en el pleno del Congreso de los Diputados: ¡°Dentro de tres a?os, en 2020, habr¨¢ acabado definitivamente la crisis econ¨®mica¡±. Si as¨ª fuera, esta crisis habr¨¢ sido la m¨¢s profunda, pero no la m¨¢s larga de la historia de la democracia espa?ola. En 1993, terminados los Juegos Ol¨ªmpicos de Barcelona y la Expo de Sevilla que ahora se conmemoran con justicia, Espa?a entr¨® en una rapid¨ªsima recesi¨®n, alcanz¨® un paro del 24,55% de la poblaci¨®n activa, y no lo redujo a niveles semieuropeos (el 7,95%, la tasa m¨¢s baja) hasta 14 a?os despu¨¦s, en el a?o 2007.
Tambi¨¦n dijo Montoro: en 2020 habr¨¢ 20,5 millones de ocupados, lo que ¡°har¨¢ sostenible las pensiones, permitir¨¢ financiar servicios p¨²blicos de mayor calidad y reducir¨¢ la deuda p¨²blica¡±. Los pajaritos cantan y las nubes se levantan. El ministro recuerda a un chiste sovi¨¦tico: una maestra de una guarder¨ªa de Mosc¨² cuenta a los ni?os lo maravillosa que es la sociedad sovi¨¦tica; un ni?o se echa a llorar y la maestra, emocionada, le pregunta por qu¨¦. El ni?o le contesta que, oy¨¦ndola, le han entrado muchas ganas de ir a la URSS¡
Mucho tajo le queda al Gobierno y a la sociedad espa?ola para llegar a ese panorama que describe Montoro. La comisaria de Empleo de la UE, la belga Marianne Thyssen, echaba la pasada semana un cubo de agua fr¨ªa sobre las expectativas espa?olas: c¨®mo es posible que un pa¨ªs que est¨¢ en la cima del crecimiento (m¨¢s del 3%) no consiga que la recuperaci¨®n llegue al conjunto de la poblaci¨®n; un pa¨ªs que tiene una tasa de paro (18,7%) ¡ªque se dobla para los j¨®venes¡ª s¨®lo superada por Grecia (mientras que ya hay media docena de pa¨ªses europeos cercanos al pleno empleo, aunque creciendo menos); cuyo porcentaje de poblaci¨®n en riesgo de pobreza (22,3%) est¨¢ cinco puntos por encima del de la zona euro; con una desigualdad, medida por el ¨ªndice de Gini, casi tres puntos superior a la de la precrisis y 3,7 puntos m¨¢s que la eurozona. Buena paradoja es que la misma alta funcionaria que describ¨ªa esta dolorosa situaci¨®n, abundaba en el mismo tipo de pol¨ªticas seguidas hasta ahora para corregirla. Sin piedad.
No son medidas homog¨¦neas, pero vale la tendencia: casi al mismo tiempo, la organizaci¨®n no gubernamental Oxfam Intermon, presentaba un nuevo ¨ªndice con el objeto de medir los esfuerzos que hacen 155 pa¨ªses para reducir la brecha entre ricos y pobres. De los 35 pa¨ªses de la OCDE, Espa?a est¨¢ a la cola (puesto 24) de la lucha contra la desigualdad, lastrada por un mercado de trabajo que no funciona como tal pese a tantas reformas laborales, todas en la misma direcci¨®n, y de una pol¨ªtica fiscal que no contribuye precisamente a la redistribuci¨®n de la renta y la riqueza.
En los mismos d¨ªas, el Instituto Nacional de Estad¨ªstica publicaba el ¨ªndice de confianza empresarial: crece al mayor ritmo en los dos ¨²ltimos a?os y marca un r¨¦cord desde el inicio de su elaboraci¨®n en el arranque de 2013.
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