La extrema sequ¨ªa pasa factura al recibo de la luz

Que la factura de la luz se desboque se ha convertido en un cl¨¢sico de todos los oto?os e inviernos, un episodio doloroso para los bolsillos de al menos los 11,5 millones de consumidores que se acogen a la tarifa regulada. En el invierno de 2015, fue el anterior sistema de subastas el que dispar¨® el precio; en el del a?o pasado, la causa del alza fue el par¨®n de varias centrales nucleares francesas, y este a?o el incremento se achaca a la sequ¨ªa.

La escasez de lluvias parece que tendr¨¢ consecuencias m¨¢s graves este a?o. Por el momento, ya ha motivado que el recibo el¨¦ctrico se dispare un 12% y el del gas entre un 3,2% y un 4,5% de enero a octubre, seg¨²n datos del Ministerio de Energ¨ªa, Turismo y Agenda Digital. El Gobierno y las el¨¦ctricas est¨¢n de acuerdo en culpar a la pertinaz sequ¨ªa del encarecimiento del recibo, por un lado, y de los p¨¦simos resultados financieros de las compa?¨ªas, por otro.

Pero la sequ¨ªa, ?es realmente la causa para ese alza desbordada de la factura energ¨¦tica o solo una excusa para ocultar un sistema ineficiente? Los ¨²ltimos datos meteorol¨®gicos apuntan en la primera direcci¨®n. Los embalses se encuentran al 37,5% de su capacidad, el menor nivel desde 1995, seg¨²n el Ministerio de Agricultura. Con los pantanos vac¨ªos, la producci¨®n hidroel¨¦ctrica se ha hundido: en octubre, fue de 725 gigavatios hora, la menor cifra desde que hay registros (enero de 1990), seg¨²n alert¨® Red El¨¦ctrica (REE).

Los embalses se encuentran al 37,5% de su capacidad, el menor nivel desde 1995

Como consecuencia, la energ¨ªa hidr¨¢ulica solo represent¨® en ese mes el 3,6% del el conjunto de la generaci¨®n de la electricidad. Y ha pasado de suponer el 15% en los diez primeros meses del 2016 al 7,5% en lo que va de este ejercicio. Tambi¨¦n ha ca¨ªdo considerablemente la energ¨ªa e¨®lica por la falta de viento.

La carencia de estas energ¨ªas renovables, cuyo coste est¨¢ cercano a cero, se debe suplir quemando carb¨®n o gas en las centrales t¨¦rmicas o de ciclo combinado, mucho m¨¢s caros evidentemente que el viento o el agua. Para agravar la ecuaci¨®n, las materias primas se han disparado en el ¨²ltimo a?o: un 15% el barril de Brent; un 7% el gas natural y un 12% el carb¨®n, seg¨²n datos de Energ¨ªa.

La baja pluviosidad no solo afecta al consumidor sino tambi¨¦n a la cuenta de resultados de las el¨¦ctricas. Las tres principales compa?¨ªas ¨CEndesa, Iberdrola y Gas Natural Fenosa- ganaron en conjunto 733 millones de euros menos durante los nueve primeros meses de este a?o. Iberdrola, la m¨¢s dependiente del recurso hidroel¨¦ctrico, registr¨® un descenso del 57,6% en la producci¨®n hidr¨¢ulica en Espa?a, lo que le ha supuesto un impacto negativo en su beneficio de explotaci¨®n (Ebitda) de 400 millones de euros.

Aunque ninguna de las compa?¨ªas ni la patronal Unesa quiere dar una opini¨®n oficial, en el sector se quejan de que se relacione esa subida en el recibo de la luz con su ansia de beneficio, cuando se da la paradoja de que cuanto m¨¢s altos son los precios menos ganan las el¨¦ctricas, como se?al¨® el presidente de Endesa, Borja Prado, en la presentaci¨®n de resultados trimestrales.

Solo el 3,6% de la energ¨ªa que se produjo en octubre fue hidr¨¢ulica

¡°Las el¨¦ctricas comercializan m¨¢s energ¨ªa de la que son capaces de generar y, por tanto, tienen que comprarla para vend¨¦rsela a sus clientes. Adem¨¢s, donde m¨¢s margen tienen es precisamente en la producci¨®n de las energ¨ªas renovables porque solo tienen que dar al bot¨®n o abrir la compuerta para empezar a ganar dinero¡±, explica un analista del sector.

Un sistema ineficiente

No todos tienen la misma opini¨®n. Algunos como el primer presidente de Red El¨¦ctrica de Espa?a (1998-1997) y actual presidente de Economistas Frente a la Crisis, Jorge Fabra, cree que existe un mal estructural end¨¦mico en el mercado el¨¦ctrico fruto de una regulaci¨®n ineficiente. ¡°El mercado de la electricidad es un completo disparate, y la prueba del nueve de que no funciona es la volatilidad de los precios. El coste de producir energ¨ªa hidroel¨¦ctrica, e¨®lica, fotovoltaica o nuclear es constante, pero es el coste de la energ¨ªa m¨¢s cara, como la de una central de ciclo combinado, la que cubre el ¨²ltimo tramo de la demanda, la que impone el precio final. Y eso es as¨ª porque se parte de la falacia de un precio ¨²nico el¨¦ctrico, cuando cada kilovatio hora da un servicio diferente y debe tener una retribuci¨®n diferente¡±.

