El nuevo TLC, un incentivo para el comercio electr¨®nico en M¨¦xico

Este mi¨¦rcoles inicia la renegociaci¨®n del Tratado de Libre Comercio de Am¨¦rica del Norte (TLCAN) en Washington y uno de los temas que podr¨ªan entrar a la discusi¨®n es la eliminaci¨®n de aranceles en sectores donde Estados Unidos tiene un super¨¢vit natural, entre los que est¨¢ el comercio electr¨®nico.

Recordemos que durante la campa?a presidencial, Donald Trump, el ahora presidente de Estados Unidos, prometi¨® que iniciar¨ªa una renegociaci¨®n del TLCAN o se saldr¨ªa de este, pues lo consideraba "el peor tratado de la historia" y causa directa de que muchos empleos manufactureros se perdieran. Trump ve en el d¨¦ficit comercial con M¨¦xico el origen de todos los males: el a?o pasado Estados Unidos import¨® 63.000 millones de d¨®lares m¨¢s de lo que export¨® a M¨¦xico.

Justamente una de las opciones para reducir el d¨¦ficit es aumentar el comercio en los sectores donde Estados Unidos puede exportar m¨¢s, como en el sector de la energ¨ªa, el comercio electr¨®nico, la econom¨ªa digital y los servicios, categor¨ªas que hoy no est¨¢n dentro del tratado o est¨¢n poco desarrolladas.

La renegociaci¨®n no devolver¨¢ probablemente los empleos manufactureros del Rust Belt, la zona industrial abandonada que le dio la victoria a Trump. Varios estudios recientes demuestran c¨®mo esos empleos han desaparecido por el crecimiento de la rob¨®tica y la entrada de China en la Organizaci¨®n Mundial del Comercio a principios de siglo, m¨¢s que por el tratado. Pero el solo hecho de sentar a M¨¦xico en la mesa de negociaci¨®n tras 23 a?os de tratado, s¨ª le dar¨ªa una victoria ante las elecciones intermedias.

Seg¨²n un estudio de la CEPAL, unas 350 grandes multinacionales se han beneficiado de TLCAN desde 1994. Eliminar los aranceles para el comercio electr¨®nico podr¨ªa permitir que muchas de las peque?as empresas o incluso productores independientes que hoy s¨®lo venden localmente exporten de una manera m¨¢s sencilla a ambos lados de la frontera y podr¨ªa abaratar los costos para el consumidor final.

Pero como siempre, el provecho que M¨¦xico pudiera sacar a esta ampliaci¨®n, si es que se concreta, va a depender de qu¨¦ tan preparados estemos.

Ponernos las pilas con el comercio electr¨®nico va en dos niveles: por supuesto que los aut¨®nomos y las peque?as, medianas y hasta grandes empresas tienen que profesionalizarse, establecer procesos para una mejor log¨ªstica, capacitarse en el uso de plataformas, posicionamiento en l¨ªnea y servicio, pero tambi¨¦n el gobierno debe mejorar la infraestructura necesaria para que podamos ser competitivos en esta rama.

Es vital que se mejore el servicio postal mexicano, una parte vertebral para el comercio. Los tiempos de entrega, las notificaciones, el rastreo y la simple seguridad de que no se perder¨¢ el env¨ªo son algunas de las cosas que a¨²n no alcanzan un est¨¢ndar m¨ªnimo.

Tambi¨¦n es necesario impulsar la bancarizaci¨®n. Muchos de los potenciales consumidores no le entran al comercio electr¨®nico simplemente porque no tienen un medio de pago aceptado. Algunos comercios nacionales lo han subsanado con sistemas que te permiten generar la orden y hacer el pago en efectivo en alguna tienda de conveniencia, pero esto por supuesto alenta el proceso de entrega pues pasan d¨ªas entre que se hace la orden, se paga, se confirma el pago y se env¨ªa.

El acceso a internet con mejor calidad y la modernizaci¨®n de las aduanas son los otros dos elementos que M¨¦xico tendr¨ªa que poner como prioridad si quiere que el comercio electr¨®nico crezca al potencial que deber¨ªa tener en el pa¨ªs. Ambos objetivos est¨¢n entre las prioridades del gobierno mexicano.

La renegociaci¨®n es una oportunidad hist¨®rica para que el TLCAN beneficie a M¨¦xico, pero igual que en los noventa la ¨²nica manera de aprovecharla es prepararse para ella.