La Administraci¨®n de Trump pide al FMI disciplina fiscal en la instituci¨®n
El secretario del Tesoro pide al Fondo que ponga el foco en el crecimiento privado en los pa¨ªses y advierte de que deber¨¢ revisar los salarios
Una de las se?as de identidad de la Administraci¨®n de Donald Trump ha sido la de poner en tela de juicio mucho de lo establecido respecto a los organismos multilaterales, pedirles cuentas en p¨²blico e incluso abrir la puerta a dejarlos. Lo hizo con la OTAN ya como candidato, sigui¨® con la Unesco, que acaba de abandonar, y esta semana, en plena reuni¨®n semestral de oto?o, empez¨® a criticar a organismos como el Fondo Monetario Internacional o el Banco Mundial. Washington quiere cambios, lo ha dicho ante los micr¨®fonos y, adem¨¢s, ha atacado donde duele: les ha advertido de que tendr¨¢n que revisar sus propios sueldos.
"A medida que el FMI pasa al periodo tras la crisis financiera global, urgimos a la instituci¨®n a estructurar sus programas de pr¨¦stamo para priorizar reformas que impulsen el crecimiento econ¨®mico guiado por el sector privado", dijo Mnuchin este viernes, durante su declaraci¨®n ante el Comit¨¦ Financiero y Monetario del organismo, recogida por Efe. Recalc¨® que el Fondo deber¨ªa ser "un ejemplo de disciplina fiscal", algo que exigir¨¢ medidas impopulares, como la revisi¨®n de "los salarios y beneficios de sus trabajadores".
La relaci¨®n entre el FMI y su principal socio, EE UU, no se encuentra en el mejor momento desde la llegada al poder de Trump. No solo pesa la marcha atr¨¢s en el globalismo tan caracter¨ªstico del presidente anterior, Barack Obama, sino tambi¨¦n las dudas que plantea el Fondo sobre la reforma fiscal que impulsa el republicano. En la cumbre de abril, los economistas del Fondo elaboraron sus previsiones contemplando un fuerte est¨ªmulo fiscal, pero este oto?o las han realizado sobre la base de un escenario sin cambios, neutral, debido al retraso que lleva esta anunciada reforma tributaria.? Adem¨¢s, el mi¨¦rcoles, el Fondo advirti¨® de que restar progresividad a los impuestos elevar¨ªa la desigualdad.
Fuentes del Tesoro criticaron al Fondo por estas valoraciones y Mnuchin despu¨¦s atiz¨® precisamente al organismo por la disciplina fiscal. Tambi¨¦n expres¨® dudas respecto a la ampliaci¨®n de capital del Banco Mundial. "M¨¢s capital no es la soluci¨®n cuando el capital existente no se distribuye de manera efectiva", dijo.
Las jornadas del FMI y el Banco Mundial han finalizado este fin de semana con buenas perspectivas, pero tambi¨¦n con el temor a que las trifulcas pol¨ªticas ponen en peligro el tir¨®n de las econom¨ªas avanzadas. Dice Maurice Obstfeld, el economista jefe del Fondo, que uno de los motivos por los que esta vez va en serio, que la aceleraci¨®n global ya es un hecho, estriba en que el repunte est¨¢ muy repartido geogr¨¢ficamente, que ahora son muchos los que tiran del carro. Si en las ¨²ltimas previsiones del FMI, hechas p¨²blicas esta semana en Washington, las perspectivas mejoradas de las econom¨ªas avanzadas explican la revisi¨®n al alza de 2017, las de las emergentes desempe?an un papel m¨¢s importante en las de 2018. Habr¨ªa que retroceder una d¨¦cada para encontrar un crecimiento tan repartido.
Si se mirase el mundo como una sola econom¨ªa, el crecimiento previsto para este a?o se situar¨ªa en el 3,6% y para el siguiente en el 3,7%, seg¨²n el Fondo, una d¨¦cima m¨¢s de lo que hab¨ªa calculado hace solo cuatro meses. Am¨¦rica Latina avanza a un ritmo del 1,2% en 2017, dejando atr¨¢s una contracci¨®n del 0,9% en 2016 y la zona euro lo har¨¢ un 2,1% (dos d¨¦cimas m¨¢s de los que se estimaba en julio). En Estados Unidos, la primera potencia, el 2,2% de 2017 supone una mejora de una d¨¦cima con relaci¨®n a la ¨²ltima proyecci¨®n y en China, la segunda mayor econom¨ªa del planeta, la demanda interna mejor¨® y el Fondo elev¨® sus previsiones en una d¨¦cima, hasta el 6,8%
Aun as¨ª, hay varios de nubarrones que empa?an las proyecciones de la instituci¨®n. Uno es un viejo conocido, ese potencial de crecimiento tan modesto para el medio plazo, que hacen pensar que el mundo, quiz¨¢, deba acostumbrarse a avanzar sin tasas de expansi¨®n econ¨®micas tan robustas como las del pasado, no por crisis alguna, sino por motivos estructurales. Otro, en cambio, ha tomado impulso en los ¨²ltimos a?os, las disputas pol¨ªticas entre pa¨ªses y regiones, siempre, claro est¨¢, con dinero de por medio. Las dif¨ªciles negociaciones del Brexit y el riesgo de ruptura en el reside?o del TLC o Nafta-el gran pacto comercial entre EEUU, Canad¨¢ y M¨¦xico-, han planeado durante toda la semana.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.