Fabra se?ala que deber¨ªa fijarse un precio distinto por cada tipo de tecnolog¨ªa para que el mercado funcionara de forma m¨¢s eficiente, porque adem¨¢s en energ¨ªas como la hidr¨¢ulica o la nuclear no hay posibilidad de nuevos entrantes y, por tanto, no hay competencia. ¡°Al final el consumidor paga el agua al precio del gas o del petr¨®leo¡±, certifica Fabra.

Pedro Linares, profesor de la Universidad Pontificia de Comillas y director de Economics for Energy no cree que haya que pensar en una teor¨ªa conspirativa aunque el sistema sea mejorable. ¡°Cuando se unen factores, como los que han sucedido, que no hay agua, poco viento y aumenta el precio del gas, es normal que suban los precio. Tenemos un sistema marginalista en lugar de uno de costes regulados como el antiguo marco legal estable. Y la gente se pregunta si con el sistema actual las empresas pueden fijar los precios a su voluntad. Pero para eso est¨¢ la CNMC, para vigilar que eso no se produzca. En realidad, si los dos sistemas funcionan bien, el resultado final es el mismo y los consumidores deber¨ªan pagar lo mismo. Pero es que adem¨¢s la UE ha decidido que todos los pa¨ªses deben adoptar el sistema marginalista por lo que no tiene sentido la discusi¨®n. La CNMC tiene que hacer su trabajo de inspecci¨®n. Y los consumidores puede reaccionar adoptando medidas de eficiencia energ¨¦tica¡±.

Otros como Carlos Garc¨ªa Buitr¨®n, director general de Ecovatios, una el¨¦ctrica que solo comercializa energ¨ªas renovables, recuerdan que en Espa?a la energ¨ªa con mayor potencial, y que hasta ahora ha sido desaprovechado, no es la hidr¨¢ulica ni la e¨®lica sino la solar, y frente al t¨®pico de las altas subvenciones afirma que ¡°el coste actual y la maduraci¨®n tecnol¨®gica de la energ¨ªa solar fotovoltaica hace que los nuevos proyectos no necesiten ning¨²n tipo de incentivo¡±.

Actualmente, hay unos 4.500 MW de energ¨ªa solar fotovoltaica, que satisfacen solo un 3% de la demanda. Por comparaci¨®n, en Alemania hay 42.000 MW fotovoltaicos; Italia tiene unos 20.000 MW y durante 2016 en Estados Unidos se instal¨® m¨¢s potencia de origen solar que de cualquier otra fuente de generaci¨®n.

"En esos pa¨ªses es habitual que los precios horarios muy bajos o tendentes a cero en el mercado mayorista no solo se asocien a la entrada de mucha e¨®lica con la llegada de borrascas (como ya sucede en Espa?a), sino tambi¨¦n a los periodos soleados durante todo el a?o, especialmente durante las horas centrales del d¨ªa. Precisamente, en Espa?a esas horas est¨¢n entre las m¨¢s caras porque corresponden a periodos de demanda elevada. En un pa¨ªs como el nuestro, de largos periodos anticicl¨®nicos afectando a la gran mayor¨ªa del territorio, este efecto depresor de los precios del pool asociado a la producci¨®n solar (que actualmente no se produce) podr¨ªa tener un impacto positivo en el precio final de la electricidad para los consumidores. Y podr¨ªa darse si Espa?a tuviese una potencia instalada fotovoltaica comparable a los pa¨ªses de nuestro entorno", se?ala el directivo de la el¨¦ctrica verde.

Una alarma social innecesaria

El sector el¨¦ctrico no suele hacer p¨²blicas sus posiciones. Tampoco en esta ocasi¨®n se ha pronunciado, pese a la petici¨®n de este diario. Pero existe un malestar porque consideran que cuando se producen subidas importantes en el precio de la luz tanto en invierno como en verano, se crea una alarma social, que no responde a un problema de funcionamiento del mercado sino a medidas pol¨ªticas equivocadas.

¡°Lo cierto es que la mayor parte del a?o el precio es muy bajo y es un torpeza del Gobierno mantener la referencia horaria en la tarifa dom¨¦stica, cuando el consumidor pagar¨ªa lo mismo si se aplicara una media trimestral o incluso anual, al igual que ocurre con el Euribor y las hipotecas. En la actualidad, Espa?a es el ¨²nico pa¨ªs de la zona euro donde el precio de la luz para los consumidores dom¨¦sticos est¨¢ ligado al mercado horario, con la consiguiente volatilidad y la fuerte exposici¨®n al riesgo para clientes que no tienen capacidad de hacer coberturas¡±, sostienen en fuentes cercanas al sector.

Por eso, no ha sentado nada bien las anunciadas por el Gobierno para paliar la subida del recibo y, en particular, la medida aprobada el pasado viernes por el Consejo de Ministros de obligar a los operadores dominantes -Gas Natural Fenosa y Endesa- a ofrecer gas natural en el mercado organizado (Mibgas), para evitar subidas de precios derivadas de la falta de liquidez.

¡°El Ejecutivo intenta ahora parchear estos sobresaltos para los consumidores con nuevas medidas electoralistas que en la pr¨¢ctica no van a conseguir ninguna reducci¨®n en los precios, sino generar m¨¢s confusi¨®n en la tarifa el¨¦ctrica y perjudicar una vez m¨¢s la reputaci¨®n del sector. El recibo de la luz estar¨ªa entre los m¨¢s bajos de Europa si se eliminaran partidas que deben ir en los Presupuestos Generales del Estado. El Gobierno tiene en su mano poder aplicar una rebaja del 40% en el recibo de la luz¡±, se?alan las mismas fuentes.